ʜɪᴅᴅᴇɴ ʟᴏᴠᴇ (amor oculto):
Jane nunca imaginó que estaba viviendo su primera vida y que existía un hilo rojo que unía a las almas gemelas, aunque ella no tenía uno. Pero ¿qué debería hacer cuando descubre que está conectada por este hilo rojo con ot...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los pensamientos de Jane estaban en otra parte del mundo mientras la profesora daba la clase. Sus ojos estaban fijos al frente, y jugaba con el bolígrafo entre sus dedos, preguntándose: ¿Quién te manda un regalo hermoso y unas horas después besa a otra chica?
Confundí sus acciones, que tonta.
Al terminar la clase, guardó rápidamente sus cosas y colgó la mochila en un hombro, dispuesta a irse. Pero antes de cruzar la puerta, la profesora Lim la llamó.
Soltó un suspiro y volvió sobre sus pasos.
── Jane, quería entregarte esto ── dijo la profesora, sacando una carpeta de su bolso y dándosela. ── Es un caso bastante interesante que podrás analizar, ya que estuviste perdida toda mi clase.
── ¿Lo notó? ── preguntó apenada, mientras la profesora asintió seriamente. ── Disculpe y claro que...
Fue interrumpida cuando la profesora alejó la carpeta de su mano. Jane, confundida, esperó una explicación.
── ¿Ya pensaste en el área en la que te especializarás? ── preguntó la profesora mirándola de reojo.
── Tenía claro que penal, pero no sé si estoy lista ── respondió con voz baja, mostrando su falta de confianza, lo cual alertó a la profesora Lim.
── Lo estarás, colega ── dijo la profesora con una sonrisa cálida y tranquilizadora, transmitiéndole a Jane justo lo que necesitaba para poder terminar el semestre.
── Gracias, abogada Lim ── dijo haciendo una reverencia.
La profesora mayor le entregó la carpeta y se despidieron. Caminando por el pasillo casi desolado, Jane abrió la carpeta y vio una hoja de color pastel verde con las palabras: "Quiero ver a mi futura colega de antes." Esas palabras le llegaron al corazón, recordándole que, aunque su actitud había cambiado un poco este semestre, no decepcionaría a nadie, menos a su madre.
Sería la abogada que todos esperaban. Aprendería a dejar los problemas personales a un lado y a enfocarse en lo profesional. Prometió no distraerse con asuntos de amor y se comprometió a lograr graduarse como una gran profesional, incluso si tenía que pausar su trabajo con Royal Holdings.
Sonrió decidida y caminó más alegre hacia su auto. Puso música y, usando su celular, cambió la contraseña de su departamento. No quería distracciones en los tres meses que quedaban del año.
Quizás apenas contestaría los mensajes de Seunghan, Riku y sus amigas, como debió ser siempre. Sabía que algunos la irían a buscar al edificio donde vivía, pero informaría al guardia que dijera a quien fuera a verla, que no estaba.
A este punto, Jane estaba eligiéndose a ella misma y a su futuro.
Al llegar, subió en el ascensor rápidamente y se dirigió directamente a su habitación. Se quitó los zapatos y se dejó caer en su cama, mirando el techo mientras pensaba en todo lo que había pasado en los últimos días.
── No más distracciones ── murmuró para sí misma, reafirmando su decisión.
Tomó la carpeta y comenzó a revisar el caso que le había dado la profesora Lim. Se sumergió en los detalles, dejando que su mente se enfocara completamente en el trabajo. Pasaron las horas y, por primera vez en mucho tiempo, sintió que estaba recuperando el control.
Al día siguiente, se despertó temprano y se preparó para un nuevo día con una energía que hacía tiempo no sentía. Se dirigió a la universidad, decidida a demostrar su compromiso y dedicación.
Durante las clases, participó activamente y tomó notas detalladas. Sus profesores notaron el cambio y le dirigieron sonrisas de aprobación. Jane se sintió fortalecida por el apoyo y la confianza que le estaban brindando.
Después de clases, se reunió con algunas compañeras de estudio para trabajar en proyectos grupales. Se mantuvo concentrada y aportó valiosas ideas, ganándose el respeto y la admiración de sus compañeras.
Las semanas pasaron y continuó dedicándose plenamente a sus estudios. A medida que se acercaba el final del semestre, sentía que estaba alcanzando sus metas y que su futuro como abogada estaba cada vez más cerca.
Aunque le faltará dos años y algunos de sus amigos intentaron contactarla, ella se mantuvo firme en su decisión de poner su futuro primero. De vez en cuando, Seunghan, Riku y sus amigas le dejaban mensajes de apoyo, recordándole que siempre estaban ahí para ella.
La profesora Lim, en particular, se sintió orgullosa de ver cómo Jane volvía hacer la alumna dedicada y apasionada.
Mientras tanto, en el mundo exterior, Eunseok notó la distancia creciente de Jane. Intentó comunicarse con ella varias veces, pero siempre recibió respuestas breves y formales.
Nicholas continuó monitoreando la situación, asegurándose de que Jane estuviera segura y enfocada.
Un día, saliendo de la universidad acompañada de una compañera, charlaban sobre las clases del día mientras se dirigían al estacionamiento.
── ¿Quién es él? ── preguntó señalando a un chico con gorra y cubrebocas, vestido totalmente de negro, que estaba parado a un lado del auto esperando.
── Un conocido ── respondió esbozando una sonrisa forzada sin mostrar los dientes. ── ¿Nos vemos mañana?
── See you, American girl.
Haseul se despidió, caminando hacia su propio auto estacionado a unos metros. Jane tomó aire, preparándose mentalmente.
Caminó hacia la dirección donde la esperaban y habló cuando estuvo lo suficientemente cerca: ── Hola, ¿qué hace usted aquí?
── ¿Usted? ── repitió mirándola fijamente. ── ¿No crees que es muy formal para dos personas que se conocen?
── Es mayor y según tu cultura, te debo respeto ── aclaró manteniendo una expresión neutral.
── ¿Y por qué respetarías ahora mi cultura?
La pregunta tenía dos respuestas, una sincera y una casi mentira, pero Jane guardó silencio, sacándole el seguro a la puerta del piloto. Lo ignoró dándole la vuelta al auto para poder subir.
── Y gracias por el regalo ── agradeció teniendo la puerta abierta y mirándolo nuevamente entre la distancia que los separaba el auto ── pero me gustaría que ya no lo hicieras.
── ¿Por qué? ── cuestionó Eunseok rápidamente.
── Porque... ── Jane se auto interrumpió y pensó la respuesta ── ...a mi novio no le gusta que reciba regalos con segundas intenciones.
Mintió, cortando el contacto visual, y subió al auto dejando a Eunseok en shock.
Por el lado de Jane, sin más, se fue del estacionamiento pensando que era mejor poner un límite entre los dos, porque él tenía novia y, como ese día, ella guardó distancia y no interrumpió el momento de la pareja besándose.
Recordaba cómo Serim abrazó a Eunseok, haciendo que él soltara una risa y sonriera. Luego, ella se puso de puntillas y lo besó en los labios.
Y claramente, esa es la razón principal e sincera porque empezó a tratarlo diferente.
