無職 - 𝐌𝐮𝐬𝐡𝐨𝐤𝐮 𝐓𝐞𝐧𝐬𝐞𝐢 | El más fuerte ~ OP!Malereader

47 | Viaje.

A partir de ahora los capítulos seran más largos y probablemente tarden en publicarse, comenten y voten para traerlos más rápido!

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Punto de vista: T/N Greyrath.

Me sentía aliviado al saber que acortaríamos la ruta gracias a unos círculos mágicos, los cuales fueron dados por nuestra querida Nanahoshi, al parecer son círculos que Orsted usa. Compramos un caballo y comenzamos a cabalgar hacía un bosque, en donde se encontraban aquellos circulos.

Según Nanahoshi, después de usar el circulo, llegaríamos al continente Begaritto. Desde donde salgamos iríamos hacia el norte, hasta llegar a un oasis. El viaje al desierto sería duro, incluso sin Rudeus y Elinalise tendría problemas debido a la falta de alimentos, por supuesto, después de que fui teletransportado por primera vez, siempre cargo alimentos en mi inventario, sin embargo, en cualquier momento pueden acabarse.

Después de llegar allí, Rudeus contrataría a un guía para que nos llevara a Lapan, ya que lo más seguro es que el viaje dure un mes, tampoco queremos perdernos ni que nos atrasemos.

Ciertamente la cabalgada me causo algo de vergüenza y gracia, tres personas montados en un mismo caballo, quería ser yo el que tomara las riendas pero Elinalise tomo mi lugar, no me quedo de otra que tomar su cintura y que Rudeus tomara la mía. ¿Cómo no podría evitarme sentirme así? Después de todo soy la octava potencia mundial.

Cabalgamos por horas hasta que llego el anochecer, rápidamente hicimos un campamento improvisado mientras Rudeus hacía una fogata. Elinalise y yo acomodamos los sacos para dormir, el plan era que cada uno tomaría guardia de dos horas y media, después de eso otro lo suplantaría.

Elinalise quien bebía una taza de cerveza, me miro para después sonreírme. "Entonces el gran Klein Bardfort hizo un espacio para salvar a alguien, ¿eh?" Al decir eso soltó una risa sarcástica que duro por al menos diez segundos. "Disculpa, espero que no creas que soy molesta, quiero decirte gracias por ayudarnos. ¿Hay un motivo por el cuál lo estas haciendo?"

No tenía otro motivo más que salvar a mi madre, por supuesto, no se lo diría, por lo tanto mentí. "Rudeus es mi amigo... si el necesita ayuda yo se la daré, además, es su madre... no podría decir que no."

Mire a mi lado derecho un manto que envolvía una arma un poco corta a lo que normalmente era, con mis dos manos comencé a desenvolver mostrando un báculo de color café, fácilmente podía ser confundido con un bastón. "Rudeus."

Al escuchar su nombre, Rudeus respondió con un "¿Si?", su voz tranquila hizo que de forma inconsciente le sonriera.

"Encontré esto para ti, lo mejor seria que lo tomaras." Extendí mis dos manos mientras le entregaba el báculo con cuidado, Rudeus y Elinalise lucían confundidos, dos segundos después Rudeus reacciono y tomo el báculo.

Obviamente Rudeus no sabía de donde había venido de este báculo, por más que intentara no encontraría información, gracias a que era un objeto dado por el sistema, un objeto que conseguí en un giro de la ruleta legendaria. Si aún pudiera usar magia sin duda me dolería entregarlo, pero me era inútil, sabía que el podría darle un buen uso.

"Quisiera que intentaras hacer uso de tu magia de tierra." Al instante se dio cuenta que el báculo era ligero, no pesaba como lo de un báculo normal, casi como una rama. Se alejo de nosotros unos cuantos metros e hizo aparecer una pequeña estaca en la punta del báculo, pero había pasado algo, en su lado derecho e izquierdo aparecieron una estaca, creando un total de tres estacas.

Este era el uno de los poderes del báculo, crear dos ataques al hacer solo uno, si hacía dos estacas se crearían cuatro extra, realmente no sabía cual seria el límite, pero Rudeus al tener un mana tan amplio estaría seguro que podría superar los cien ataques sin dificultad.