||Omegaverse||
La familia Waybright está en quiebra, la única manera de salvarse es comprometer a su hija mayor con la mayor de la familia Wu-Leviathan.
-Acepta está rosa en señal de amor.
La alfa estaba completamente enamorada.
-Por ti solo siento...
-¿Ya están los informes?- Sasha asintió, dejando la carpeta en el escritorio de su jefa.- Bien, ¿Están los informes de las entrevistas?
-Si señora. Solo faltó un niño, pero reagendaron para la próxima semana.
-Bien, entonces ya te puedes ir Waybright, gracias por ayudar.- Sonrió la mayor y Sasha solo le devolvió la sonrisa como respuesta.
Salió del consultorio soltando un suspiro enorme. Trabajar con niños era fantástico para ella, pero era demasiado trabajo, le dolían los pies por lo que su nota mental era usar tenis en sus próximas consultas con los chicos hiperactivos.
Al llegar a recepción pudo ver a cierta alfa alimentar a los peces que había en el lugar.
-¿Marcy?
La alfa se asusto, tirando gran parte de la comida de peces en la pecera. Sasha soltó una pequeña risa que se volvió en una enorme carcajada.
Una hermosa carcajada.
-Yo... Lo siento ¿Morirán? ¿Se ahogaran? ¿Los peces se ahogan?
-Marcy, está bien. No les pasará nada si comen un poco más.- Sonrió Sasha en busca de tranquilizar a la mayor.-. A veces no comen en casi todo el día.
-Oh...
-¿Qué haces por acá?- Pregunto Sasha, acomodando el flequillo de la mayor.- ¿Mis padres te dijeron donde trabajaba?
-¡No! No, no.- Murmuró Marcy rápidamente.- Es solo que... Yo... Vengo a terapia.- Susurró con vergüenza.
-¿En una estancia infantil?
-¡Hey! También atienden a chicos con... Con espectro autista...
Sasha se quedó callada un rato, asintiendo levemente ante la gran confesión.
-Okey, entiendo.- Sonrió.- ¿Haz acabado tu sesión?
-Hace un momento, me distraje con los peces.- Respondió con una sonrisa, agarrando inconscientemente la mano de la menor.- ¿Entonces trabajas acá?
-Asi es, me estoy especializando con niños y adolescentes. Soy buena con ellos y haciendo que puedan desahogarse.
-¡Genial! ¡Es muy lindo de tu parte Sashy!
-¿Sashy?- Preguntó Sasha con ternura.
-¡Oh! Yo-yo... Si yo... Pensé... Es que, queda bien con tu nombre...
-Hey, Mars.- Paro Sasha.- Está bien, es un lindo apodo.
Marcy se sonrojo levemente y solo se limito a sonreír.
-¿Puedo invitarte a comer?
-Solo si es una hamburguesa.
-¡Trato echo!
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-Y entonces tuve que cortarme el pelo.- Rió Sasha.
-Santo cielo.- Acompaño Marcy con risas.- ¿Todo por qué Ivy te vómito?
-¡Si! Te juro que lave y lave y el olor jamás se fue... Santo cielo, ni siquiera lo dude, solo agarre las tijeras y lo corte.
-Wow... Yo tarde casi 5 años en dejarlo crecer.- Sasha asintió, mordiendo de su hamburguesa.- Me gustaba tenerlo corto, pero así me da un toque rockero.
-Ouh, si que te lo da.
-¿Tú crees?
-Bueno, esas perforaciones le dan el toque, tal vez...- La Omega se quedó pensando un poco, tratando de ver qué más podía agregarle a la mayor.- Oh ya se. Quítate tú chaqueta.
Marcy asintió y rápidamente habían intercambiado sus prendas. La diferencia de altura era notoria, mientras que a Marcy le quedaba la chaqueta de cuero algo holgada, a Sasha le quedaba la chaqueta de mezclilla algo justa.
Olor a fresas y chocolate, algo que juntos hacen una gran combinación.
-Ahora si te ves como un verdadero Rock-Star.- Sonrió Sasha, acomodando un mechón rebelde de su cabello.
Marcy sintió su sonrojo levemente, el aroma de Sasha empezaba a alterar todo dentro de su cuerpo.
Su pecho se calentó, y sus manos habían empezado a sudar. Se sentía...
