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"Dijiste que te quedarías conmigo."

"Sabias que tarde o temprano me tendría que ir..."

"Entonces vete, sal de aquí. Pero si lo haces, nunca vuelvas."

 

 
.  .  .

Recuerdos extraños habían estado llegando a su mente, si no fuera en una situación tan crítica, quizás les habría prestado un poco más de atención.

¿Acaso estaba olvidando algo?

No era momento de pensar en eso; tenía a un niño inconsciente en la camilla, esa era la prioridad en este momento.

Tomó un pequeño banquito que habia en una esquina del lugar y la puso a un lado de la camilla, sentándose en el.

Vio al niño unos momentos para después suspirar.

A pesar de todo lo que acababa de pasar hace no más de una hora, el niño se veía tan tranquilo, y el doctor, aun sabiendo el motivo del porqué estaba así, no pudo evitar sentir una presión en el pecho.

No por preocupación como cualquiera se esperaría, sino que por celos, envidia.

¿Eso estaba mal?

Muy en el fondo; era egoísta y un envidioso de mucho cuidado, lo sabía bien.

Después de lo que haría, el niño estaría bien, mejor que nunca, pero él?

Él no, todo lo contrario.

Sabía que su salud estaba cada vez peor y eso era el principal motivo de su envidia hacia sus pacientes. Ellos mejoraban, como burbujas subiendo a la superficie de una gran masa de agua. Él, en cambio, era como una piedra que se iba haciendo cada vez más pesada, hundiendose cada vez más.

¿Y si... no ayuda al paciente?

Muchas veces lo pensó.

Echarse para atrás siempre fue su mayor anhelo pero desgraciadamente, no era una opción, mucho menos a estas alturas de su vida.

Si hubiera decidido no hacer esto desde un principio, viviría con dolor, un dolor horrible, pero viviría.

Un leve movimiento de parte del niño lo sacó de sus pensamientos, devolviendolo a la cruel realidad en la que tendría que seguir arriesgando su salud por la de alguien que apenas había visto.

Suspiró amargamente y se acercó un poco más al niño. Esto era cada vez más agotador.

. . .

  
Fuera del lugar en el que el doctor estaba atendiendo al menor, se encontraban Poppy y Diamantino, siendo este último el que mayores emociones sentía.

Se había logrado calmar un poco gracias a que su amiga estaba tratando de distraerlo con canciones o haciendo recortes con él mientras esperaban.

El padre le estaría eternamente agradecido a Poppy por acompañarlo en esta situación tan compleja para él.

Después de lo que le parecieron horas, escuchó la puerta detrás suyo abrirse.

Las lágrimas no tardaron en volver.

Ahí se encontraba su niño, parado delante del doctor, como si nada hubiese pasado.

Sin esperar nada, corrió hacia su hijo y lo abrazó fuertemente, dejando a la vez, besos en su frente. Sintió un gran alivio al ver a su pequeño consciente y parado.

Su hijo es... muy fuerte. — El albino dice, tratando de no interrumpir el momento emotivo.

—¿Diamantito está bien? — La única chica presente en el lugar pregunta con una pequeña sonrisa, confiaba en las habilidades del doctor, por lo que no esperaba una respuesta negativa.

A la rosada le parecía demasiado tierno el actuar de su amigo.

Si, ya no debería volver a vivir algo así. Curé el pequeño problemita que estaba en su corazón y en... su cerebro. — Baja la mirada para poder dirigirse al padre. —Le pido que me mantenga informado de la salud de su hijo en los próximos 7 días, no debería presentar más problemas pero es mejor asegurarse.

Diamantino se levantó después de decirle a su hijo que fuera con su tia Poppy y vio al albino a los ojos.

—En serio te lo agradezco, __________. No sé que habría pasado si no estuvieras aquí.

Sin que el doctor se lo esperara, unos brazos lo rodearon de forma repentina y lo abrazaron con fuerza.

__________ no pudo evitar quejarse por la fuerza del abrazo por lo bajo y, sintió un ligero calor empezar a aparecer en sus mejillas.

Lo sintió todo tan... cercano.

Casi nadie lo llamaba por su nombre y mucho menos lo abrazaba. No era algo a lo que estuviera acostumbrado y le avergonzaba un poco.

Si, yo... no fue nada...

Parece que al final del día, no era tan egoísta como pensaba

Si tan solo todos lo entendieran.

Si tan solo él lo entendiera...

   

   

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Mi capitulo más corto, dios mío. Encima actualización a la 1 de la mañana ñsñldls. Pero este capítulo es más una continuación del capítulo anterior, así que nada.

¿Estoy satisfecho? La verdad no, pero espero mañana poder traer un capítulo de compensación.

Historia de rayito y Ramón pero Ramón casi ni aparece, lo sé, ni modo amigos, hay que hacer desarrollo.
En cualquier caso ya pronto se viene más interacción entre los dos.

A ver si Ramón deja de sospechar tanto.

Pero y si tiene razón?

Ya se la saben amigos, si ven alguna falta ortográfica, no duden en avisarme.

tengan un muy lindo día.

byebye

Consulta médica | Ramón x Male reader - Trolls Donde viven las historias. Descúbrelo ahora