"Every time a Targaryen is born, the gods toss the coin and the world holds its breath, waiting to see which way it will fall, greatness or madness."
El cabello rubio blanco oculto bajo un falso castaño oscuro. Ojos y rasgos Valyrios plasmados en su...
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El Torneo de en honor a Eddard Stark por su nombramiento como Mano del Rey continuó los días siguientes, al parecer el Rey tenía intenciones de participar en las justas pero sería el mismo Lord Stark que lo convencería de desistir de su intención. Daeron no acompañaría a Sansa ni Jeyne y la Septa Mordane al torneó, no quería encontrarse con los tres hombres a los cuales les tenía un incierto miedo; el Rey Robert, el Matarreyes y la Montaña, tampoco Arya las acompaño, la pequeña Stark se quedó en la Fortaleza Roja a seguir sus lecciones. En esta ocasión, Ned asistió a su propio torneo, ocupando un lugar a lado de su hija mayor.
La noticia de que Bran había despertado trajo un alivio para los tres Stark y para Daeron, conocía al niño, era fuerte y como había dicho Jon antes de partir al Muro, los Stark son difíciles de matar,y en eso tenía razón pero lamentablemente Bran perdió la movilidad en sus extremidades bajas y no recordaba lo sucedido antes de caer de la Torre Vieja, lo cual era confuso y preocupante.
Empezaba a extrañar Winterfell, a Robb, Rickon, Bran y a Jon, también a sus lobos. Una parte de él se sentía culpable por fallarle a la promesa que le hizo a Elynda, de mantenerse lejos de Robert y los Lannister, hizo todo lo contrario. Todos los años de esfuerzo que ella hizo para mantenerlo a salvo, los estaba echando a la basura en cuestión de días y eso lo hacía sentirse peor.
Poco después del mediodía, Sansa, la septa Mordane, Ned y Jeyne regresaron del torneó. El ganador de la última justa y del torneó, fue el heredero de Highgarden de las tierras de Dominio, Ser Loras Tyrell conocido como el caballero de la rosas. Según, ambas niñas que presenciaron la justa, el joven Tyrell desmontó a Ser Gregor Clegane y Daeron se arrepintió de no haber asistido al torneo y presenciar la derrota de la Montaña, pero una parte de él lo prefiero así, tampoco quería reencontrarse con Jaime Lannister y Robert Baratheon.
Cada día se volvía repetitivo con sus labores como guardia para el Targaryen, se encontraba inquieto, buscaba la manera de tratar de distraerse. Todos los pensamientos sobre su identidad estaban en su cabeza y cada segundo se imaginaba que cualquier persona que hubiera conocido a su padre, lo reconocería y lo degollaría mientras dormía. Al igual que cada noche le costaba conciliar el sueño, por lo que al siguiente día, despertaba con fatiga y el clima caluroso que hacía la capital, le generaba un gran cansancio en su todo su ser.
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A la mañana siguiente, Arya anunció que perseguiría gatos en la Fortaleza Roja, si bien podría ser una buena distracción para Daeron de todo lo que lo abrumaba y sonaba divertido perseguir gatos, lo que él realmente quería era salir del castillo, poder respirar aire fresco, aunque en la ciudad se podía percibir un olor fétido, al menos podría curiosear entre las calles de King's Landing.
