¿Puedes decidir conocer a alguien antes de que termine ese límite? Esa pregunta es fácil de responder para Jackson. el chico más atractivo y popular del instituto.
Jackson estaba decido a conocer a una chica de cabello castaño y ojos verdes aceituna...
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El corazón se hunde, cuando tú padre te abandona y cuando tú enemigo hace tu vida un infierno en el instituto donde estudias.
Y para otros el corazón se ahoga cuando tú sobrina está enferma del corazón. Cuando tus padres dejaron de verte por otros problemas a su alrededor. Y cuando tú novio y mejor amiga te traicionan.
Las dos maneras de que un corazón entre a profundidades son muy distinta pero crueles. Pero no signifique que ninguna sea fácil de afrontar.
Christine aprende a qué no todo es malo y que también no tienes que ser cruel por lo que te pase en tu vida. Y que todo hay una solución, toda puerta tiene una llave pero tendrás que buscarla para poder abrirla.
Jackson aprende a qué su vida no es perfecta pero puede disfrutarla con personas que no puede ser de su sangre pero son agradables, que no todo no podemos fijar en el pasado y seguir dejando que nos afecte. Y sobre todo, todo lo que hacemos no es malo pero no signifique que sea bueno.
Ambos se conocen un día que el otoño estaba resplandeciente con sus colores cálidos y su brisa fría. Y los dos empiezan a tener una relación increíblemente sólida y cálida.
Todos deseamos tener un amigo en que confiar. Ambos consiguen esa amistad tan deseada.
—Me encanta este clima— Dice con su voz suave.
—A mí también— le contesto con una sonrisa en mis labios.
—No todo es para siempre. Pero es mejor disfrutarlo— mira los árboles y como caían las hojas.
—Pero siempre hay segundas oportunidades para ver esas cosas que amas —ella me mira y me sonríe.
— Tienes buenas perspectivas.
— Y buena vista —murmuró.
— ¿Que dijiste?
—Nada —me río.
— Dime —exige.
– No dije nada —me sigo riendo.
—¿Porque te ríes? ¡Dime!
—No te diré —salí corriendo.
— ¡Dijiste algo! —me persigue. Y ambos salimos corriendo, y nos reímos juntos, decidimos seguir amándonos sin decir ninguna palabra.
Todos inconscientemente cambiamos. Y si es para bien, todos es mejor para todos.
Sus ojos se clavaron en mí y mis ojos en los de ella. Era una conexión tan fantástica y aterrorizante, amo estar a su lado. Mi cuerpo ya pide la necesidad de estar solo a su lado. Mis oídos anhelan por su voz. No sé si ella desea estar conmigo pero yo ya se lo que realmente este tonto reto puede hacerme cambiar de opinión.
Todo es destinando. No importa si es malo es bueno, pero lo seguro es que lo nuestro es destinado. Y quiero que nosotros seamos lo que muchos no logran ser.
Siento el dolor de pensar que lo nuestro se rompa, y pienso en todas esas personas que uno lo logran. Y me siento un poco triste por eso, pero siempre habrá una segunda oportunidad y eso será mi esperanza.
—¿Que pasa Jackson? —se detiene a mi lado—. ¿Porque te detuviste?
— Amo estar a tu lado —sonrió con dulzura.
— ¿Enserio? —sonríe con burla—. Antes nadie quería estar conmigo y ahora... Tú quieres estar a mi lado.
— Entonces... Seré tu gran amigo y quiero estar a tu lado —la miro a sus ojos verdes— Nunca me separé de ti, te has vuelto parte de mi vida ahora.
— Y tú de la mía —sonríe casi cerrando su ojos—. A partir de ahora seremos una sola vida.
