YELLOW ( Rivari )

17

Las cinco chicas se sentaron en la alfombra de la sala de estar y decidieron hablar en lugar de ver televisión durante la cena.

Samantha recordó algo y se levantó. Corrió hacia la puerta y luego regresó con una pequeña sonrisa en su rostro, dejando la bolsa en el suelo frente a Abril.

— Tengo algo para ti — Samantha sonrió suavemente. Rocío, Ama y Molly suspiraron colectivamente con un 'awwww'.

— ¿Es para mí? — preguntó Abril, con una pequeña sonrisa en su rostro. Samantha asintió y Abril aplaudió con entusiasmo. — ¿Lo abro?

— Adelante — Samantha hizo un gesto hacia la bolsa.

Abril rió y sacó la sudadera con capucha de color amarillo brillante que Samantha le había comprado.

— ¡Amarillo! — exclamó Abril. Inmediatamente abrazó la sudadera contra su pecho y sonrió ampliamente. — Gracias, de verdad — se lanzó hacia Samantha y le dio un abrazo apretado.

Samantha se rió, casi cayendo hacia atrás cuando Abril la abrazó.

— De nada — rió Samantha. Abril se apartó y miró la sudadera con capucha, riendo animadamente antes de inclinarse, tomar el rostro de Samantha y darle un beso en los labios, lo que provocó varios gritos y alaridos de sus tres amigas.

— Uf — Rocio levantó las cejas hacia Samantha cuando Abril se apartó. Las mejillas de Samantha se pusieron rojas brillantes al ver que todas la miraban.

Abril se puso de pie con la sudadera en las manos, quitándose su camisa sin vergüenza y cambiándosela por la sudadera amarilla brillante.

— Entonces... ¿qué son ustedes? — preguntó Molly, dirigiéndose a Samantha mientras Abril se cambiaba. Samantha se mordió el labio, sin saber cómo responder a la pregunta. Antes de que pudiera decir algo, Abril intervino.

— Mía— afirmó Abril. Todas las otras chicas las miraron con expresión confusa. Abril se puso la sudadera sobre la cabeza y regresó a donde estaba Samantha, sentándose en su regazo felizmente.

— Mía — repitió Abril, envolviendo sus brazos alrededor del cuello de Samantha y sonriendo ampliamente. — Mi Samy.

El corazón de Samantha se aceleró mientras envolvía silenciosamente sus brazos alrededor de Abril para mantenerla en su regazo.

— Lo has escuchado — asintió Samantha hacia sus amigas. — Ella es mi Aby. Abril se rió con entusiasmo y escondió su cabeza en el hueco del cuello de Samantha.

Rocío y Molly hicieron ruidos de asco, mientras Ama sonreía ampliamente, sacando su teléfono para tomar una foto de las dos.

— Son tan cursis que me dan náuseas — murmuró Molly, lanzando una mirada juguetona a Samantha. Las tres amigas no estaban acostumbradas a ver a Samantha ser cariñosa con nadie. Era un gran cambio, algo que consideraban monumental para ella.

— Cállate — murmuró Samantha, tratando, pero no logrando ocultar su sonrisa. Rocio se levantó para tirar su basura. Abril lo tomó como una señal de que la cena había terminado y agarró el control remoto del sofá.

— ¿Vamos a ver Friends otra vez? — Samantha se rió, levantando una ceja a la chica en su regazo. Abril asintió con entusiasmo y puso otro episodio, fijando sus ojos en la pantalla.

Cuatro episodios de Friends y una bolsa de palomitas más tarde, las cinco chicas estaban agotadas. Samantha y Abril eran las únicas que todavía estaban despiertas.

Samantha bostezó, girando para ver a Abril sonriendo somnolientemente. La chica de ojos verdes no pudo evitar inclinarse y besar la frente de la niña más pequeña.