Star Boy

YÚ EL DEMONIO INESTABLE

Yú:

A veces siento que lo que el gran líder nos pidió está mal, ahora mismo no entiendo que soy, no sé si ser el bueno o ser el malo, me siento muy mal cuando veo a Camilo repetir una y otra vez que esto lo ha hecho su mente, cuando no es cierto. Chack lo está controlando muy bien.

Yo no entiendo porque trato de hacer entrar en razón a Camilo, él confía en mí, me lo dijo en la cara, es un milagro que Cleo no me haya asesinado aun, todos saben que yo soy un peligro para esta operación. Mi sangre es maldad pura, pero por alguna razón quiero decirle a él que todo esto es la realidad.

—Yú —Llegó Chack—, ¿Qué te pasa tonto?

—No sé de qué hablas, ya es tarde es hora de dormir.

Me sostuvo del brazo él es más fuerte que yo, me detuvo. —Tenemos un asunto que hablar.

—No me interesa hablar de ningún asunto, estoy confundido conmigo mismo necesito pensar.

—Pensar ¿En decirle a camilo? ¿Cierto?

Me quedé callado, eso es lo que estoy tratando de decidir. Si le digo él entrará en razón, matará a los demonios e incluso a mí, pero si no lo digo la raza humana desaparecerá.

—Yú. Somos demonios ¿no?

—Mmm... supongo.

—¿De qué lado estas?

—Del lado de los malos.

—Entonces no debes preguntarte tal cosa, deja que todo fluya como va, vamos muy bien. Pronto el planeta tierra será nuestro.

—Pero... ¿Acaso nosotros no tenemos nuestro reino?

—¿De qué hablas?

Pensaba con rapidez, me di cuenta de algo. Es muy lógico, este es el reino de los humanos, no podemos posesionarnos de algo que no es nuestro. El infierno es mi reino, si, es un lugar horrendo, pero cuando era humano hice cosas malas, merezco estar en ese lugar de fuego, es tarde para arrepentirme, sin embargo... ya lo he decidido. Le diré a Camilo todo.

—Nada, solo estoy confundido.

—Oye, no hagas nada tonto, ya casi completamos nuestro objetivo.

—Lo sé. No haré nada tonto tranquilo, descansemos —Mentí, voy hacer esta tontería. El gran demonio no puede salir de allí, él está allá por una razón, no puede venir aquí.

Fui muy malo en mi pasado, me convertí en un demonio, en esta raza. Demonios Terrestres, existen muchos más, cada uno es diferente y peligroso, otros solo son demonios normales. Muy pocos en el infierno tienen la oportunidad de descansar.

Yo soy un demonio inestable, todos lo saben. Sabían que en cualquier momento me revelaría, perdería la maldad en mí, yo quiero ayudar a los humanos, para eso debo de ayudar a Camilo, así signifique que yo muera.

Con muchísimo sigilo entré a la cueva de Camilo, él estaba allí un poco adolorido por el gran golpe que sufrió. Fabio le dio un golpe de su propia medicina.

—Yú.

—Sí, ese soy yo —Le dije a Camilo.

—¿Qué haces aquí?

Otra vez, indecisión. Piensa bien en esto Yú, si le llego a decir la verdad estaré demasiado perdido, quizás él no me mate, lo va hacer Cleo o Chack o...

¿Guz?

¿Qué hace aquí? Ni siquiera lo he notado, eso que es algo enorme.

—Hola Yú, estaba cuidando a Camilo, sus heridas están un poco difíciles de sanar, el estará mejor en la mañana. ¿Ha que has venido? —Puso los ojos en modo de sospecha.