Libídine

Capitulo 14

Mentiría si dijera que los comentarios que me hicieron no me dejaron disfrutar del sexo con el Vor de la mafia rusa pero sería una gran mentira ya que al estar abierta de piernas sobre el me hizo olvidar hasta de quien soy

- Es tarde, muy tarde - me quejo saliendo de la cama y entrando al baño de la suite que rentó, no me cubro y camino libremente sin ropa

- Vuelve a la cama y que se joda esa mierda

- Esa mierda es la boda de mi tío - abro la regadera y entro recibiendo el agua caliente, aplicó shampoo cerrando los ojos y escucho como se rie

- Vas a mostrar esos chupones en tus tetas

- Existe maquillaje

- No necesitas cubrir nada, que el mundo se entere que eres mía y si no les gusta que se saquen los ojos

- Excelentes soluciones - rio un poco lavandome muy bien - Levántate de esa cama, eres el Vor y obviamente tienes que estar ahí

- Te ves más linda cuando estás gimiendo que cuando intentas dar órdenes

- Específicamente no es una orden - salgo y me coloco la bata de baño con una toalla en la cabeza, camino a la habitación en busca de la pequeña maleta que traje para empezar a maquillarme

Escucho como resopla y se va a bañar, el muy desgraciado no se cubre sino que me pone a salivar con solo ver como camina desnudo

Me concentro en mi tarea y me coloco el vestido que me compré, ajusto la parte de atrás para amoldarlo a mi figura y voy por mis zapatos

- Te vez guapo - digo mirándolo ya que solo tiene el mero pantalón puesto, el agua le cae por el pecho y el cabello mojado se le ve tan bien

- Estás fantaseando mientras me miras - se burla de mi y yo ruedo los ojos sentandome en la cama mientras me pongo los tacones

- Claro que no - me levanto apresurada a conectar el cepillo secador, me quito la toalla y empiezo a peinarme para no verme común

- ¿Alguna vez te has pintado esa cabeza? - pregunta de manera burlona pero siento una corriente eléctrica correr por mi espina dorsal

- Una Romanov - rie la italiana y tira de mi cabello aplicando la tintura quitándome el color rojo de mi cabello - Abre los putos ojos o te meto el puñal por el culo

- Sal de aquí - le ordena el italiano a la mujer que rie después de enjuagar mi cabello a las malas con una manguera de agua helada

Ella sale molesta no sin antes plantarle un beso en los labios a pesar de ser la puta de su padre, el no se inmuta sino que avanza a mi lugar y me toma del menton para que lo mire a los ojos

- Así que eres la hija de Dante Romanov - rie - Hace años te conté que iba a lanzar una droga, tal vez tu le diste la idea de modificar mi invento

- Yo no fui - respondo tranquila - Hace años entregué a tu hermano a la FEMF así que hazme un favor y ya pégame un tiro en medio de las cejas

- Cagna

- Lo sé pero al menos no soy una estúpida que cae en los encantos de cualquier mujer perteneciente a la milicia - me le burlo - ¿Cómo se llamaba la teniente? ¿Rachel James? ¿Te quisiste casar con ella? - finjo una cara de dolor - Te ibas a casar con ella cuando me pediste matrimonio a mi, que traidor me saliste Antoni Mascherano

- Hazme caso Irina - me saca de mis pensamientos y miro sus manos en mis caderas - Te quedaste pasmada

- Lo siento, estoy pensando en la boda a la que vamos tarde - le palmeo el hombro y me besa haciendo que coloque mis manos en su nuca - Te amo - susurro pero la simple mención hace que se aleje de mí como si quemara - ¿Que sucede?