Sinfonía de Dos Corazones || JUYOONZ

06. El Comienzo de Todo

Jiyoon

—¡¿Qué?! —exclamó totalmente sorprendida mientras se llevaba una galleta a la boca—. ¿Cómo... así? Me alegra... mucho por... ti —sus palabras apenas eran entendibles por la galleta que estaba comiendo.

—Jeemin, no hables con la boca llena -le di un pequeño golpe en la cabeza mientras una risa se escapaba de mis labios.

—¡Auch...!

Solo sonreí mientras veía la hora. Había citado a Jeemin con la única razón de pedirle que me cubriera por un rato en mi trabajo. La cafetería estaba tranquila a esa hora de la tarde, con solo unos pocos clientes dispersos, disfrutando de sus bebidas y conversaciones. Así que no seria tan difícil en convencerla para un gran favor, además que las galletas ayudaba mucho como soborno cuando se trataba de Jeemin.

—¿Por qué me estás mirando tanto? Me das miedo —dijo Jeemin entornando los ojos, mientras se sacudía las migas de las galletas de las manos.

—Es que... quiero saber si me puedes hacer un gran favor.

Me miró fijamente con una expresión ligeramente seria, entornando los ojos mientras le daba otro pequeño bocado a una de las galletas que le había regalado generosamente, sin malicia y sin intención de que luego le pediría un favor y que las galletas podrían ayudarme.

—¿Qué favor específicamente? —preguntó, ahora con una ceja levantada.

—Que me cubras mi turno. En sí, no es mi turno, es de una amiga que me pidió que se lo cubriera y yo acepté, pero no sabía que me pedirían verme con una persona que podría cambiar todo mi futuro para...

—Sí, por qué no -interrumpió rápidamente la pelinegra, llevándose otro bocado de su galleta. Sabía que Jeemin era la persona en la que podía confiar en situaciones como esta, y me alegraba ver que no dudaba en ayudarme.

Una gran sonrisa se asomó en mis labios, sintiendo cómo se quitaba un peso de encima de mis hombros. Podría concentrarme en la reunión crucial sin preocupaciones adicionales.

—¿Y cuándo tendrás esa dichosa reunión? —preguntó la otra con cierta curiosidad, mientras recogía su taza de café.

—La tengo hasta la noche, así que aún tengo mucho tiempo —respondí, mirando el reloj en la pared. Todavía tenía algunas horas para prepararme y asegurarme de que todo saliera perfecto.

Jungeun

Veo con suma atención la gran ventana que estaba enfrente mío, las copas de nieve seguían cayendo. Nunca me ha gustado la nieve. El frío, la incomodidad y la forma en que la ciudad se volvía un caos.

Con una mueca, mis ojos seguían fijos en aquella ventana mientras esperaba junto con mi manager la llegada de Jiyoon. Por alguna extraña razón, podía sentir cómo mi cuerpo temblaba de los nervios, mi respiración estaba ligeramente más agitada de lo usual, y no dejaba de mover mis dedos, así como mis piernas. Mi manager estaba absorto en su teléfono, pero yo no podía evitar sentir una creciente ansiedad.

—¿Nerviosa, Jungeun? —preguntó mi manager con tono irónico, levantando la vista de su pantalla.

Simplemente le dirigí una mirada, desviando rápido mis ojos de él para posarlos nuevamente en la ventana.

—No, no sé por qué la pregunta. Solo hablaremos con esta chica para entablar una oferta de trabajo, que no durará ni la semana —dije con confianza, más bien en un intento de sonar segura—, así que no entiendo de dónde me ves nerviosa, para serte franca.

De pronto, pareció que todo a mi alrededor se detuvo una vez que la vi. Su atmósfera parecía ser tan auténtica y segura de sí misma. Con tan solo verla entrar a la oficina pude percibir al instante su aura tan fuerte que cualquiera que pusiera sus ojos encima de ella se quedaría impactado. Toda su vestimenta consistía de un color negro, pero aún así brillaba demasiado, tanto que me molestaba. Su paso era firme, y a pesar del frío exterior, parecía irradiar una calidez que llenaba la habitación.

Jiyoon se acercó con una sonrisa confiada, saludando primero a mi manager y luego a mí. Nos sentamos en la mesa de conferencias, y a pesar de mi intento de mantener la compostura, podía sentir su presencia afectándome. Cada palabra que decía, cada gesto que hacía, parecía calculado y preciso, como si estuviera siempre un paso adelante.

—Gracias por haberme invitado —dijo Jiyoon, su voz clara y firme—. Creo que esta oportunidad puede ser beneficiosa para ambas partes.

Traté de concentrarme en sus palabras, pero mi mente seguía volviendo a la impresión que me había causado al entrar. Algo me decía que esta reunión no sería tan simple como había supuesto.

Capitulo corto pero ERA NECESARIO subir capítulo, sorry por la tardanza pero me dio un tremendo bloqueo del escritor😭😭😭

GRACIAAS POR TODO EL APOYO AL FANFIC!!! En serio es muy lindo ver como votan, leen, guardan la historia o simplemente comentan🤍‼️