𝘊𝘢𝘱í𝘵𝘶𝘭𝘰 6

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Rhaenyra y Daemon pasaron la noche discutiendo los detalles de la posible mudanza de Aegon y sus hermanos. La conversación se extendió por horas, mientras ambos sopesaban los pros y los contras de la propuesta. Sabían que la decisión de mudarse a Florencia, lejos de las tensiones y presiones de la corte, podría ser beneficiosa para los jóvenes príncipes, pero también estaban conscientes de las posibles repercusiones familiares y políticas que esto podría acarrear. La conversación era un intercambio constante de ideas y preocupaciones, con ambos aportando sus puntos de vista y posibles estrategias para hacer que la transición fuera lo más suave posible.

Al día siguiente, decidieron que antes de comunicar la decisión a Aegon, era necesario hablar con su padre, el rey Viserys, para asegurar que todo se hiciera de manera correcta y respetuosa. Sabían que la opinión del rey sería crucial y querían asegurarse de que todo se manejara con la mayor diplomacia posible. Además, eran conscientes de que este asunto podría desencadenar complicaciones, especialmente si Alicent, la madre de los jóvenes príncipes, se enteraba antes de tiempo. Alicent había demostrado ser una madre extremadamente protectora, y cualquier cambio en la vida de sus hijos probablemente sería recibido con gran resistencia.

Al llegar al palacio, Rhaenyra y Daemon fueron llevados a la sala del consejo, un lugar que estaba acostumbrado a ver debates de alta importancia, pero que hoy se sentía cargado con una tensión inusual. Encontraron a Viserys sentado a la silla que le corresponde al Rey, con una expresión cansada pero amable. La presencia de su padre siempre tenía un efecto calmante en Rhaenyra, pero hoy había una nerviosidad palpable en el aire.

Viserys, al ver a su hija y a su hermano, se levantó de la silla y les dirigió una sonrisa acogedora. "Rhaenyra, Daemon, es bueno verlos. ¿A qué debo el honor de esta visita inesperada? — Su voz, aunque afectuosa, llevaba un tinte de curiosidad, sabiendo que las visitas al consejo nunca eran simples."

Rhaenyra se inclinó ligeramente en señal de respeto y respondió con seriedad. "Padre, necesitamos hablar contigo sobre algo importante. Es sobre Aegon, Helaena, Aemond y Daeron."

Viserys frunció el ceño, preocupado. "¿Qué pasa con ellos? ¿Están bien?"

Daemon, con una expresión solemne, intervino. "Están bien, pero están pasando por un momento difícil. Nos pidieron que consideráramos que se mudarán con nosotros a Florencia, lejos de las presiones de la corte."

Viserys levantó una ceja, sorprendido por la solicitud. "¿Mudarse con ustedes? Eso es... una gran petición. ¿Están seguros de qué es lo que quieren?"

Rhaenyra asintió, confirmando la decisión de los jóvenes príncipes. "Sí, padre. Están buscando un respiro del ambiente que los rodea aquí. Pero queríamos consultarlo contigo primero para asegurarnos de que todo se maneje de la manera correcta."

Realeza Moderna: La Familia TargaryenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora