Una kunoichi en Harry Potter

Capítulo 16

Las clases eran interesantes, afortunadamente, algunos profesores dejaban tarea, lo cual hacía que su mente estuviera ocupada un rato.

Y cuando dejaban demasiada, solo necesitaba un clon para reducir el número considerablemente. De esa manera, había alcanzado aprender el contenido de años en semanas.

También aprendió sobre los prefectos.

Eran estudiantes a quien se le ha dado autoridad y responsabilidades extra por el Jefe de Casa y el Director. Un estudiante hombre y otra mujer eran elegidos de cada casa en su quinto año para actuar como prefectos, y continuarán siendo prefectos en su sexto y séptimo año hasta que se gradúen.

Así, hay aproximadamente seis prefectos por casa, y veinticuatro prefectos en el colegio entero al mismo tiempo.

Estos podían quitar puntos y castigar a los demás alumnos que cometían una infracción a las normas del colegio.

Sabía que de la casa de los leones, solo conocía a Lily y a Remus.
La casa azul y amarilla eran desconocidas. Más por falta de interés.
Y de su casa al parecer, Lucius y Narcisa eran prefectos.

Realmente, dudaba que alguien siquiera se percatara de su presencia si decidía rondar a altas horas de la noche por los pasillos.

Aunque de todas maneras, esa noche lo descubriría.

Aún así, decidió hacer su día normal.
Ya tenía una rutina.

Levantarse temprano, desayunar con Lily, acompañar a Bill a su próxima clase, llegar tarde a las suyas e inventar alguna excusa barata ( La cual, por el momento no habían sido motivo de castigo, por más impresionante que pareciera), almorzar con sus amigos de la casa verde, mas clases, ir a la biblioteca, comer un refrigerio rapido, casi sempre siendo acompañada por Regulus, ir nuevamente a la biblioteca a realizar la tarea pendiente, cenar, dormir y repetir.

Y aunque no lo pareciera, gracias a esta rutina se había dado cuenta de algunas cosas.

Por ejemplo, que cada vez que se sentaba en la mesa de los leones para desayunar, algunos la miraban mal, o que Lily siempre estaba al pendiente de quien entrara, o cuando acompañaba a Bill a sus clases, no había sido ajena a la pregunta que le hacían al niño.
"¿Te dijo algo desagradable?" Era la más normal, claro que el niño terminaba algo enojado con esto, diciendo que era su amiga.

Y más cosas como esas, primero lo atribuyó al color de sus cabellos o que era nueva. Pero luego de dio cuenta de que había algo más. Severus siempre trataba de ignorar sus preguntas, mientras que Lily se ponía nerviosa y le aseguraba que ella no tenía la culpa, que ella no era como lo demás.

Pero ninguno ofrecía las respuestas que buscaba.