DOS

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([@wengwengchim], multimedia ⬆️)

No sabe en qué momento el mundo se convirtió en la selva, con la ley del más fuerte gobernando. No sabe tampoco si eso va a tener solución. Al final se deshicieron de un mal para atraer otro peor pero daba igual.

Izuku sonreía.

Pequeña, mostrando los dientes, a veces sonrojado. Estaba contento. Seguramente se quitó al gobierno de encima, se moría por saberlo.

—. ¡Salgamos hoy, hay que hacer algo divertido! — Chillo Mina, emocionada — ¿Sugerencias?

—. Podemos ir a una sala de juegos — Hablo Izuku y la sala se sumió en un impactado silencio — Ya saben, de esos que tienen máquinas y así...o si no quieren no, que tonta sugerencia, olviden que dije eso — Balbuceo.

Todos se echaron a reír y a Izuku parecía que estaba a punto de explotarle la cara.

—. ¿Irás con nosotros? — Uraraka dijo emocionada — ¡Eso es asombroso!

—. ¡Pues vamos a los juegos!

Con esa era ya la segunda vez consecutiva que salía con todos después de aquella conversación con Shoto. Todo volvía a la normalidad, a su curso. Deku incluso el otro día durante el entrenamiento le había gritado que lo superaría y Katsuki estaba ridículamente animado desde entonces. Parecía que había consumido alguna droga porque flotaba, sentía que los colores del mundo se habían hecho más fuertes, como cuando le subes la saturación de color a las fotos.

Pero no tenía control del futuro tampoco, ni de los eventos cercanos. No tenía control de nada en realidad.

Izuku y Uraraka se habían vuelto cercanos de nuevo.

Podría empezar a expulsar baba espumosa y blanca de verlos todos sonrojados y ridículos paseándose por todo el Arcade hombro a hombro.

—. ¡Oh! ¡Midoriya, Bakugo! — Llamo Kirishima con emoción — ¡Una trivia!

El cartel del juego decía: ¿quién sabe más de All Might? Al que ganará le daban cincuenta boletos para gastarlo en el Arcade.

—. Te voy a hacer polvo — Sonrió Katsuki diabólico e Izuku le lanzo una mirada de reto.

—. Ya veremos, Kacchan.

Las preguntas eran ridículamente fáciles para ambos. No llevaban falladas ni una de las cuarenta preguntas hasta el momento pero las últimas diez incluso hasta Izuku tuvo que detenerse a pensarlo unos segundos. La última preguntaba donde era la ubicación específica de la agencia de All Might.

—. ¡Roppongi! — Chillo Izuku pero presiono el botón apenas algunos milisegundos después que Katsuki, por lo que un gran letrero rojo se ilumino en su pantalla — ¡¿Hah?! — Chillo, con los ojos de fuera — ¡Esto es injusto, no falle ninguna!

—. No, idiota. Pero tardaste más en responder — Le sonrió con suficiencia mientras ponía la mano para recibir todos los boletos que había ganado — Perdedor.

Entre chillidos, berrinches y llanto, Katsuki termino invitándole los juegos, gastando la mitad de sus boletos en el peliverde muy en contra de su voluntad.

—. ¡Juguemos el del topo!

—. No jodas, me termine mis boletos — Gruño.

Ni siquiera se dieron cuenta de en que momento se habían alejado del grupo hasta que regresaron al comienzo del lugar después de darle toda la vuelta al sitio y encontraron a todos en la misma área jugando diferentes juegos. La mayoría ni siquiera se inmuto por su presencia.

El numero unoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora