Cerca del mediodía, Hyun Joong contemplaba con detenimientos el enorme edificio que se alzaba ante él. Traer lentes oscuros le permitía observar sin problema alguno cada aspecto del edificio, sin que algún transeúnte o metiche, se percatara de ello. El edificio había renovado su fachada desde la última vez que tuvo el disgusto de estar allí. Veía como un gran número de personas entraban y salían de ese lugar, absortos en sus propios asuntos, mientras el permanecía de pie, renuente a acceder.
Recordaba a la perfección su visita anterior y como tuvo que permanecer callado ante los ridículos reclamos del dueño de aquella empresa y todo por culpa de Jung Min y Hyung Jun.
Jugar a la familia feliz nunca fue su fuerte, pero aquellos dos estaban empecinados en darle el papel de la mamá pollito que debía defender a capa y espada a sus polluelos. En su caso, debía rescatarlos de su don para meterse en problemas de manera fácil y segura. Aunque debía admitir que era divertido ver al dueño de Seoul Entertainment rojo de furia porque a dos escuincles se les había ocurrido vaciar los fondos y adueñarse de la empresa. A Jung Min y a Hyung Jun no les importaba el dinero, ellos preferían ver como el dueño del lugar, el señor Choi Dol Min, perdía poco a poco el cabello con cada travesura que se les ocurría.
Mientras su mente vagaba por la infinidad de veces que tuvo que ir a rescatar a sus amigos, su cuerpo se desplazaba hacia el elevador. Para su buena suerte, era la única persona que esperaba abordar el elevador. Sonrió satisfecho al verse solo. No quería que su repentina fortuna se esfumara rápido, así que no concedió el privilegio a ningún extraño para que compartiera aquel estrecho lugar con él. Apretó de manera apresurara el botón con el número 33.
No hubo paradas en el primer piso, ni en el segundo, ni en el tercero y tampoco en el cuarto. La sonrisa de Hyun Joong era amplia, hasta que en el treceavo piso el elevador se detuvo y las puertas se abrieron. Una mujer, bastante atractiva, entró. Su instinto carnal, lo obligó a sonreírle a la mujer, quien rápidamente cayó bajo el encanto de aquella perfecta sonrisa.
Nerviosa e insegura, la mujer optó por ignorarlo y mirar hacia el lado contrario. Cinco pisos arriba, reunió todas sus fuerzas y salió del elevador, arrepintiéndose por dejar pasar aquella oportunidad. No todos los días tenía la oportunidad de compartir lugar tan estrecho e íntimo con hombres tan bien parecidos. Echó un último vistazo, para torturarse y continuó su camino.
Hyun Joong rió, la desesperación de la mujer se podía apreciar a simple vista. Contempló como los pasos de ella eran pesados, tristes y cargados de arrepentimiento. La contempló hasta que las puertas se cerraron, reflejando su rostro en las paredes cromadas del elevador. Para poder tener una mejor visión de sí mismo, se quitó las gafas oscuras. Incrédulo miraba una y otra vez su reflejo; lo sentía ajeno, frío, temible y sobre todo, siniestro. Sus ojos eran magnánimos, su sonrisa espléndida y podía lograr, sin dificultad alguna, que cualquier mujer suspirara por él, pero sus facciones rígidas prevalecían ante su atractivo. Tocó cada rincón de su rostro, con la intención de que sus largos dedos suavizaran sus rasgos; al ver que eso era inútil, se miró con odio. ¿A ese rostro sin vida e infausto se tenía que enfrentar su paloma cada vez que lo mirase?
Golpeó dos veces la pared del elevador para poder sosegar su repentina ira y volvió a contemplar su rostro inhumano, así permaneció hasta que el sonido del elevador lo sacó de sus pensamientos y lo hizo olvidarse un poco de su aspecto. Había llegado al trigésimo tercer piso e inmediatamente las puertas del elevador se abrieron, salió, no sin antes ponerse los lentes oscuros.
—¡No puede pasar! —escuchó, cuando sin consideración alguna se adentró en la oficina del director general de Seoul-Entertainment. La secretaria usaba todas sus fuerzas para evitar que él continuara su andar, pero todo era inútil.
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Please don't go
Fanfic¿Qué serias capaz de hacer por la persona que amas? ¿Alejarte de ella para asegurar su bienestar? O ¿mantenerla cerca de ti, aunque el mundo que te rodea solo represente violencia, abusos, sangre... muerte?