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Los días de la primera semana de clases en la nueva escuela comenzaron a pasar rápidos, solo iba allí, me sentaba en cada clase para tomar atención y volvía a casa.

Era Viernes, último día de la semana, ya había terminado la primera clase y me dirigía hacia la cafetería para tomarme un café bien cargado para amortiguar el sueño que traía, últimamente dormía muy mal por las noches.

-¿Que café va a querer?.-preguntó la señora de la cafetera.

-Uno normal, porfavor.-sonreí levemente hacía la señora.

-Te recomiendo el mocaccino.-habló una voz femenina a mi lado en la fila para el café.-Es muy rico.

-Me quedo con el normal.-dije rápidamente intentando no mirar mucho a la chica.

-Si quieres podemos compartir cafés.-escuche nuevamente la voz y suspiré levemente para voltearme.

La chica era una pelirroja de llamativos ojos verdes que me miraba atentamente, con una sonrisa amable.

-Gracias, pero esta vez, paso.-fingí una sonrisa y volví a voltearme para recibir el café que me entregaba la señora.

En cuánto tuve mi café caminé lejos de allí, pero sentí pasos que provenían detrás de mí.

-Mi nombre es Peyton.-dijo la chica caminando a mi lado de manera animada.-Te he visto últimamente y siempre estás sola, no te haría mal algo de compañía.

-No es un problema estar sola para mí, no te preocupes.

-¿Cual es tu nombre?.-preguntó ignorándome completamente.

-Maddy.-respondí tomando asiento en una de las mesas del campus.

-¿Eres nueva cierto?.-la chica se sentó a mi lado.

-Ajá.-afirmé.

-Y no de muchas palabras.-dijo ella con una leve risita y yo la miré.

-Lo siento, no me interesa socializar.-me encogí de hombros.

-Así veo.-ella también me miró.-Pero nunca es malo tener alguien con quién hablar.

Solo sonreí, realmente no me desagradaba la chica.

-Hoy por la noche hay un partido de béisbol aquí en la escuela, la mayoría de alumnos vienen por que juega nuestra escuela versus otra.-dijo ella mientras yo solo le daba sorbos a mi café.

-Genial.-respondí sin emoción.

-¿Vamos?.-preguntó.-Así conoces la cancha de la escuela y te familiarizas con las actividades de ella.

-Hoy tengo planeado tarde de películas con mi hermano pequeño.-hice una mueca.

-Pues llévalo, así lo sacas un rato para que tome aire.-dijo la chica y yo reí negando con mi cabeza.

-No lo sé.-suspiré.

-¡Vamos!, te pasaré a buscar y a dejar.-dijo ella emocionada.

Suspiré mirando mi café analizando la situación.

-Le preguntaré a mi hermano y te confirmo.-respondí.

-Genial.-la chica sonrió satisfecha.

Intercambiamos números con Peyton para avisarle en caso de que Thomas aceptara.

Posterior a eso Peyton se despidió para irse a su clase y yo me fui a la mía.

-Ey, ten más cuidado.-escuché la voz de Javon al golpear levemente su hombro al pasar por la puerta de la sala.

𝐸𝓁 𝓈𝑒𝓃𝓉𝒾𝒹𝑜 𝒹𝑒 𝓁𝒶 𝓋𝒾𝒹𝒶 ~ [𝒥𝒶𝓋𝑜𝓃 𝒲𝒶𝓁𝓉𝑜𝓃]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora