No One Like You [Guapoduo]

Un amor incondicional

Cellbit llevó a Roier a lo alto de una colina lejana desde donde se podía ver la pequeña ciudad a lo lejos, era una vista hermosa, el aire era fresco, el cielo brillaba en tonos naranjas y rosas por el comienzo del atardecer. Roier estaba sentado hecho bolita entre las piernas de Cellbit mientras el alfa lo abrazaba, no habían dicho ni una palabra todavía, simplemente se habían dedicado a abrazarse uno al otro hasta que los dos estuvieran más tranquilos

–¿Estás bien? – preguntó Cellbit, rompiendo el silencio

–Eso es lo que yo debería preguntarte a ti – respondió Roier, mirando al alfa directo a los ojos – ¿Por qué te fuiste así?

–Lo siento guapito, no quería que me vieras de esa manera, te prometo que no volverá a pasar algo así – dijo Cellbit, besando las manos de Roier

–Cellbit estaba muy preocupado por tí, te fuiste luciendo bastante asustado y angustiado – dijo Roier, sujetando al alfa por las mejillas y dejando un pequeño beso en sus labios y en las marcas de golpes que tenía en el rostro – ¿Qué pasó contigo? ¿Por qué huiste de nosotros, de mí?

–Tenía miedo de asustarlos y que terminarán alejándose de mí, pero sobre todo tenía miedo de cómo ese incidente cambiaría tus sentimientos por mí... no te quiero perder

–¿Por qué piensas eso? Pelear es muy normal en los alfas ¿no? Además lo hiciste por protegernos ¿Por qué nos alejaríamos de ti? – preguntó Roier, abrazando a Cellbit por el cuello y dejando besitos en su mejilla, el alfa lo abrazó de vuelta disfrutando del aroma de su cabello. Cellbit no hablaba de su pasado ni de sus sentimientos con nadie, pero estaba considerando hacerlo en ese momento pues no había persona en la que confiará más que Roier, a él con gusto le abriría su corazón y expondría sus más secretas debilidades

–Guapito, no me gusta ser un alfa violento, muchas veces he preferido que me golpeen a mí antes de yo golpear a otra persona, pero antes no era así – dijo Cellbit – No es que fuera un loco o algo parecido, es solo que era muy sobreprotector... No es la primera vez que pierdo el control de esa forma, cuando era niño paso algo similar, mi familia acostumbraba a ir a fiestas muy elegantes con gente riquilla que llevaba a sus hijos, en una de esas fiestas un grupito de mocosos mimados estaban molestando a Bagi, le dijeron cosas horribles, se burlaban de ella porque no tenía mamá y bueno, ella siempre ha sido muy sensible con ese tema así que empezó a llorar... yo odiaba verla llorar, me hacía sentir mal, así que cuando lo ví no me pude controlar, ni siquiera me importó si esos mocosos eran mayores que yo, me lancé a ellos y empecé a golpearlos – dijo Cellbit, encontrándose con la mirada comprensiva de Roier quien esperaba que continuara con su historia – El problema fue que... algunos de esos chicos resultaron muy mal heridos, nunca fue mi intención que terminaran así, lo que pasó fue un accidente, pero nadie me quiso creer, todos me señalaron como el culpable porque yo habia empezado la pelea