Si dios quiere

C.31 Alguien aquí necesita terapia

Kara sintió un leve tirón en su vejiga, su maldito reloj biológico se había configurado para despertar a las 7 de la mañana, minutos más minutos menos, que más da, Solo sabía que desde que estaba con lena no tenía necesidad de levantarse de su lugar y esa mañana no era la excepción, lo único malo era que su vejiga no dejaba de molestar, si no hubiera sido por tantas margaritas ella seguiría abrazada a ese cuerpo calientito que tanto amaba, bueno... No había pedacito de lena que no amara, prefería mojar la cama a alejarse de ella, pero no era para tanto ¿O sí?

Sumergió la cabeza en ese huequito entre el cuello de Lena y su cabeza, movió sus manos hasta deslizarse por su tersa piel y abrazar su cintura... Lena estaba como desmayada sobre la mullida frazada, hermosa, radiante y desnuda.... ¡¡¡¿DESNUDA?!!!!

Kara despertó de un brinco quitando frazadas y cobijas – ¡Oh mi dios! – se había dejado llevar por las bajas pasiones y habían cometido una idiotez, bueno no era como si Kara pudiera embarazarla pero sentía que de alguna forma había abusado de ella, de su inocencia y de su embriaguez – soy la peor – no sabía si despertar a Lena o dejarla dormir, si retirarse al baño a bañarse y vestirse o dar de vueltas en la habitación ... ¿La habitación? Esa no era la habitación de su novia, pero por el mobiliario sabía que estaba dentro de la mansión, era una cama enorme con postes y sábanas blancas que caían como cortinas, un extenso buró enfrente de ellas con fotografías de la familia Luthor en la cual una resaltaba entre tantas: era de la doctora Lilian y su esposo Lionel – ¡Oh mi dios! – la rubia no recordaba nada y sobretodo no recordaba cómo habían llegado a la mansión de los Luthor

¿Y Lena? Lena dormía a pierna suelta con un hilillo de baba por la comisura de su boca , ni siquiera se inmutó cuando kara cambio de posicion, ni siquiera porque estaba a punto de caerse de la csma, ni siquiera porqye estaba desnuda – gggrrrraaaaa– Lena ya no era un koala, ahora era un oso petesozo en estado de hibernacion solo esperaba que no tuviera resaca y se la comiera de un bocado

–¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda! – Kara cobijó a Lena y corrió al baño de Lilian para buscar una bata –¡oh dios mío! ¡Esto es más grande que mi casa!– gritó cuando vió el extenso cambiador al lado del baño con jacuzzi integrado el cual aún estaba encendido y varias prendas íntimas se encontraban regadas por todos lados, ya no podía lamentarse más, lo hecho, hecho está y no había vuelta atras solo hubiera querido poder recordar un momento tan importante en su vida

– Henry está en la puerta – dijo ZOI y Kara pensó que tenía que ser el terapeuta de Lena

Se colocó la bata del martes aunque fuera viernes y corrió hasta la puerta de entrada donde tuvo que interceptar a una sirvienta – lo siento, yo abro – dijo un poco brusca

– claro señorita – dijo la joven retirándose de la puerta, todos en la mansión ya sabían de su relación con Lena y la felicitaban por lo radiante que se veía la niña de los Luthor – en un momento iré a asear su habitación –

– ¡No!.... Ahm... Lena extrañaba a su madre y quiso dormir en su habitación, ayer fue un día estresante y creo que desea dormir hasta tarde –

– ok... ¿Gusta que prepare el desayuno? – Kara lo pensó y estuvo a punto de decir que no por un ligero mareo aunque tenía hambre y de esa hambre feroz que le hacía rugir las tripas

– ahm un jugo de naranja y pan tostado con miel para ambas.... Y también para su visita – dijo recordando a Henry

–¿Algo más?–

–.... un omelette –

–¿Algo más?– la sirvienta ya la conocia

–prepara café por si las dudas y ... galletitas... para el invitado... – la sirvienta lo dudó

