•|¿Maybe?|• {Celestia x Kyoko}

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Narra Celestia.

Hoy es navidad.

Mi pequeña cuñada se disfrazó de santa y su amiguita de reno, ellas son muy unidas al parecer.

Invitamos a Nagito (ya que se convirtió en un buen amigo de mi prometida), a su novio, Hinata, y a Monaca. Además de Mukuro, Ibuki, Sayaka, Junko y su nueva novia, Shirogane.

Entonces, estábamos yo, mi prometida, ellos y mi suegro. Todo perfecto.

Las niñas están muy emocionadas por saber que les traerá santa.

Yo comencé a preparar algunos aperitivos para acompañar la cena, cuando recibí una llamada.

Celestia: ¿Diga..?

... : Querida.. no me queda mucho tiempo así que seré rápida. Cuida de mis hijas.

¿Zoé?

Celestia: ¿Zoé?, ¿Que pasa?

Zoé: Cuida a mis hijas, Ludenberg..

Celestia: Yo... No entiendo...

Zoé: Oh, pequeña, se que lo entiendes...

Después de eso, la llamada se cortó.

Rápidamente, Celestia ubico de dónde venía la llamada. Un hospital.

Comento a todos y juntos fueron a dicho lugar. Solo entraron Celestia, Jin, Kyoko y Kotoko.

Y hay estaba... Conectada a varios aparatos que le repartían suero y sangre.

Oh no, se veía fatal.

Zoé: Sabia que vendrían.. -tosio-

Kyoko: Zoé, ¿Que pasa?, mejor dicho, ¿Que te paso?

Zoé: Es el consumo de alcohol. Al parecer si tienen que hacer caso a las advertencias. Mis años de alcohólica me están cobrando la cuenta. No me queda mucho tiempo.

La pequeña se acerco a su madre.

Kotoko: Mami, ¿Vendrás a cenar conmigo?

Zoé: Me temo que no, Koko...

Kotoko: Pero.. ¿Porque? -comenzo a sollozar- ¿Porque nunca llegaste por mi?, tenía que contarte que Monaca es mi amiga. -se aferró a la sabana para poder subir a la camilla- tenia que contarte que tengo muchos amigos. -la tomo de las mejillas y lloro más fuerte- ¡Tenías que darme mi beso de buenas noches! -se escondió en el cuello de su madre-

Zoé: Koko, cometí errores en el pasado... -comenzo a sollozar- Bebí mucho alcohol... Y no hice nada al respecto. Ahora, mi salud empeoró... -lloro y abrazo a la pequeña como pudo- Lo siento Koko, ya no estare en más navidades, dias festivos o incluso tu cumpleaños... -se acerco a el oido de su hija- Al menos, no físicamente y visiblemente... Pero yo siempre estaré contigo, ¿De acuerdo?

Kotoko: ¿Lo prometes?

Zoé: Lo prometo. Además, ¿Acaso te gusta tu amiguita?

Su hija se sonrojo.

Kotoko: Si, pero no le digas... -susurro en su oído-

Zoé: Tranquila, nadie lo sabrá. Oh, si... Mira -saco algo de su bolsa- Te compre está diadema porque ví que te gustó..

Está era de color rosa con un moño y cuernitos.

Kotoko: ¡Gracias mamá! -se coloco la diadema sobre su cabeza-

Zoé: De nada. Kyoko, ven aquí.

Kyoko se acerco a la camilla.

Zoé: Quiero decirles algo a las dos. Espero que cuiden mucho la una de la otra. Son hermanas, tienen que hacerlo. -miro la mano de Kyoko- Mmh, al parecer me voy a perder de la boda.... Díganme, ¿Planean algo en especial?, talvez...¿Hijos?

Kotoko: ¡Si!, ¡Ellas quieren tener muchos bebés!, lo dijeron el otro día. ¡Quieren ser mamis!

Kyoko: Si, estamos comenzando a investigar procesos para tener un hijo. Además, estamos comprometidas. La boda será en cinco meses más.

Jin: ¿B-boda...? -dijo, sorprendido-

Zoé: Entiendo. Ven aquí Celestia..

La mencionada se acerco.

Zoé: Como ya lo dije, cuida mucho de mis hijas. Y más porque una de ellas será tu esposa.

Celestia: Claro, no la defraudaré. Tome, coma un poco. -le dió un trozo de pastel- Lo hice para la cena de hoy... Pero como no podrá acompañarnos, le traje un trozo.

Zoé: Gracias. -lo probó- mmmh, ¡Está riquísimo!, eres la indicada para mí hija.

Enfermera: La hora de visita terminó.

Jin: Gracias.

Kyoko: Tenemos que irnos. Adiós...... Mamá.

Zoé: Se escucha tan lindo que me digas así, Adiós... Hija.

Al llegar a casa, todos disfrutaron de la cena.

Está, aunque fue en un momento equivocado, estaba deliciosa.

A la mañana siguiente, mientras todos abrían sus regalos, recibieron una llamada con una noticia trágica.

Zoé había fallecido.