𝐏𝐫𝐨́𝐥𝐨𝐠𝐨

138 12 5
                                    

El jardín de Basil se hallaba a los lados de su casa, rodeados por un muro que solo dejaba a la vista la entrada a la casa. Por el lado derecho no había mucho, ya que el suelo era de cemento, construido así como un garaje para un coche que no tenian. Sin embargo, al otro lado de la casa Basil tenía flores y plantas de todos loa tipos y colores, llenando el espacio con apenas un pasillo para ir de un lado al otro y cuidar todas sus flores.
Para desgracia de Basil, estes pequeños lugares no llegaban para ocupar todas las flores que él deseaba tener, así que, debía conformarse con esas.

Era el decimoséptimo cumpleaños de Basil, ya a su edad no se esperaba muchos regalos como cuando era pequeño, al contrario, le bastaba con que su abuela se diese levantado de la cama y junto von Polly le dijeran "felicidades" para luego ir a pasar la tarde con sus amigos.

Y así fue, bueno, no exactamente.

Al llegar a casa se encontró a su abuela y a Polly frente a la puerta aguardando por él.
-¡Felicidades! -Dijeron al unísono.

Por ahora todo estaba siendo como Basil se esperaba. Pero aquí el plan de las dos mujeres no coincidía.

Le vendaron los ojos y lo sacaron afuera, segun Basil sintió, lo llevaron a su jardín de la derecha, lo que para él fue la izquierda, y lo llevaron asta el final mientras el rubio rezaba por no haber pisado alguna flor en el camino.
Una vez al final del jardín, le quitaron la venda y pudo ver su regalo.

El muro que cerraba el jardín con la casa estaba roto y continuaba por detrás de su casa para unirse con el del otro lado, dando así, otro lugar perfecto para las plantas de Basil.
-¿C-Como hicisteis esto..? -Preguntó incrédulo el pequeño.
-¿Por qué crees que la madre de Sunny te dejó dormir allí tantos días seguidos? -Respondió Polly con otra cuestión.

Ahora todo le encajaba al rubio. Por eso llevaba desde el miércoles en casa de Sunny, y ni él ni su hermana o madre le justificaban porque podía quedarse asta el sábado, sabiendo que ese mismo día iban a quedar todos por el cumpleaños del rubio.

Mientras Basil observaba su nuevo jardín, llegó la hora de comer.
Una tarta preciosa de fresa, su favorita. La tarta era blanca y cuando la cortabas, contenía fresas mientras que por la parte de arriba tenía pequeños montículos de nata con las fresas encima de estos.

Una vez terminada la tarta, mis amigos empezaron a llegar, ya que habíamos quedado en salir por la tarde, cenar en Ginno's y quedar a dormir en mi casa.

Los primeros en llegar fueron, sin duda, Mari y Sunny.
-Felicidades Basil, y bien, ¿que te regalaron? -Cuestionó la mayor ya sabiendo la respuesta.
-Simplemente me ampliaron el jardín, ahora es tan grande que casi podria decir que me costará cuidarlo todo yo solo. -Dije soltando una pequeña risa al final, aunque eso si era verdad, me iba a costar cuidarlo.
-Entonces tendrás menos tiempo libre... Oye, ¿Aceptarías ayuda de alguien para tu jardín? Así te restará menos tiempo. -Preguntó otra vez Mari.
-Bueno, depende de la persona, pero, ¿tu no estarás muy ocupada con los estudios? Vamos, estás estudiando cocina y tocando el piano en recitales importantes a la vez. -Pregunté, ya que lógicamente si ella ya estaba tan ocupada no la iba a dejar ayudarme.
-Ah, yo no. Mejor Sunny, él tan solo toca el violín conmigo, y aún esta en preparatoria, así que no le será dificil, ¿verdad Sunny? -El chico un poco sorprendido por su mención tan repentina en la conversación, asintió.
-Oh, bueno entonces está bien. -Dije, aceptando la solicitud.

Seguimos hablando un tiempo sobre diversos temas mientras llegaba el resto, ya que Mari era tan perfeccionista que tenía que llegar siempre primera, incluso Sunny me dijera que para los conciertos llegaban vasi una hora antes.
Llegaron Kel y Hero, y por último Aubrey, que, a pesar de ser la que mas cerca vivía se retrasó de la hora de quedada, las cinco de la tarde.

Una vez todos estábamos allí, me despedí de Polly y la abuela y nos fuimos.

✩.・*:。≻───── ⋆♡⋆ ─────.•*:。✩
-712 palabras-
Ayuda es el cap mas corto.

𝐶𝑜𝑟𝑎𝑧𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑒𝑛 𝑎𝑟𝑚𝑜𝑛𝑖𝑎 (𝑆𝑢𝑛𝑓𝑙𝑜𝑤𝑒𝑟) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora