Capítulo 51

107 16 5
                                    

Miercoles 23:21 A.M.

Argentina estaba llorando, sentado en su cama, con su rostro reposado en sus dos manos. Estaba frustrado y un poco enojado.

Ayer mismo, Rusia les había dado permiso a los ahora ex amigos de su difunta hermana para verla y despedirla, a todos incluyendo los que solo iban a su casa por las fiestas... A todos menos a el. Rusia lo miro mal y le denegó la entrada, alegando que no quería verlo en su casa, ni él ni Ucrania querían verlo y lo echaron afuera.

Podía entender el enojo de los hermanos ex soviéticos, Rusia tenía problemas con el desde antes, y Ucrania ahora lo Odiaba, y ellos creían que él era el culpable indirecto de lo ocurrido. Argentina lo entendía, Pero lo que no podía concebir era que le denegarán el derecho de ver y despedir a su amiga.

Si no la despedía ahora, jamás iba a tener la oportunidad de hacerlo, tendría que viajar a Bielorrusia solo para visitar su tumba. Hasta le había comprado un bonito regalo solo para ella, aunque no estuviera viva para recibirlo.

Pensó en varias cosas, como escribirle a Ucrania para hablar con ella, para que se calmara y así poder solucionar las cosas, y hasta solucionar sus diferencias con Rusia. No quería tener que hacerlo, le daba vergüenza hablar y pedir disculpas, Pero si tenía que hacerlo, lo haría, aunque eso le resultara embarazoso.

Le daba mucho miedo la idea de tener que escribirle a Ucrania, que se enfureciera otra vez con él y lo insultara de nuevo de formas súper creativas, y tendría que hacerlo por mensaje porque Ucrania lo había bloqueado de WhatsApp. Y Rusia era tan boomer que no usaba WhatsApp, y si lo hacía, te ignoraba y no te dejaba ni el visto.

Argentina suspiro, se enderezó masajeándose los muslos y secándose las lágrimas.

Después de pensarlo por varias horas... Decidió que tenía que tomar valor para escribirle a Ucrania y le diera permiso de ver a su amiga, porque si no lo hacía ahora, ya nunca iba a poder hacerlo. El viernes a la mañana ya se llevaban su cuerpo a su país natal, y le quedaba poco tiempo.

Suspiro de nuevo, tomando su teléfono para desbloquearlo e ir directamente al chat vacío de mensajes normales que tenía con Ucrania. Ahora, tenía que rezar de que no haya bloqueado también su número, y que ya se haya relajado lo suficiente para que no reaccione de forma agresiva otra vez.

"... Hola, Ucrania... ¿Cómo estás? Me gustaría hablar con vos... ¿Podemos hablar, por favor??"

"Sé que estás enojada... Pero, por favor, solo déjame hablar con vos... aunque sea un cachito, ¿Si?"

"Está bien si no querés, pero me harías muy feliz si me dejaras... Al menos una última vez"

"Te quiero"

"Por Dios, que hice" pensó Argentina al darse cuenta de lo que acababa de hacer.

Tiro su teléfono a su cama lejos de el, asustado por la terrible avalancha de insultos que el sentía venir. Se puso tan nervioso que el pecho le empezó a doler otra vez.

Se levantó de la cama, caminando de un lado a otro, tocándose la cabeza, tomándose el pecho y preguntándose una y otra vez porque había hecho eso. Pero en parte, trataba de convencerse de que tenía que ser valiente y enfrentar sus inseguridades, pero estaba Tan asustado de recibir otra avalancha de insultos de alguien que le importaba mucho.

Estaba medio acostumbrado a recibir insultos, porque en su país natal muchos lo acosaron por su raro color de piel, Pero insultos de alguien que el quería mucho, eso si que dolía. Ahora mismo se estaba conteniendo de no ir corriendo hasta su teléfono para borrar Todos los mensajes antes de que Ucrania los viera.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 08 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Tío (Francia x Argentina) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora