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Meses después.

Anais Romers.

Vibra mi celular, y atiendo rápidamente la llamada.

—Buen día, con quién hablo?— pregunté.

Señora Anaís, habla Viviana, es para notificarle que ya el local fue desalojado. Oficialmente es completamente suyo.
Que excelente noticia. Muchísimas gracias.
Dentro de 5min le dejaré las llaves.
Me vuelve a llamar, estaré pendiente.
Colgué.

El día más feliz de mi vida.

Hace un par de días atrás, compré un hermoso y grande local, que me había encantado para comenzar con mi línea de ropa. He estado trabajando en el desde hace unos años, y ya tenía mi costurera personalizada quien ya ha realizado bastantes diseños para vender. Mi equipo de trabajo también ya lo había planeado, en esta semana debo estar ocupando el local con todos los accesorios. Llame a Marianna.

Mi mano derecha.

Le informe lo sucedido. Baje a la cocina a comentarle a mamá pero no me había dicho que saldría. Salí de mi casa, y baje a recibir las llaves.

— Todo suyo. —dijo Viviana.

—Una vez más, gracias.—dije sonriendo.

Subí y planeé ir con Tita está tarde para ir al local, quiero visualizar con Marianna como pondremos todo.

....

Con la noticia que mi nuevo local, uno de los sueños se estaba cumpliendo, todo me sonreía, tengo a mi lado al hombre que amo, mi familia estaba muy unida. Y me sentía agradecida con mi vida y como todo tomaba su lugar.

Todo había valido la pena, sí. Esos horribles trabajos de mi secundaria, ese eterno sufrimiento por no tener durante muchos años a él amor de mi vida, ese duelo por no tener a mi abuelo, todas esa lágrimas que derrame cuando sentía que todo colapsaba. Tome las mejores desiciones, me elegí a mi misma y lo que me hacía feliz, sin importar las consecuencias.

Recordemos un poco el pasado; Mamá en el fondo nunca le pareció que estuviera enamorada de un hombre que me lleva años de diferencia, tampoco que cada día lo amara más, papá no quería saber de ningún hombre que tuviera algún interés en mi. Y así, entre muchas cosas.

¿Pero como no elegirlo a él?

Si es el único que me brindo y me hizo sentir completamente bien. Si fue el único, en que pude creer y amar con toda inocencia. Lo ame sin inseguridades, ni sobre pensamientos.

Fui una niña, fui una adolescente, y ahora soy una mujer que está cumpliendo su futuro. Y en todas mis etapas, viví de cerca y cada día mi corazón me llevo a estar segura de mi sentimiento.

El amor, es la fuerza más grande.

Y en ningún ángulo y/o faceta de mi crecimiento, deje de amarlo.

Todo era y es aún, muy profundo para explicar, pero la vida es así, nos colocamos nosotros mismos limitaciones que nisiquiera existen.

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⏰ Última actualización: Oct 18 ⏰

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