Izuku se sorprendió, la sostuvo por los hombros con cuidado y echo la cabeza hacia atrás, sonriendo tembloroso.
No se sintió correcto.
Fue por puro instinto, su mente inmediatamente había pensado en una persona por alguna extraña razón. Pensado de manera diferente está vez, casi como si le estuviera fallando. Y era ridículo porque no le debía nada a Katsuki así como el tampoco le debía nada.
Volteo a verlo dónde intuyo que estaría pero ya no estaba ahí, confundido observo un par de sandwich tirados al suelo.
—. ¡Deku, que gusto verte, estoy tan feliz de que estés bien!
—. ¡Deku, lo decidí! — Grito entre sollozos y abrazos — ¡Esta bien, quiero gritarle al mundo que estamos juntos!
Oh...
Izuku la miro con cierto grado de espanto medio disimulado, su corazón latió al grado de la taquicardia y su estomago se revolvió. Ay, mierda, ¿acaso era un monstruo por no sentirse bien con eso ahora? Al Izuku del pasado le hubiera dado igual, ¿qué...que había cambiado?
—. G-G-Genial, Uraraka, ¿l-lo pensaste bien...?
—. ¡Si! — La sonrisa de ella cayo un poco al ver la expresión de Izuku y jadeo, apenada — ¡Dios, lo siento tanto! No es momento de hablar de esto, no quiero agobiarte. Tenemos mucho tiempo, no pasa nada.
—. ¡Oye, ya suéltalo, yo también quiero abrazarlo! — Reclamo Mineta.
Katsuki solamente camino sin parar por toda la orilla del rio. No relajado, tampoco corriendo, caminaba como si tuviera un destino definido. No, no lo tenía. Se sentía mal, sus oídos estaban tapados y su estómago parecía haberse puesto al revés. Joder, ¿acaso empezaba a tener fiebre? Sentía el cuerpo demasiado caliente. Se llevo una mano a la garganta y apretó, intento deshacer el nudo a la fuerza, apenas podía tragar. Y su nariz, su maldita nariz, que picaba como el infierno y hacia que sus ojos se humedecieran.
Era un dolor diferente.
Definitivamente este era peor.
Dejo caer su cuerpo tembloroso de golpe, a la orilla del rio, y sumergió ambas manos sudorosas formando un cuenco para mojarse el rostro. Hasta que ese rocío no fue suficiente y simplemente dejo caer la mitad superior de su cuerpo al agua, sintiendo una extraña paz mientras flotaba y todo su torso se empezaba a poner frio por el agua.
Kirishima se sobresalto de sobre manera cuando lo encontró con el trasero al aire y sin moverse, se había echado a correr hasta el desde que lo había alcanzado a ver unos cinco metros atrás y lo tomo por los hombros para sacarlo. Katsuki empezó a toser escandalosamente, cayendo sobre sus codos.
—. ¡Hermano, ¿qué diablos...?! ¡¿Qué intentabas hacer ahí, eh?! ¡Bakugo!
—. Shhh cierra la boca — Gruño, hundiendo la cabeza entre sus rodillas y tapándose los oídos con ambas manos.
Estuvieron varios minutos así, Kirishima lo observaba con la respiración alterada y una expresión de angustia. Le daría el tiempo que quisiera para calmarse pero definitivamente le diría que sucedía. Cuando Katsuki suspiro y ladeo la cabeza para sacarse el agua que se le había metido en los oídos, se acerco hasta sentarse silenciosamente a su lado.
—. ¿Qué sucede contigo? — Murmuro, formando los labios en un puchero y los ojos malhumorados.
Katsuki observo de reojo como se abrazaba las rodillas y recargaba su barbilla en ellas.
—. No iba a matarme, idiota.
—. ¿Y entonces como se le llama a meter medio cuerpo en el agua sin intenciones de salir?
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El numero uno
FanfictionSobre las consecuencias que dejo la guerra, donde el enemigo ya no son solo los villanos... Y donde Katsuki se esfuerza en hundirse en un hoyo que no es suyo. Y donde Izuku no se da cuenta de nada, enfocado en que ya no quiere ser mas el numero uno...