CAPÍTULO 14. Relación de Prueba

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Por fin Elizabeth iba a volver a la ciudad, esta tarde iría a recogerla al aeropuerto la bienvenida fue eufórica, aunque no imagine que Eli regresara tan feliz después de esa tragedia, pero me alegraba que estuviera bien y lo mejor que esta vez íbamos a ser las buenas amigas de siempre.


-Te veo feliz- le dije asombrada.

-¡Bueno! Me duele que se haya ido mi abuela, pero la vida sigue y yo creo que mi abuela hubiera preferido verme sonreír que llorar por el resto de mi vida, sé que ella está en algún lugar.

-Me alegra mucho que estés bien.- le di un abrazo y le ayude subiendo sus maletas al auto.

-Te extrañe mucho Eli, no sabes la cantidad de cosas por las que he pasado.

Le conté a Eli todo acerca de Gavin y de mi larga y depresiva semana en el camino a casa.

-No puedo creer esto Sid, nunca pense que Gavin pudiera salir con ella- decía Elizabeth desempacando su ropa.- son buenos amigos, pero ¿salir? Ella hasta parece lesbiana.

-¿Cómo dices eso? La maestra no puede ser lesbiana.

-Pues no sé, a mí me parece, ella parece indiferente a los hombres.

-Deja de hacer suposiciones a Gavin no le es para nada indiferente y eso me asusta, ella tiene su edad y es una mujer hermosa.- muevo la cabeza de un lado a otro.

-No seas tonta, Gavin te adora sin importar lo que haya dicho, pero mientras él se da cuenta de eso tú debes salir con otros chicos y darte un espacio.

-¿Qué? Y ¿con quién?

-¿Qué tal Jacob?

-Tiene novia- le deje claro.

-Bah! ¿Y qué? No vas a salir con su novia sino con él.

-No hare el papel de zorra en esa relación.

-Cariño, solo te pido que salgas con él así sea como amigos pero haz algo, es sábado y estás viendo un programa de humor.

-Es muy buen programa.- aclaré. -sabes que mi madre no me deja salir a lugares con chicos.

-Tu madre dice muchas cosas y tú nunca le haces caso así que no te hagas la santa.

-Moriré sola al igual que tu- me tiro en la cama y me siento en ella rápidamente- tengo una idea, ¿Por qué no nos vamos a vivir a Alaska en una cabaña?

-Mala idea, mejor dame tu teléfono.- estira su mano.

-¿Para qué?

-Para evitar ese viaje a Alaska.

Le di mi teléfono.

-Adivina quién está conectado.

-Oh! Déjame adivinar ¿Jacob?- dije sin ánimo.

-Sí, le hablare por ti, si tiene mala ortografía lo voy a eliminar y se le quitara automáticamente lo guapo.

Sonrío.

"Hola Jacob ¿Cómo estás?"

Eli me leía todo lo que escribía y decía.

"Muy bien, vaya estaba esperando que estuvieras conectada, necesitaba hablarte"

-Uuhh! Te necesita y además no tiene mala ortografía.

-Todo el mundo usa auto corrector- arqueo una ceja.

-Cállate.

"Oh! Y ¿de qué?"

"No sé, de cualquier cosa, tu despejas mi mente"

Sonrío al escuchar eso.

"¿Qué estás haciendo?"

"Iba ir a una fiesta, pero no quiero ir solo, además no suelo ir a las fiestas de mis compañeros de la universidad"

"Vaya, tú con fiesta y yo viendo un programa de humor"

-¡Eli!

-Es la verdad.

"Yo también lo estoy viendo"


Escribiendo...

-Ay amiga, no sé qué es lo que tanto escribe, me lleva así un minuto.

-Seguro fue al baño.

-El teléfono no es alámbrico.

"No te gustaría ir a la fiesta conmigo, así no me sentiría tan incómodo y podríamos pasarla bien"

-Ahh! Te invito- grita Eli.


-Baja la voz.

-Vas a esa fiesta, ahora mismo.

-No, dile que no.

-No te pregunte si quieres, vas a ir.

"Está bien Jacob"- respondió.

"Entonces paso por ti a las 9"

-Vete a bañar, hueles a soltería.

La miro mal y me dirijo al baño- tú nunca escuchas.

-Y depílate "TODO"- acentúa.

-¡Eli!- la regaño y frunzo el ceño.

Eli uso su magia sobre mí (de nuevo) y eligió mi ropa, maquillaje y peinado.

-Por Dios, parezco flor primaveral.

-Es porque es mi ropa, tu madre ya debe comprarte una nueva.

-Te ves hermosa.

-Ay si, ya voy a salir... ¡No puede ser!

-¿Qué?

-No puedo salir con Jacob, le dije a Jonathan que iba a acompañarlo a casa de su tío para lo del trabajo.

-Cálmate, lo pospondré por ti o si quieres voy con Jonathan.

-Te aguantarías a Jonathan una noche.

-Con tal de que salgas, sí.

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