Ya han pasado dos años desde que soy su padawan y el trato que el me ha dado siendo tan atento y tan protector es algo que jamás he dejado de agradecerle. Aunque he notado que el se a estado volviendo más reservado hasta con sus amistades más cercanas de lo que alguna vez fue y me preocupa que yo sea la causa de su comportamiento, el maestro Bougainvillea siempre lo niega y afirma que solo es por estar cansado y por «no dormir correctamente», yo no se si creerle aunque esas pequeñas ojeras que comenzaron a aparecer debajo de sus ojos verdes me hacen pensar de que tal vez me está diciendo la verdad.
-"¿Maestro?"-, le pregunté sin despegar mi vista de el quien solo se volteo a verme un poco confundido luego de un pequeño sobresalto que tuvo al oír mi voz, como si hubiera olvidado que estoy a su lado casi las 24 horas del día. -"Si dime, ¿Qué pasa Violet?"-, oír que me llamara por mi nombre en lugar de referirse a mi con mi rango de padawan me extrañaba un poco, pero era algo que no le tomaba tanta importancia y en su lugar le respondió a su pregunta con otra. -"¿No cree que debería tomarse un receso de sus actividades como maestro?, desde hace un buen tiempo que lo veo más decaído y ojeroso, se que debe concentrarse en mi entrenamiento, pero como usted mismo dijo, a veces es mejor no exigir más de lo que podemos dar por nuestro bienestar"-, el maestro solo me respondió con un suspiro y cerrando sus ojos, en ese momento temí de que lo que dije lo haya molestado, pero en su lugar este solo me dijo volviendo a abrir y dejarme ver esas dos brillantes esferas verdes mientras que una pequeña sonrisa se dibujaba en su semblante, eso fue un alivio para mí y con ese tono de voz tan cálido y sereno con el que casi siempre hablaba conmigo me dijo. -"Esta bien Violet, supongo que tienes razón, ser maestro es una tarea agotadora, pero no por eso me voy a arrepentir de mi decisión, aunque la verdad no se me ocurre mucho sobre que hacer dentro de este enorme templo...déjame que lo piense un poco"-, mientras el buscaba en su mente algo que hacer yo solamente seguía observándolo fijamente mirándolo de arriba abajo detenidamente a la vez que esa sensación de calidez se hacia presente está vez con solo mirarlo.
-"¿Que tal hacer algo que usted y el maestro Volif acostumbraban a hacer?"-, dije luego de unos segundos en lo cuales había algo que me decía que continuara mirándolo, mi pequeña idea al parecer fue del agrado del maestro quien sin perder aquella sonrisa tan alegre que siempre llevaba consigo dibujada en su semblante me pidió que lo acompañará, pero no me dijo el lugar a donde me llevaría, eso solo aumentaba más mi curiosidad y tras caminar por los enormes corredores del templo ambos llegamos a uno de los balcones del templo Jedi en dónde la suave brisa de aquella mañana en Coruscant movía nuestros cabellos como las hojas de un árbol.
-"¿Hay algo de especial en este balcón maestro?"-, le pregunto un poco confundida pero rápidamente el me dio su respuesta sentándose en el suelo cuidadosamente mientras cruzaba sus piernas viendo al horizonte. -"Realmente no, pero Volif siempre me traía aquí cuando me sentía agotado o estresado de alguna forma el siempre me decía que meditara unos minutos aquí hasta sentirme mejor, además...desde aquí la vista de Coruscant es mas impresionante...acompáñame si quieres"-, no sabía que decir, no sabía si tomarlo como una orden a la que debía obedecer y me preocupaba de que algo malo pasará si no le hacía caso, por eso no dude en preguntarle con un leve nerviosismo en mi tono de voz. -"E-eso...¿Fue una orden?, de ser así lo haré si es lo que usted quiere"-, el maestro volteo a verme directamente a los ojos y un tanto apenada y un poco asustada, pensando en que tal vez dije algo que no le gustó, baje la mirada al suelo casi lista para disculparme pero el solo me respondió. -"S-solo ven, puedes sentarte al lado mío, no habrá problema"-, yo solo me acerque a el sin decir nada al respecto y sin levantar la mirada todavía, tan solo imite las acciones del maestro poniéndome lo más cómoda posible y luego mirando al frente mientras volvía a sentir la brisa fresca que chocaba con suavidad en mi rostro podía incluso sentir como mi pelo se ondeaba ligeramente y oír el silbido del viento.
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𝐕𝓲𝓸𝓵𝓮𝓽 𝐄𝓿𝓮𝓻𝓰𝓪𝓻𝓭𝓮𝓷 ━━━ 𝐓𝚑𝚎 𝐒𝚎𝚌𝚛𝚎𝚝 𝐋𝚘𝚟𝚎
FanfictionLuego de 10 años y de haber empezado casi desde cero en su entrenamiento como Jedi ahora bajo la tutela de su nuevo maestro. Violet Evergarden y Gilbert Bougainvillea deberán hacerle frente a una gran y nueva adversidad, una guerra que se desató com...