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-Oye, fea, levantate.-

Me estiré inconscientemente, iba a darle un manotazo "accidentalmente" pero el agarró mi muñeca antes de que pudiera hacerlo. Fruncí el ceño mientras me obligaba a abrir los ojos.

Me senté en la cama, mirando a Sae con disgusto.-Claro, dime fea ahora. Hace un rato me estabas abrazando.-

Observé como rodaron sus ojos. Me levanté y fui hacia la sala de estar, dónde Sae me guió.-Ah, claro, ¿andamos inventando cosas? Me da igual, ponte algo, va a venir mi hermano.-

¿El tenía hermano? ¿Desde cuándo? Nunca me lo dijo, un año de amistad y aún así ni siquiera pudo decirme que tenía un hermano. Quizás debería hacer que el confíe en mi un poco más, no quiero perderme de su vida.

-¿Qué de supone que me voy a poner? ¿La ropa de ayer? Este "pijama" tuyo me queda horrible, ¿Que será de tu otra ropa?-

El bufó en respuesta mientras iba a su habitación. Me senté en el sofá a esperarlo, no pude evitar sentir curiosidad cuando le llegó una notificación al celular de Sae, estaba al lado mío, si hecho un vistazo no pasará nada. Antes de que se apagara su celular, pude ver que la notificación era un mensaje de Leonardo, pero no alcancé a leer que era lo que decía.

-Es lo más pequeño que tengo, toma.-Dijo el pelirrojo mientras me tiraba un conjunto en la cara. La tomé entre mis manos mientras iba al baño para cambiarme.

Salí del baño no sin antes mirarme en el espejo:Una blusa negra de cuello alto pegada al cuerpo y unos pantalones largos holgados de color blanco. No estaba mal pero tampoco me gustaba mucho que digamos.

-¿Sae, tienes hermano? ¿Cómo es el?

El se volteó a mirarme, pude observar como me miraba de arriba hacia abajo, me hice pequeña ante su gélida mirada.-Se llama Rin.-

-¿Rin? ¿Eso no es un nombre de chica?-Pregunte.

-Ah, amanecimos chistosos.-Sonreí ante su falta de humor habitual. Ambos ladeamos la cabeza en dirección hacia la puerta que había sido golpeada suavemente. Sae se levantó del sofá y se dirigió hacia la puerta, abriéndola y dejando pasar a un chico más alto que ambos, de cabello oscuro y los mismos ojos inexpresivos de Sae acompañados de esas características pestañas largas:cuánto las envidiaba.

Pude reconocer al instante que ese era el tal "Rin" del que me habló Sae:facciones parecidas y ojos similares. Saludé con mi mano mientras hablaba.-¡Hola! ¿Tu eres el hermanito de Sae, no?-El asintió en respuesta. Eran técnicamente los mismos, lo único diferente era el cabello y la altura.

-Yo soy Psyche, encantada.

-Igualmente.-Me daban ganas de tirarle ese mechón de pelo que caía sobre su nariz y lo estilizaba a la perfección.

-Sae, gracias por dejarme dormir aquí por hoy y por haberme escuchado, pero debo irme a casa, Otro día te devolveré tu ropa, ¿Si?-

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-Sae, gracias por dejarme dormir aquí por hoy y por haberme escuchado, pero debo irme a casa, Otro día te devolveré tu ropa, ¿Si?-

-Mhm, nos vemos mañana-Le di una dulce sonrisa cuando escuché aquello.

-Bien, entonces pásame a buscar a las seis y media de la tarde, adiós, Sae.-Cerre la puerta detrás de mi para después bajar los escalones.

Me bajé del taxi cerca de una tienda:quería llevar algo para comer en la noche. Me adentré entre los pasillos de dulces viendo las diversas variedades para escoger, pero debía limitarme pues mi dinero no es infinito en comparación al de Sae.

-¡Psyche, cariño!-Fue lo único que escuché antes de que alguien me tomara bruscamente del hombro y me girara. El sedoso cabello rubio con el mismo mechón cayendo solo a un lado de su rostro, las iris tan verde como las hojas en primavera se posaban en mi, en mi rostro.

-No te vayas está vez, por favor, necesito explicarte.-Ese mismo pitido de hace unos días se hizo presente nuevamente en mis oídos, distorsionando los sonidos del exterior e intentando despistarme. Levanté mi rostro ligeramente para enfrentar la mirada de tonalidad verdosa.

-Mira, créeme porfavor, Alice se-

-¿Alice? ¿Así que ella es Alice? ¿Por eso te pusiste nervioso cuando Sae menciono ese nombre? ¿Fue tu "amiga" Alice la que te llamaba cada noche?-

-Cariño, porfavor, en verdad no quise, todo fue un error, ella y yo nunca debió haber sido algo y me equivoqué, lo admito y quiero estar contigo, nuestra historia no se puede acabar aquí.

Las lágrimas amenazaban con escaparse de mis ojos mientras escuchaba las excusas.-Leonardo, ¿Error? Claro, ¿Fue un error cuando estabas tan felizmente besándote con otra? Vete al carajo, Leonardo. No soy alguien que puedas tirar para luego recoger, púdrete.-

No agarré nada y abandone la tienda. El día iba tan perfectamente bien, desperté con Sae a mi lado, pasamos tiempo juntos, conocí a su hermano, planeamos cosas, ¿Por qué tenía que aparecer el? Justo cuando tengo un momento de distracción el vuelve a mi.

Sentía mis lágrimas resbalando por mis mejillas cuando esperaba un taxi, no quería que me vieran así, habían muchas personas grabandome alrededor, sacándome fotos para después publicarlas, dejarme en ridículo delante de todo el mundo como la "ex novia de Leonardo Luna, el famoso futbolista."







HOLAAAA

lamento q mis capítulos sean tan cortos y q para rematar se actualicen cada 4 años luz, pero deben tenerme piedad 🥺

Tengo prueba de mates mañana y no estudie ni mrd, aparte q no se cuando es la prueba del libro y nos van a retomar un simce en el que me saque tremendo 5.0

Bueno, muak muak

Dos Chicos, Un Problema ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora