Libídine

Capitulo 13

Salgo y me dirijo al Gulag donde me encuentro con Christopher Morgan pero por ahora me concentro en las personas que tengo colgadas y desnudas

El Vor se va a los calabozos a ver a su tío y yo aprovecho para tomar las barras largas que sueltan corrientes eléctricas como un taser pero un poco más fuerte

- No tengo tiempo para ustedes, ya suficiente desperdicie con Lena así que vas a recibir piedad por mi parte, Inna - suelto la descarga eléctrica contra su vientre poniéndola a gritar

- Si te lo pones a ver desde otro punto de vista, yo solo te ayude a no ser la burla de todos al tener un bastardo con Christopher Morgan, el jamás dejará a su esposa por muy sexy y hermosa que seas, esas tres perras de ojos azules son unas brujas y nadie se liberara de su hechizo - dice Lev sin importarle que tengo a Inna a su lado y la este torturando

Cargo la Makárov que uso como arma de fuego, empuño el mango de plata
dando varios pasos atrás

- Irina no lo hagas, por favor - ruega ella pero poco me importa cuando le vuelo la cabeza a tiros, acabo todas las balas y Lev termina manchado de su sangre

- Vuelvo por ti y si no te callas te voy a coser la boca como lo hice con Lena - salgo de ahí cuando el hacker entra apresurado buscando al Vor, le digo donde está y se apresura a ir a buscarlo

Enciendo un cigarrillo y una sumisa llega a mi con un abrigo de piel color gris, me lo coloca y se retira

- Está colgado, tienen una hora - digo a algunos Kryshas que viene a divertirse y desaparecen al cruzar la entrada

Si algún día dije que tocar a los míos era algo grave como para que yo los mate, no se imaginan lo que soy capaz de hacer al atreverse a tocar lo que provenía de mi

- Te fuiste - dice detrás de mi sin importarle que el hacker lo siga llamando apresurado

- Tu esposa me clavo un vidrio en el muslo y tú no estabas, no iba a pelear frente a los mellizos así que si, me fui - doy otra calada, el toma el cigarrillo y lo arroja

- ¿Lo sabes?

- Si - se a lo que se refiere y me duele pero es algo que ya no puedo demostrar y las palabras del maldito traidor de Lev se quedaron tan clavadas en mi mente que tengo que evitar mirarlo - De todas formas no te iba a importar

- ¿De que mierda hablas? - me sujeta del menton con fuerza y no me queda más opción que conectar mi mirada a la suya - Llevabas en ti un hijo mío así que no digas estupideces

- Si pero no sería un James

- Me vale tres kilos de mierda el apellido que hubiera portado porque era un Morgan y tenía tu sangre corriendo por sus venas

Tengo ganas de llorar y lo beso dejando que acune mi rostro en sus manos

- Lo siento - sollozo escondiendome en su pecho - Yo no lo sabía

- No importa, zanahoria - me rio ya que el no es de apodos y escucho como resopla

- Ve con Patrick que matarán a tu suegra

- Esa mierda moralista no es nada para mí - me besa y me mira a los ojos - Iras a mi casa en la noche

- No Christopher, extraño mucho a los mellizos pero no ire teniendo a su madre ahí presente - le doy un beso para que vaya pero el me toma de la mano negándose a soltarla y me obliga a caminar junto a el, los miembros de la Bratva nos miran sin ningún disimulo hasta llegar a la cabaña que tienen rodeada, tratan de detener lo inevitable y la verdad es solo cuestión de tiempo

Viktoria entra rápido al momento de escuchar los dos balazos que desatan los gritos de una persona dentro y la verdad me da pena ver como la doctora que me suturó la herida ruega que no se lleven a su madre