無職 - 𝐌𝐮𝐬𝐡𝐨𝐤𝐮 𝐓𝐞𝐧𝐬𝐞𝐢 | El más fuerte ~ OP!Malereader

43 | Honestidad.

Lejos de la academia Ranoa.

Klein y Sylvie caminaban por un campo cubierto de nieve, anteriormente estaba lleno de pasto pero por el invierno el color verde había sido sustituido por uno blanco. Mientras caminaban la nieve de su alrededor se derretía, Sylvie quien usaba magia de fuego para calentar su cuerpo y el de su padre apunto hacía un campamento que estaba a lo lejos.

"Allí." Señalo con su pequeño dedo índice hacía un grupo de mercenarios, cada uno llevaba en sus brazos una caja de madera, Klein quien cerro los ojos para ver mejor noto que las cajas estaban cerradas, haciéndole imposible ver su contenido.

"Ese campamento..." Klein rápidamente llego a una conclusión. "Pertenece a Elliot Sworn... ¿Tu crees que debamos atacar?" Su viaje tuvo el propósito de buscar a Elliot Sworn sin embargo no tenia la intención de combatir contra el. Simplemente querían observar sus movimientos antes de crear un plan para acabar con su vida.

Sylvie miro su mano antes de dar una respuesta. En su palma se creo una esfera de color naranja y rojo fuerte, de la esfera desprendían llamas como si se tratase del sol. Después su forma y color cambiaron, a un color azul fuerte, la esfera se convirtió en liquido mientras se movía como un mar.

"Si llega a estar Elliot... podríamos tener una oportunidad." El color azul desapareció, en su lugar apareció una esfera solida de color café, simulando ser la tierra. "Padre. ¿Y si Elliot ya preparo esto? Hemos estado acabando con sus campamentos pero no ha dejado ninguna advertencia ni se ha molestado. Más bien esto parece como si fuera un juego para el."

La esfera solida de tierra desapareció, mostrando  una esfera sin color, pero al mismo tiempo podías ver una forma, era el mismo viento que había cambiado su forma. Ante las palabras de Sylvie Klein se detuvo, miro por algunos segundos el campamento antes de mirar a su pequeña niña.

"Desde un principio el ha sido alguien misterioso. Probablemente piense que no somos un enemigo el cual deba preocuparse. El es fuerte pero si nosotros dos desde el primer momento vamos con todo podemos tener una oportunidad."

Soltó una pequeña risa y cambio su tono a uno suave, buscando tranquilizar a Sylvie. "Además, tu magia ya ha subido, ¿no? Tu magia de fuego, tierra, agua y aire es de nivel sagrado."

"Tienes razón... ¡Nosotros podemos!" A las palabras de su padre, Sylvie se lleno de ánimos. Siguieron su paso y solo fue cuestión de minutos para que llegaran.

No tardo mucho para que los mercenarios se detuvieran, cada uno miro hacía el oeste y a unos cuantos metros de ellos la presencia de dos personas aparecía, la ventisca ocultaba sus rostros, sin embargo no su silueta. Dos cuernos y dos cuernos.

Al instante sabían de quién se trataba. Dejaron las cajas en el suelo y desvainaron sus espadas, los diez magos que bebían un café  y alcohol se dieron cuenta del extraño comportamiento de sus compañeros, por lo que sin dudar tomaron sus bastones y se colocaron a su lado.

"Ellos... dos cuernos... esa niña..." Murmuro un mago entrecerrando los ojos, con cada paso que daba Klein y Sylvie hacía temblar a su alrededor. La nieve que rodeaba en campamento desapareció un segundo. "¡Ese chico! ¡Octava potencia!"

Ágilmente movió su báculo y lo apunto hacía el. En la punta de su báculo un hechizo de tierra comenzó a manifestarse. Era una estaca la cual media un total de 45 centímetros, la punta era lo suficientemente filosa que podía atravesar sin dificultad un dragón rojo.

Pero no solo fue una. Fueron un total de diez estacas. Los mercenarios que ya habían desvainado sus espadas y hachas, no se atrevieron a acercarse, sabían muy bien con quien trataban, a lo cual decidieron esperar los proyectiles de sus compañeros. Klein quién veía esto con alivio al no encontrarse aún con Elliot, no pudo evitar soltar una pequeña risa.