—Deberías cerrar la boca. —El brillo en sus ojos me sonroja. —¿Que estás pensando?
—En mí, en medio de tus piernas mientras te saboreo. —Abro la boca sorprendida por su poco pudor.
—¡Romane! —comienzo a echarme aire con las manos.
—Nena no puedo, por favor, no hay que ir. Nos quedamos. —su semblante ha cambiado, parece molesta.
Me acerco a ella pasando mis manos por su cuello.
—Te prometo que al regresar no dormiremos. —le doy mi palabra.
—No es solo eso, no podre con las personas que te miraran.
—No existen. —Trato de tranquilizarla.
—Te miraran con deseo. —Cierra los ojos horrorizada.
—La única mirada que me importa es la tuya.
—Voy a infartarme. —Golpeo su brazo.
—No juegos con eso. ¿Nos vamos?
—Creo que yo ya me he venido.
—¡Romane! —trato de sonar seria, pero no puedo evitar reírme por sus comentarios.
—Eres hermosa. —besa mi cuello, provocándome escalofríos.
—Tú también eres hermosa, me encanta como te queda el negro. —hoy va más informal, dejando a un lado sus ya peculiares trajes, lleva una camisa negra abrochada hasta su pecho.
Toma mi mano y la besa, me sonríe y besa mis labios.
—Fresa —dice saboreando mi gloss.
Romane se detiene en su lugar exclusivo, Luzma nos espera a un costado, corre a mi puerta y la abre, miro a Romane y le sonrió en disculpa, se cuánto le disgusta que salga del coche, si no es ella quien abre la puerta.
—Te he extrañado —Luzma me abrasa en cuanto salgo del coche, me aprieta fuerte y detrás de ella veo a un chico rubio quien sonríe divertido. —Mira te presento a Alessandro, mi novio. Amor, ella es Romina, mi mejor amiga.
—La famosa Romina. —antes de que pueda dar un paso a él para saludarlo, Romane me toma de la cintura acercándome a ella, así que me limito a darle solo la mano.
—Ella es Romane —continua Luzma —la novia de Romina.
—También eres famosa —bromea Alessandro, pero a Romane no parece hacerle gracia.
—¿Sí? —trato de sonar amable.
—Si, la conozco de lejos, hace unos años hice mis prácticas en Rizzo.
—No te recuerdo —dice fría.
Él se ríe como si eso ya lo supiera.
—Si, bueno, no llegamos a cruzar palabra.
Ella asiente sin darle importancia.
—Romane es muy reservada —intervengo.
—Si, lo se. Recuerdo que todos ahí te tenían miedo.
—Aún le tienen —bromeo, pero mi novia no le quita la mirada de encima y mucho menos me suelta.
—¿Entramos? —pregunta Luzma
—Estamos esperando a Luciano y Amaranta.
—¿Amaranta vendrá? —pregunta emocionada.
—Si, hoy regreso y me tome el atrevimiento de invitarla
—Creí que solo seriamos nosotros cuatro —dice Alessandro, parece no gustarle la idea.
—No —por el tono de Romane, sé que también lo ha notado — mi novia ha invitado a dos personas más a mi bar. —dice recalcando esto último.
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ROMANE 2
RomanceRomina se aleja de Romane al saber sobre su pasado. Romane intenta cumplir su promesa de ir tras ella y recuperarla.