𝓥𝓲𝓸𝓵𝓪𝓬𝓮𝓾𝓶~ ☆♫︎ | OC x Spiderverse

"¡𝑴𝒂𝒗𝒆𝒆𝒏𝒔...!" ⚘

—¿Como así que Miles no está en su universo?

Exclamó Maveens con preocupación por el chico.

—Verás, tu misma sabes que la Máquina vete a casa analiza tu ADN y detecta de donde eres.

—Sí, pero Miles es de la Tierra-1610. Tiene que estar allí.

Pero luego recordó lo que el malparido de Miguel le había dicho a Miles.

—Mierda... Ya sé por qué no está allí. Es por la araña. La que mordió a Miles no era de allí... Tiene que estar en el lugar que la araña tenía que estar.

Y Maveens se quedó en silencio, recordando lo sucedido hace una hora.

—Está en la tierra 42. —Dijo de repente, y Gwen que también estaba pensativa lo afirmó—.

—¡Es verdad! En la casa de La Mancha vi el cadáver de la araña que picó a Miles y decía eso exactamente. Pero ¿cómo lo sabes?

—En la máquina... Antes de irme vi el historial y estaba tu universo seguido del de la araña de Miles. —Respondió la pelirroja con la mano en el mentón—, Pero Miguel no tardará en darse cuenta.

—Entonces, ya sabiendo donde buscar. Vámonos. Los otros nos esperan en tu mundo, Gwen. —El de ojos avellana concluyó—.

Y así se formó aquel equipo conformado Por Gwen, Peter, Porker, Noir, Penny, Pavitr, Hobbie y Finalmente Maveens.

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Por otro lado...

Él abrió un portal Y se fue. Estaba muy alterado por no encontrar a Miles; Todo lo que había pasado lo tenía muy receptivo, o quizás era por falta de Rapture. Bueno no, sí era por todo lo que había pasado.

Caminó pesadamente hacia su plataforma, pensando en que podía hacer con lo de Miles. Sabía que no estaba en su universo, pero no en cual. Ya que no se había tomado la molestia de monitorear ese lugar. Aún tenía tiempo y ahora mismo estaba algo abrumado.

Y cuando me refiero por Sentirse abrumado quiero decir solo.

—Y Al final pasó, ¿no Miguel? —su mano derecha apareció a mi lado, con una expresión un tanto preocupada—, Te dije que le romperías el corazón a Maveens cuando se entrara... Pero nunca imaginé que ella reaccionara así.

—¿Vas a venir a reprocharme eso, Lyla? Perdí la oportunidad de saber más de esa habilidad.

Pero Lyla se quedó en silencio con una expresión seria.

—Miguel, deja de tratarla como si no fuera humana. Ambos sabemos que ella en su vida seria capaz de hacerle daño a alguien.

Miguel solo la Miró un tanto enojado, ya que por más que a su ego le doliera tenía que admitir que aquella chica poseía buenas intenciones. Con él y con todos.
Entonces, en ese momento su corazón se encogió cuando recordó todo lo que le había dicho, su expresión... Como su voz se quebró y como se asustó de ella misma al gritarle de vuelta.
Su mente comenzaba a reproducir todos estos meses de compañía por parte de la pelirroja, su voz al cantar, aquella foto que se habían tomado, el concierto, los chocolates... Su más grande trauma se le había revivido.