¿Que tengo que hacer?

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Lucero toca la puerta bastante preocupada, pues no dejaba de pensar en las peores escenas que podían suceder en ese pequeño encuentro...

Manuel: Hola Lucero
Lucero: Hola Manuelito ¿Cómo estás? Ella intentó hacer como si nada pasara
Manuel: Muy bien ¿y tú? Dijo mientras la invitaba a pasar. Mientras Lucero entraba Manuel apoya su mano en su espalda baja para que pasara y el pudiera cerrar la puerta.
Lucero: Gracias Manuelito oye una pregunta ¿Por que andas tan seco conmigo últimamente?
Manuel: ¿Yo? No por que lo estaría
Lucero: ay Manuel te conozco mejor que nadie
Manuel: Pero no me Isa nada en serio
Lucero: ¿Seguro?
Manuel: Aja dice poco seguro
Lucero: Manuel....
Manuel: ¿Quires algo de tomar? Dice intentando cambiar el tema
Lucero: Emmm... ¿Tienes agua mineral?
Manuel: Si claro!! Ahorita te la traigo
Lucero: Va, gracias Manuel, pero no intentes cambiar el tema...¿Que te pase?
Manuel: Nada Lu de verdad
Lucero: No te hagas del rogar eh por favor
Manuel: sería mi venganza...
Lucero sonríe, pues sabía a que se refería.
Lucero: puedes venir ya por fa
Manuel: VOOOOOOY grita desde la cocina
Manuel llega y se sienta en el sillón
Lucero: Bueno aja ya me vas a decir que te pasa?
Manuel: Dale con lo mismo, nada
Lucero: estas así desde el jueves en la noche...
Manuel se queda callado y baja la mirada
Lucero: Manuel por fa dime
Manuel: Aja bueno que paso el jueves o que
Lucero: ¿estas celoso?
Manuel: Como no voy a estarlo, si se supone que tú y yo tenemos algo o bueno teníamos algo, nada serio, pero, había algo...
Lucero: Y eso no tiene por que cambiar, lo que dije de Michel fue para bajarlos de su nube, ya sospechaban mucho y no nos lo podíamos permitir, al menos, no yo
Manuel: ¿Sabes lo mal que me sentí?
Lucero: ¿Sabes lo mal que me sentí yo al ver que cantaste "Un buen perdedor"?
Manuel: Una cosa no lleva a la otra por favor Lucero.
Lucero: A como no!!!
Manuel: pues no, y si yo cante eso fue por ti!
Lucero: ¿por mi? Manuel ni te entiendo
Todo empezó con reclamo pero con una especie de comedia, pero esto ya se estaba volviendo más personal.
Manuel: Si Lucero por ti, por que si tú eres feliz con el pues, que bueno no sabes cuanto gusto me da.
Lucero: Y a ti quien te confirmó que volví con el? Además tú estás con Camila Manuel, poe favor.
Manuel: Ay Lucero por favor nadie habla así de su ex novio, ah, y no estoy con Camila, estamos saliendo, pero tranquilo todo, YO no tengo tanta prisa.
Lucero: Mira Manuel, uno, no volví con Michel, y dos, NO tengo ninguna prisa por andar con alguien, de hecho, estoy mejor que nunca.
Manuel: A mira tu que bueno.
Lucero: Mira Manuel de verdad, yo venía a "suavizar" el ambiente para que hoy en la noche no fuera todo tan tenso, pero contigo es imposible arreglar algo.
Manuel: Lucero por favor, si la que llego insoportable fuiste tú.
Lucero: ¿Perdón?
Manuel prende un cigarro, pues estaba muy estresado
Lucero: Manuel no me seas tonto y apaga eso pero como vas.
Manuel: Emm ¿como por?
Lucero: Por que te lo digo yo y punto
Manuel en ese momento prendió el cigarro, al parecer amaba hacerla enojar.
Lucero: Manuel que lo apagues te estoy diciendo.
Manuel: Hasta enojada te ves bonita
Lucero: aja gracias, ¿ahora si lo puedes apagar?
Manuel: No
Lucero: ¿que tengo que hacer para que lo apagues y no vuelvas a tocar un cigarro en tu vida?
Manuel: Un beso ¿te parece un precio razonable?
Lucero: Pero ni de broma, por mi como si te vuelves adicto al cigarro, otra vez
Manuel: Bueno (dijo mientras seguía fumando muy tranquilo)
Lucero: Ash bueno ya está bien, pero UNO
Manuel: perfecto UNO ( dijo en tono de burla )

Lucero se acercó a Manuel, le quitó el cigarro de la boca y lo apagó. Se volvió a acercar a él, esta vez más lentamente, sus ojos brillando con una intensidad desconocida. Manuel pudo sentir su aliento cálido cuando ella susurró:

—No me gusta que fumes.

Ella deslizó sus dedos por su mandíbula, trazando la línea de su quijada antes de sostener su mirada con la suya. Manuel tragó saliva, su corazón latiendo desbocado. Lucero se inclinó hacia él, sus labios rozando apenas los suyos, y luego murmuró:

—Hay otras cosas que prefiero que hagas con tu boca.

Manuel, sin poder resistirse más, la tomó por la cintura y la atrajo hacia él, sus labios encontrándose en un beso ardiente. La pasión reprimida estalló entre ellos, cada caricia y cada suspiro alimentando el fuego que crecía en sus cuerpos.

Lucero se separó brevemente, sus ojos ardientes encontrando los de Manuel con urgencia.

Lucero: Manuel, ya —dijo, su voz temblando de deseo.

Pero de repente, ambos se detuvieron, la intensidad del momento suspendida en el aire. Lucero dio un paso atrás, su respiración aún acelerada.

—Perdón, me dejé llevar —dijo, apartando la mirada.

Manuel asintió, intentando calmar su pulso acelerado. —Está bien. No hay prisa.

La tensión aún era palpable, pero ambos sabían que había tiempo para explorar lo que sentían. Por ahora, habían decidido detenerse y dejar que el momento se asentara.

Espero que les esté gustando, perdón no pude escribir estos días!!! 🥲✨

Solo déjate llevar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora