ENGAÑO

Capitulo 11

P.d. Incluye lemon

Ella lo esperaba sentada en la cama, pensando en cuantas cosas se pudo haber ahorrado si hubiera tenido las cosas claras. Quizá entonces no le hubiera fallado a su padre. Volteó al ver a Seiya acercarse.

—Serena... —se acercó a la cama, sentándose— yo...

Colocó un dedo sobre sus labios— Quiero que mi padre sepa que lo nuestro está funcionando

Asintió ligeramente— Se lo diremos en la cena

—Sí, quiero mañana poder llegar de tu mano al colegio —sonrió ligeramente—. Que sepan que eres mío.

—Creí que llegaríamos peleando como de costumbre —sonrió acariciando su rostro—. Serena, no quiero perderte

—No me perderás. Te he elegido, quiero pertenecerte siempre —sonrió ligeramente— te quiero

La abrazó hacia él— Tengo miedo, Serena. Por favor, déjame quedarme así un poco —murmuró aún temeroso e inseguro como nunca se había sentido.

Lo abrazó suavemente hacia ella, quizá era porque era la primera vez que amaba a alguien, ella también tenía miedo, no quería perder aquello que él le brindaba.

Hizo que ambos se recostaran sobre la cama, solamente abrazándola, aspirando su aroma.

—Es mentira que no quiera tener hijos, yo también lo deseo —murmuró abrazándose con fuerza hacia él.

La abrazó con más fuerza— Serena, siempre consideré que estaba solo, que no tenía a nadie y que no pertenecía a ningún lugar. Ahora puedo decirte que encontré el lugar al que pertenezco.

—Con tu ayuda aprenderé a ser una buena Reina, quiero formar un hogar contigo —dijo con sinceridad y ternura.

—Y yo espero poder ser un buen Rey y poder quedarme a tu lado por siempre. No quiero estar lejos de ti porque tú eres mi hogar

—Así será —murmuró jugando con su camisa— nunca me dejes

Sonrió acariciando su mejilla— Mi princesa...

Sonrió subiendo la mirada— Promete que serás solo mío...

—Solo tuyo soy...

Sonrió acariciando sus labios— Así como yo solo seré tuya...

No podía dejar de ver sus ojos acercándola aún más hacia él— Te amo

—Sé que no se compara, pero te quiero —murmuró cerrando los ojos esperando recibir un beso como los que le gustaban.

Se acercó besando sus labios, con suavidad y ternura, sin querer pensar en nada más que no fuera ese instante.

Suspiró entre sus labios, había llorado demasiado y se sentía cansada, pero ese beso la hacía recuperar fuerzas y sentir que todo valdría la pena, además ya no tendría de que preocuparse, Seiya y ella estaban casados y así sería para siempre.

Sonrió acariciando su mejilla respirando profundamente— Quiero dormir abrazado a ti

—Así hemos dormido los últimos días —dijo recostándose en su brazo— o quizá no tan dormidos

La abrazó observando su rostro— No tan dormidos —besó su mejilla.

—Sabes, contigo ha sido la mejor experiencia de mi vida

—Y la mía porque mi princesa robo mi corazón

Sonrió divertida tomando su mano entrelazando los dedos— Quien lo hubiera pensado, el arrogante y la caprichosa juntos