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La Ciudad Z y alrededores geográficos. Dónde el caos parecía imperar hace tan solo un par de meses, con infestaciones de kaijins por doquier y las incesantes alarmas de peligro sonando a toda hora, cada día. Pero... la situación se había aligerado bastante desde entonces, en el momento en que los cimientos de Ciudad Z (y guarida de kaijins al mismo tiempo) fueron estrujados como un trapo sucio por la heroína Clase S; Tornado of Terror.

Fue entonces que la metrópoli fantasma respiró con fuerza después de años siendo asfixiada.

O al menos eso parecía por el momento.

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Aguardados por la oscuridad de los campos de arroz y soja en los límites costeros de Ciudad F, (ciudad medianamente rural) algunos kaijins deambulaban buscando un nuevo lugar en donde reunirse para "planear" sus ataques. 

–¿Ciudad Z?– murmuró un pensador errático. De aspecto amorfo, con brazos más largos que sus propias piernas y la mitad del rostro cubierto por su cabello, se rascaba el brazo incesantemente –C-Ciudad Z ya no e-existe...

–No, no... cerca de ahí cielo. Oí el rumor de una nueva Asociación Kaijin... Y es muy excitante~– murmuró esta vez una kaijin, con orejas y dientes de conejo. Su piel era rosada y sus iris tenían un color incómodamente rojizos –Phoenix Man sobrevivió a la ultima batalla contra los héroes– rió tocándose los labios y recordando con dicha aquel dato que había escuchado de parte de uno de sus lacayos hace un tiempo.

–Vamos, vamos ahora. Ahora mismo, ahora– repitió un monstruo, que era más que nada una hiena de aspecto antropomorfo. Reía y sus ojos descendían entre una mezcla de locura y violencia, se restregaba la cabeza con intensidad y a menudo se arrancaba parte de la piel entre sus uñas. Traía un bozal de cuero y púas puestos en su boca –¿Podemos ir, verdad, verdad que sí?–

Cuestionó sacando la lengua como una bestia sedienta. Su cabeza fue acariciada por Queen B, quien sonreía complacida ante la vulgaridad de este.

–Claro, querido–
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[Desde hace tres o cuatro días se reporta el avistamiento de varios kaijins cerca de los límites de Ciudad Z y Ciudad R. Se presume que estarían viniendo desde el noroeste del país, Ciudad F en específico. Las autoridades han cercado las zonas próximas a las partes montañosas y se aconseja a la población que no se acerque a menos de 200 metros, en el que se presume sería el nuevo punto de encuentro para estos monstruos].

El sonido de la voz de la reportera se escuchaba como estática borrosa en los oídos de los discípulos de Bang, quienes encendieron el aparato electrónico más que nada para que el dojo no esté en silencio por la ausencia de su sensei. Sea un razonamiento cruelmente humano o no, los problemas del país no eran compartidos, y en el mundo egoísta en el que vivían cada ciudad se preocupaba por su propio bienestar.

Especialmente... La fama de Ciudad F era de ser materialista y muy superficial.

[A continuación, y debido a que estamos perdiendo puntos de raiting..., preguntaremos a las personas que pasan por aquí, qué prefieren vestir con la llegada de la primavera. ¿Serán vestidos de rayas o estampados de flores? ¡Quédese en sintonía ya que pronto lo sabremos!]

–Esto es aburridoo...– fue dicha una queja en voz alta proveniente del suelo, mismo dónde Garou se hallaba acostado leyendo cómics sobre héroes –y poco realista.

–Si dejaras de quejarte y te pusieras a limpiar terminaríamos más rápido– le reclamó Charanko sosteniendo una escoba cerca de él, a lo que el peliplata solo chasqueó la lengua y se dio la vuelta para no mirarlo –hmph.

✧Inefable✧((Batarou))Donde viven las historias. Descúbrelo ahora