– ok, en un momento estará servido señorita – dijo amablemente mientras se retiraba

Al fin Kara abrió la puerta y escaneo al individuo con el cual Lena pasaría 4 horas a la semana, el tipo estaba viendo las suculentas de Lena y se encontraba agachado entre los arbustos de la jardinera – hola –

– oh, disculpa... estaba queriendo ver la inscripción de la placa, pensé que me había equivocado de casa – dijo el joven... Kara lo miró profundamente para analizarlo, no traía sus gafas pero sabía que era apuesto, pelinegro, ojo azul, barba partida, robusto o quizás musculoso de 1.90 mts, veintitantos y sonrisa impecable – Se encuentra... ¿Kieran?....– Kara achicó los ojos en duda no conocía a nadie con ese nombre – Disculpa perdí mis notas la semana pasada, mi amiga Andrea me llamó para decirme los datos de mi cliente pero soy muy torpe y derrame mi vaso de café sobre mis notas y .... –

–¿Henry?– Kara volteó de golpe y abrió tanto los ojos por la sorpresiva entrada de su novia que casi se cae – Henry ¿Eres tú? – Lena se acercaba peligrosamente al tipo y Kara estuvo a punto de cerrarle la puerta en la cara

– tu... ¿Nos conocemos? – preguntó el tipo

Kara casi pasa desapercibido el pants rojo y blanco de la universidad de Utah por un momento mientras se escaneaba ella misma recordando que debajo de la bata de Lilian aún estaba desnuda

– Soy Lena... del torneo de ajedrez de Ontario del 2012... me enseñaste donde estaba mi dormitorio ¿Recuerdas? –

Kara miraba a su novia y al tipo como en un partido de ping pong – oh sí ya recuerdo... estabas llorando porque no encontrabas tu habitación y eras tan tímida que no querías preguntar a nadie... wow Lena tienes una memoria extraordinaria y eres excelente reconocedora yo jamás te hubiese recordado –

– gracias... recuerdo que me diste goma de mascar sabor a sandía y un refresco de limón como cena –

– diablos, yo ni siquiera recuerdo lo que cené anoche – dijo Henry compartiendo sonrisas con Lena

– el desayuno está servido señorita Lena – que bueno que alguien había llamado su atención si no hubiera asesinado al tipo

– ahm, pedí que nos preparara el desayuno para los tres – dijo Kara tratando de llamar la atención de Lena quien solo asintió desviando la mirada hacia el piso con timidez, en ese instante a kara se le fue el hambre, se había propasado con ella no cabia duda, tenía que remediarlo aunque no sabia como – creo que será mejor que te deje con tu terapeuta... yo... debo volver a ver como esta jeremy al hospital –

Lena dejo de mirar al piso y volteó a verla con preocupación y desconcierto – ¿Tienes que irte? ¿ No te quedarás a desayunar? – preguntó con voz estrangulada, Kara nunca dejaba pasar una comida y se preguntaba ¿Qué había hecho mal? Tal vez no le había gustado su acuerdo de llegar a segunda base

– ¿Quieres que me quede?– preguntó acercándose un poco más a Lena esperando que no la rechazara

– si – Lena recordaba todo y pensó que Kara también lo haría, que habría recordado cuando sus manos exploraron toda su piel mientras kara prometía no moverse y le decía cuánto la amaba explicándole con fórmulas trazadas en su piel, esperaba que recordara cuando nombró todos los músculos de su cuerpo mientras los esculpida con sus manos y esperaba que recordara esa palabra mágica y el motivo por el cual no podía decirlo a todo momento aunque lo sintiera por dentro – te amo –

Kara sintió que el aire que faltaba volvía a sus pulmones – yo te amo infinito – Y se besaron a pesar de la audiencia 

– tengo que preguntar si este tiempo lo puedo anexar a mis honorarios – preguntó Henry a la sirvienta