El segundo libro de la trilogía Los secretos de nuestras familias
Advertencia contenido sensible, hay escenas de asesinatos, temas de depresió..
Bridgette y Marinette son las nuevas guardias el Maestro Fu sentía que ya era la hora de darles a nuest...
Marinette siente una paz profunda. El sonido suave de las cascadas y la brisa que acaricia su rostro contribuyen a su estado de serenidad. A medida que avanza por el camino de piedras, una sensación de curiosidad y tranquilidad la envuelve.
-Marinette, ven, ya estás cerca -dice una voz femenina.
Se comienza a ver una silueta de una mujer en la niebla. La mujer la sigue llamando.
Marinette ya consigue ver a la mujer entre la niebla
-Hola de nuevo, Marinette -dice Miraclette. La diseñadora le devuelve el saludo.
Al ver a Miraclette, Marinette siente una alegría reconfortante. La presencia de su antigua mentora le proporciona un sentimiento de seguridad y guía.
-Vas a sentarte, cruzar ambas piernas y cerrar los ojos conmigo -dice la antigua heroína.
Marinette se sienta, cruza ambas piernas y cierra los ojos. Miraclette hace lo mismo y toma las manos de la adolescente. Miraclette comienza a decir palabras en chino y Marinette empieza a ver visiones.
Sentada junto a Miraclette, Marinette experimenta una conexión espiritual intensa. La toma de manos y las palabras en chino crean un ambiente místico y solemne. Las visiones que comienzan a surgir en su mente traen consigo una mezcla de asombro y revelación, mientras siente que está a punto de descubrir algo crucial guiada por el sabio Maestro Fu.
Observa que el anciano está en una habitación amueblada con dos literas al fondo, una estantería llena de libros, un escritorio y un sofá.
El anciano comienza a buscar entre unas cajas y saca unos papeles con planos de París, llenos de garabatos y apuntes sobre distintos sitios de la ciudad.
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Marinette se despierta y rápidamente apunta todo lo que recuerda.
-Tikki, ven, vamos a levantar a Bridgette .
-¿Tuviste sueños sobre alguna pista? -pregunta Tikki.
-Sí -responde Marinette.
El ambiente en la habitación se torna tenso cuando Marinette despierta a Bridgette. La urgencia en su voz y el nerviosismo en sus movimientos reflejan la gravedad de la situación. Bridgette, aún somnolienta, se ve sorprendida y confundida por el repentino despertar.
-¡¿Qué pasa?! Es muy pronto, estamos en sábado -dice Bridgette.
-Averigüé unos planos de la ciudad. En la parte norte de París, hay unos almacenes antiguos de almohadas abandonados. Por la parte de atrás del almacén está el puente de Marie, donde pasa el río Sena. Estaba señalada la parte baja de ese puente, donde en ese punto hace un arco -explica Marinette.
