Los días pasaron y en Los Ángeles, hubo un gran amontonamiento de gente en la plaza central, la visita del gobernador llamaba la atención, la presencia de un soldado joven, apuesto, de unos treinta años escoltaba a don Luis Verdugo y a su esposa doña Isabel. Al final del amontonamiento se encontraban Diego y Carmen, quienes observaban con detalle toda la ceremonia solo hacían bromas sobre los presentes, Inés y Leandro estaban en el amontonamiento junto a don Alejandro y María Pía. Para su desgracia, Elena y Sebastián se encontraban ya residiendo en Monterrey, pero ella no dejaba de mandar cartas todos los días a Carmen e Inés. Luego de unos minutos, el Capitán se subió a la tarima donde estaban parados el gobernador y los Verdugo, y a gran voz, pidió callar a todos, pidió al sargento García hablar.
-Estimados ciudadanos de Los Ángeles, es un placer poder estar con ustedes el día de la fecha, pero no quiero dejar pasar un minuto más. Se los ha reunido esta mañana para poder presentarles al nuevo alcalde de esta hermosa ciudad, con todo su respeto, reciban con aplausos a don Luis Verdugo, alguien leal a la corona y a las leyes.
-No creo que sea algo necesario ese título, sargento. -agregó don Luis, golpeando el hombro del sargento. -Estimados ciudadanos, es un honor poder estar en este grandioso cargo. Primeramente, quiero agradecer a mi esposa, que ha sido de gran apoyo y ayuda durante esta importante decisión que nos llevara a ser una ciudad mejor. -decía mirando a Isabel con los ojos más brillantes mientras ella trataba de fingir atención hacia su esposo, miraba con atención a Antonio quien le hacía señas de que debía prestarle atención a su marido.
-Villa, ¿esto no te parece ridículo? -decía don Alejandro susurrándole a don Luis, quien había llegado para ver la presentación.
-He tenido que ver cosas peores mi amigo, pero él no es tonto para la política.
-A qué harás mención... -dijo don Alejandro dudoso.
-Su esposa Ale, es de las mujeres más enriquecidas después de la reina. -dijo mientras buscaba a Carmen, cuando la vio, solo se enterneció al verla a punto de besarse con Diego.
Todos siguieron hablando, hasta que el discurso del gobernador empezó, comenzó hablando de la organización del ejército, luego de los impuestos, y en esa parte, no se olvido para nada de mencionar a el teniente Toledano, lo hizo pasar al lado suyo, él hizo su saludo protocolar y volvió a su lugar. Por su parte, el capitán comenzó a impacientarse como siempre del típico discurso del gobernador, por ende, cuando terminó, interrumpió para recordar quienes debían impuestos en las ultimas dos semanas, generando un coraje interno en el ahora alcalde Verdugo, impidiendo que sea tan cruel con los ciudadanos, lo cual hizo que este se llevara una ovación de aplausos. Isabel, quien estaba muy desinteresada del tema, le hizo señas a Antonio para que se vean, bajó de la tarima con la excusa de que se estaba mareando por la temperatura, se dirigió detrás de la cantina y Antonio comenzó a seguirle, al encontrarse detrás de dicho lugar, comenzaron a ser tentados por la tensión que ambos estaban sintiendo en los discursos, este se abalanzó hacia ella y comenzaron a besarse, él la llevó contra la pared haciendo que esta abrace su cuello. Estuvieron un rato largo hasta que Antonio se dio cuenta que estaban en un lugar con muchos testigos, se alejó de ella, se peino un poco, ella se arregló también y salieron por partes separadas para no generar sospechas.
Carmen y Diego, por su lado, estaban tratando de oír lo suficiente para luego poder dialogar de qué se trataba todo este plan, lo mismo hacía Inés dirigiéndose hacia donde su prometido vaya. Mientras hablaban, don Alejandro se dirigió hacia ellos, anunciándoles que tendrían una cena ese mismo día con los Verdugo, el gobernador y parte del ejercito -tal, así como el capitán y el teniente. Esto generó en Diego cierta ventaja, donde pensaba todo lo que podría oír de ciertos individuos.
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El Zorro no terminó como debía haber terminado
Ficção HistóricaEl jóven Diego de la Vega, recien llegado de España, comienza a vivir junto a su padre luego de estar seis años alejado de su tierra. Su bienvenida lo lleva a enamorarse de su mejor amiga de la infancia, Carmen, quienes comienzan a conocerse aún más...