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Después de aquel momento, los dos se quedaron en el suelo sin decir nada, el único ruido presente era el que hacía la lluvia al caer al suelo.

Kurt con delicadeza le acercó la lata de sopa a Axl, el colorado tomó temblorosamente la lata, aún no procesaba lo que estuvo a punto de hacer.

-No fue tu culpa.- Susurro Kurt al ver como el chico aún pensaba en lo de la rata.- No sabías lo que hacías, no es tu culpa.

-Yo...- Axl no supo que decir, solo asintió.

Abrió la lata, miro su contenido y luego al rubio; le acercó con timidez la lata. Kurt lo miro y negó.

Axl entendió perfectamente a lo que se refirió y con tres dedos tomó un poco del contenido de la lata para llevárselo a la boca.

Así estuvo un rato o minutos, hasta que se acabo todo. Kurt solo lo miro comer, mientras escuchaba la lluvia.

-¿Saldremos de aquí?- Pregunto Axl, pero Kurt solo lo miro confundido.- Bueno, ¿crees qué esto se acabe?

-Si, lo hará.- Kurt no lo creía, pero quería darle un poco de esperanza, aún si no la había.

-Mmm.- Y, Axl, tampoco lo creía, sin embargo esperaba que lo hiciera.

Los dos volvieron a quedar en silencio, hasta que el rubio se levantó del suelo para seguir su rumbo; aunque no lo había, no seguían un rumbo, solo caminaban esperando encontrar un lugar donde refugiarse.

Axl se levantó del suelo con ayuda del rubio, empezaron a caminar entre la fría lluvia.

◼️◾▪️

En algún otro lado de esa ciudad pálida y sin alma; un joven pelinegro corre de esas criaturas deformes: los maniquís.

Aquellas criaturas que son echas de plástico, con diferentes partes de maniquís.

Eso eran ellos; simples maniquís que podían moverse para perseguir a las personas que aún seguían con vida.

Se escondió entre los árboles de ese bosque, intentando regular su respiración en silencio para que ellos no lo encuentren.

Se recarga en un árbol, mientras su mente solo puede pensar en una persona.

“Duff”

𝙲𝚒𝚝𝚢 𝚗𝚒𝚐𝚑𝚝𝚖𝚊𝚛𝚎𝚜 -𝙺𝚞𝚛𝚝𝚊𝚡𝚕-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora