Libídine

* Capitulo 27

19 años

Primera parte

Dos años desde que todo ocurrió, suspiro levantándome de mal humor ya que hoy es mi cumpleaños número 19

Mi celular suena y sonrío con la persona que me marca

- Vladimir, aún es temprano para estar despierto - me burlo mientras yo me coloco mi uniforme militar

- Feliz cumpleaños leoncilla

- ¿Podemos hacer videollamada? Extraño verte

- Espera, tengo que alejarme de alguien

- Supongo que es de alguna puta ¿Me dirás quien es?

- No, me repugnan las mujeres - mi teléfono vibra con la solicitud de encender la cámara, mi corazón se entristece al ver sus ojeras pero aún así fuerza una sonrisa solo para mí

- Lo voy a averiguar, nadie puede estar con mi primo si no pasa la revisión

- No eres mi prima, eres mi hermana - me corrige y no evito sonreír

- Espero que algun día encuentres a alguien que te haga feliz

- Sigue esperando 

- Apenas eres joven, cállate

- No soy un joven

- Claro que sí leoncillo - rio y le lanzó un beso - Te extraño demasiado sabes

- Yo te extraño de la misma manera - piensa un rato y suelta una risa - Mi padre me dejará ir de cacería por alguien

- Me alegro mucho Vladimir - la hora de cortar llega entristeciendo más mi día - Te quiero

- Como digas

- Vlad...

- Yo también te quiero Irina

- Cuídate mucho - cuelga la llamada

Reviso mensajes y la únicas que me han escrito son Aleska y Sasha

Bromeo con ambas de que ya deberían adoptarme, en el fondo es mi sueño más anhelado

Bajo las escaleras y me quedo helada ya que es la primera vez que veo a los señores García con un pastel esperándome, tienen una gran sonrisa así que un poco nerviosa me acerco

- Ya me tengo que ir... - susurro sin saber cómo reaccionar ya que yo misma les pedí desde los diez años que no hicieran estás cosas por mi pero están sentimentales desde que volví de mi misión en Italia hace dos años

- Feliz cumpleaños Amelia - me dicen ambos y yo les dedico una sonrisa, ambos son pasteleros así que supongo que ellos hicieron esto para mí

- Gracias - sonrío acercándome y soplo las velas, colocan el pastel a un lado ya que de verdad tengo que irme

- Debes saber que aunque no nos quieras nosotros te amamos como una hija - dice la mujer y me abraza, no pudieron tener hijos así que siempre fueron muy lindos conmigo

Por primera vez en muchos años me atrevo a abrazarla y acaricio levemente su espalda, tengo un raro presentimiento así que repito la acción con el hombre

- Muchas gracias - tomo sus manos y dejo un beso en cada una - Aunque no lo crean yo también los amo y ustedes ocupan un lugar muy especial en mi corazón, se que puedo ser muy cerrada y nunca lo diga pero así son las cosas