Irina Romanova, hija de Domi y Dante Romanov vuelve del extranjero por órdenes del Boss tras haber estado infiltrada en la central de Canadá bajo el nombre de Amelia García
Me arrojo sobre ella soltando los golpes consecutivos a su cara, me golpea de vuelta pero no siento nada
Trata de sacar un cuchillo de su pantalón pero logro quitárselo arrojandolo a un lado, un hombre dispara cerca de mi para cuidar a la mujer que muelo a golpes pero el cae muerto con el balazo que le entierra mi tío Ilenko en la cabeza
Me levanto dejándola en el suelo me doy la vuelta y como conozco a la cobarde me agacho a la hora que intenta sujetarme del cabello, se va para adelante e impacta contra el suelo cuando le lanzó una patada en la espalda
Me subo encima de ella tomando el puñal que le había quitado, la sujeto del cabello y golpeó su rostro contra el suelo que hace que brote en sangre
- Te lo advertí Rachel - alzo el puñal para clavarlo en su espalda
- No me mates, tengo hijos - súplica cuando estoy a punto de clavar el arma, vuelto a alzar el puñal para intentarlo de nuevo pero la imagen de los mellizos me hace levantar
Suelto un grito de frustración y lanzo el cuchillo que se clava a lado de su cabeza sin lastimarla
De un momento a otro siento que me disparan, es un dardo que me manda al suelo desmayada
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Abro los ojos mirando el techo blanco, observo a mi alrededor dándome cuenta que no es una celda ni un lugar nefasto sino que es una habitación muy espaciosa y bien decorada
Miro al hombre que está mirando la ventana de espaldas a mi, tomo un florero para romperlo en su cabeza, camino de manera sigilosa mientras me digo a mi misma que está bien
Hazlo, es correcto. Pienso varias veces mientras más me acerco a él pero suelto el florero cuando se gira y miro a quien tiene en brazos mal cargado, es un golpe bajo ya que no tardo en llorar y no es que sea débil sino que creo estar en algún tipo de sueño dónde somos solo nosotros tres felices en un mundo donde no soy atormentada por tantos enemigos
Me sujeta de la cintura y me apega a el, niego acariciando las mejillas de mi bebé mientras trato de alejarnos del Vor pero no me lo permite ya que sus labios buscan los mios y los encuentran recibiendome con el amor y la pasión que tenía guardado en lo más profundo de mi ser
- Christopher... - susurro sujetando su nuca
- Irina - responde y acaricia mi cintura haciéndome olvidar de toda la estupidez de guerra y venganza
- Dámelo - digo tranquila y me permite cargar a Alexei, ha ganado peso y se ve completamente sano
Sus manos rodean mi cintura mientras nos apega a el y disfruto de su cercanía
- Te amo - digo y el no reacciona ya que piensa que se lo digo a mi niño - Los amo...
- Entonces quédate - dice acariciando mi espalda y suspiro profundo cuando de pronto la puerta se abre de golpe dándole paso a Milenka y Amelie
