Capítulo 13

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SEMIFINALES

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SEMIFINALES.

JACKSON.

Hoy nos tocaba un partido. Era fuera de la institución. No podía quejarme pero hay un problema, mi mamá. Empieza a sospechar que estoy jugando fútbol.

Andrew me estaba animándome pero no me sentía nada agusto. La preocupación era tanto que me dolía mucho el pecho.

Solo jugaré, no haré más nada de eso.

Ha pasado unos días de que Chris se enteró de mi condición. Espero que esto no afecte nada de lo que haré.

Aunque me siento un poco mal y sofocado. No sé si pueda jugar con tranquilidad.

—Vamos, Jackson —dice Lino.

Unos de los mejores jugadores de mi equipo.

—Sí —dije intentado reincorporarme—. Vamos a jugar.

***

Ganamos el partido pero estuve sintiéndome mal desde ahí. Cada vez las taquicardia eran más fuertes. He evitado muchas cosas y eso significa no responder nada.

Mentía para que nadie me siguiera preguntando. Es algo absurdo que alguien pregunte a una persona «¿Estás bien?» durante que se ve claramente que no lo está.

Así que no preguntes por algo que es obvio. Que no tienen sentido estar gastado saliva por alguien que te responderá «Estoy bien».

Me aproximé a tomar mi mochila para irme a la clase. Los muchachos seguían con la emoción. Lograr pasar a las semifinales es algo especial para todos.

Aunque el malestar que he tenido no me ha dejado, siempre me siento mareado y un poco con sueño. No lograba concentrarme.

Salí sin despedirme de nadie, no sé si alguien me notó cuando me fui pero tampoco le tomé importancia.

Me dirigí al salón, me acosté en mi pupitre para poder descansar.

Con los partidos no he tenido tiempo de nada, ni de hablar con Christine. Desde hace días no sé de ella, espero que esté bien.

Llegó el profesor a dictar la clase. Yo solo intenté seguir la instrucciones pero era algo imposible con él dolor que sentía en mi pecho y el malestar que sentía en todo mi cuerpo, debe ser algo viral.

Michael no me había hablado en todo el día de hoy. Me parecía extraño. Aunque él se encontraba despistado.

Después de la clase me dirigí a hablar con mi amigo pero no hablaré de como me siento, seguro eso será un insulto. Cuando salí del salón lo perdí de vista.

Cuando Termine El Otoño (libro #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora