Desconocido
"El"Estaba en mi oficina en toronto organizando un par de papeleos. Después de esto tengo una importante reunión con un nuevo socio que si todo va como planeo será un nuevo aliado. Lo más importante es mantener mi reputación, de vez en cuando me permito pensar en mi preciosa nena que aún no encuentro.
Para eso mandé a mis dos inútiles hijos a Canadá. Tengo una leve sospecha y presentimiento que ahí se esconde. Ella tiene algo que quiero, y lo voy a obtener. Cada vez que pido informes siempre están en lo mismo. No hay ni un puto avance, ni una pista que puedan seguir. No me quejo si por eso es mi pequeña y preciosa nena, si no esto no sería divertido.
Cierro los ojos recordando aquellos tiempos. Dónde mi ex difunta esposa hacia cualquier cosa con tal de que no las tocará, pero lo obvio es que solo me gustaba hacer como que coopero a su patética desesperación. Recuerdo aquel día en donde enfrente de ellas, la golpee hasta quitarle el aliento de vida. Ya me había aburrido su podrido intento de maternidad.
Tan solo recordar sus llantos y maldiciones me hacen excitar. Justamente ahora tengo que ir al baño a bajarme la maldita erección que me produjo recordar. Pero aún así me satisfago por ello, después de unos minutos me corro y vaya que es mucha lechita para desperdiciar.
El pensar que por tres largos años me corrí dentro y fuera de sus preciosos coños me vuelve a excitar. Volviendo a hacer que me corra por segunda vez en menos de nada. Cómo deseo tenerlas ahora mismo y correrme las veces que quiera dentro de sus coños. Más sin embargo, todo se fue a la mierda cuando lograron escapar de mi. Y hasta ahora han pasado 5 malditos años sin saber nada de ellas. Y sin probar su dulce y delicioso coño.
Me limpio con papel higiénico todo lo que derrame sobre mi y salgo como si nada. Ya es hora de la reunión y salgo con mi anillo de seguridad. Abordo el auto con dos escoltas y detrás vienen los demás. Llegó a una fábrica abandonada, vaya porquería donde me citaron. Pero dejo de pensar en ello, ya que si se cierra el trato me ganaré un par de millones más a mi cuenta.
Me bajo y entro llevándome una sorpresa. No es lo que realmente aparenta, no es lo misma vista de afuera. Aquí está totalmente diferente, vaya sloen me sorprende. Llegó y ya mi socio está esperándome con bebidas y un par de chicas sexys. Si, tienen un trasero y tetas redondas. Eso hace que se me incomode lo que traigo entre las piernas. Pero las ganas se esfuman al recordarlas.
Me siento en el sofá sin que me inviten y pido que me sirvan un trago.
— Bienvenido seas — me dice Sloen con una sonrisa.
— Si, si como sea vamos directo a los negocios que no tengo humor de andar socializando— zanjo.
Discutimos y llegamos a un acuerdo después de hora y media estamos por firmar el trato pero una llamada interrumpe nuestra reunión. Cuelgo y lo ignoro pero más tarda en que colgué que en que me vuelve a llamar.
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Una chica problemática
RomantikKaely Coldman una mujer independiente de si misma, rodeada de pocos amigos traicionada una y otra vez. Un incidente que la marco para siempre y en busca de venganza hará lo que sea para cumplirlo sin esperarse que encontrará al amor de su vida y est...