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MADDY

Pues sí, si me dió celos, pero no celos de Javon o de que el hiciera algo, celos de esa chica que apesar de verme junto a el tenía tenía sus manos puestas en él coqueteándole descaradamente.

-Lo siento por eso.-dijo Javon una vez llegamos a las mesas con vista a la ciudad para disfrutar el helado.

-No lo sientas, no es tu culpa lo que esa chica haga.-fruncí mis cejas.

-Lo sé, pero no me gusta que te pasen a llevar.-el me miraba con atención.

-No es tu culpa.-volví a repetir.

Javon me miraba sin quitar sus ojos de mí, luego una sonrisa se formó un su rostro casi por arte de magia.

-¿Que?.-entrecerré mis ojos.

-Te ves muy linda celosa.-el sonrió y yo rodé mis ojos.

-Que gracioso eres, Walton.-negué con mi cabeza sintiendo mis mejillas arder.

-Es enserio.-el rió y se acercó para darme un beso corto.-Me gustas en todas tus versiones.

-Suficiente.-negué nuevamente intentando aguantar una sonrisa pero Javon con su risa me complicaba la situación.

Claro que me dió celos, y odiaba los celos, odiaba que Javon me viera celosa, siento que es un punto bastante vulnerable, pero con sus risas y besos todo parecía mejorar.

Al cabo de un rato volvimos a casa, donde se encontraba mi tío,  junto a su hijo jugando videojuegos con Thomas. Al llegar saludamos a todos, les presenté a Javon y luego de un rato de compartir, nos fuimos directamente a acostar. El sueño y el cansancio abundaba en ambos, habíamos caminado prácticamente toda la tarde.

-Iré a realizarme la rutina de noche en mi piel y vengo.-dije de pronto viendo como Javon se ponía su pijama para acostarse a dormir.

-Deberías solo lavarte los dientes como yo.-dijo Javon con una media sonrisa.

-Debería.-reí y sin más salí de la habitación directamente al baño para comenzar rapidísimo la rutina y poder acostarme lo antes posible.

Mientras aplicaba la crema y los respectivos serúm en mi rostro, escuchaba la voz de Javon desde la habitación. Una vez terminé con mi rutina, cepillé mis dientes y caminé por el pasillo directamente a la habitación, pero antes de entrar escuché algo que me pareció un tanto extraño.

-Lo sé, si.-era la voz de Javon, al parecer hablando por teléfono, por que no podía escuchar las respuestas desde el otro lado.-Está bien, Maddy no se enterará.

Fruncí mis cejas al escuchar eso y me detuve al lado de la puerta para ver si lograba escuchar algo más.

-Si lo sé, estás siendo muy extremista, y me pones nervioso.-escuché el suspiro de Javon.-Luego te llamo, si necesito de tu ayuda.

Al escuchar eso, entré a la habitación y Javon al verme automáticamente cortó la llamada dejando su teléfono a un lado.

-¿Asustado?.-lo miré extrañada mientras guardaba las cremas dentro de mi bolso.

-¿Por que estaría asustado?.-el rió nervioso.

-La manera en que cortaste la llamada, ¿hay algo que yo no podía escuchar?.-me crucé me brazos viéndolo fijamente acostado en mi cama.

-No, claro que no.-el rió nuevamente.-Ven, acuéstate conmigo.

Lo miré con mis ojos entrecerrados y caminé lentamente a la cama para acostarme junto a el. Javon se posicionó justo enfrente de mí, pasando una de sus manos por mi rostro para acariciarlo suavemente.

𝐸𝓁 𝓈𝑒𝓃𝓉𝒾𝒹𝑜 𝒹𝑒 𝓁𝒶 𝓋𝒾𝒹𝒶 ~ [𝒥𝒶𝓋𝑜𝓃 𝒲𝒶𝓁𝓉𝑜𝓃]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora