Gobiérname

Grandes mujeres

Narra Claudia:
Al día siguiente me sentía lista para regresar al trabajo, tuve varias reuniones en las que me dieron actualizaciones de lo que había sucedido en mi ausencia.

Más tarde ese día, tuve una reunión muy importante con Andrés Manuel, él es como un padre para mí. Ahí conocí a Clara Brugada y Ernestina Godoy. Clara era muy linda y Ernestina era bastante capaz, ambas llenas de conocimiento y muy buenas ideas.

Cenamos en la casa de Clara, cocinaba muy rico y sus perros nos recibieron con mucho cariño, en la cena también se encontraba Beatriz Müller y Rocío Nahle.
Rocío fue mi compañera y amante durante muchos años en mi estancia en Estados Unidos. Estudiaba química y era de las mujeres más deseadas en el campus. Nos seguíamos llevando bien después de tantos sucesos juntas, ya no nos veíamos románticamente desde al menos 5 años.

Andrés Manuel- Claudia, quiero que seas mi jefa de campaña, me ayudaría mucho tenerte a mi lado coordinando todas las estrategias.- Me tomó por sorpresa, no pensé que me pidiera eso.

Claudia- Te lo agradezco mucho Andrés, pero tenía contemplado quizás ir por la jefatura de gobierno. No sé qué pienses- Pude verlo pensativo, más no enojado, muy pocas veces lo había visto molesto.

Andrés Manuel- Piénsalo bien Claudita, siento que podría ser difícil que ganáramos. Podrían volver a hacernos fraude.- Noté la mano prudente de Beatriz en la de Andrés Manuel, las elecciones pasadas tras el segundo fraude electoral, Andrés había tenido un infarto de la impresión.

Puse mi mano en la que se encontraba desocupada, al lado de su otra mano sostenida por Beatriz y cuando levantó su mirada le dije seriamente- Vamos a ganar Andrés, no te preocupes por eso. El pueblo sabrá elegir.

Una sonrisa de tranquilidad se pintó en su cara, me gustaba verlo así, tranquilo. Beatriz también sonreía y le besaba la mejilla. En un momento tuve que pararme al baño y me sorprendió Rocío cuando salía.

Rocío- Hola Clau, hace tanto no nos veíamos- dijo con su característica sonrisa coqueta, también sonreí.
Claudia- Rocío, tienes razón, los años no han pasado en ti. Sigues igual que siempre.
Rocío- ¿Crees que podamos volver a vernos? Supe que te divorciaste.- Pensé en Xóchitl y mi ánimo bajó de inmediato.
Claudia- La verdad estoy bastante ocupada Rocío, pero podríamos coordinar algún día- dije con una sonrisa, ella lo comprendió de inmediato y asintió con la cabeza.

Me di cuenta que estaba totalmente arrinconada en la puerta del baño, su cuerpo estaba muy cerca del mío, comenzaba a sentir calor. Mis ojos no dejaban de mirar los suyos, vi cómo estiró la mano y pedí perdón a Xóchitl por lo que iba a hacer.
La mano de Rocío se dirigía a la manija de la puerta.

Rocío- Bueno, necesito pasar al baño- Dijo riendo, con una risa apenada. Sabía bien que yo esperaba otra cosa.
Apenada, me quité rápidamente de la puerta.
Claudia- Perdóname, tienes razón- Dije también riendo tímidamente.

Una vez que Rocío cerró la puerta suspiré profundamente, me di cuenta de lo que había estado apunto de hacer. Me sentí mal conmigo mismo, me sentí culpable por quererlo. Le envié un mensaje a Xóchitl.

Claudia- 💬Hola Xo, ¿cómo estás? Perdón por no haber contestado tus llamadas hoy. Te necesito. Ven a mi casa a las 11. Te espero. 💬

Regresé y vi a todos en la sala, creando un nuevo plan para la transformación. Vi a Clara y Beatriz en la cocina y decidí ayudarles un poco. Cuando llegué Beatriz me recibió con una sonrisa, Clara lavaba los trastes.

Besé la mejilla de Beatriz y me abrazó muy cálidamente, éramos muy cercanas. Ambas habíamos buscado lo mismo toda nuestra vida. Un México mejor y el bienestar del pueblo y por supuesto de Andrés Manuel. Beatriz salió de la cocina.
Andrés la buscaba.