𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐈𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐂𝐎𝐑𝐀𝐙𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐑𝐎𝐓𝐎𝐒 [Roberto Cein X Tú]✓

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Después de casi 40 minutos atorada en un poco de tráfico gracias a un accidente y de haber corrido algunas calles, logré llegar al lugar donde ya no había tantas personas

Chucho me miró y corrió hasta donde estaba

-¿Pasó algo en mi ausencia?.- cuestioné y él asintió mientras sacaba la tablet -¿Para que sacas eso?.-

-En su ausencia aprendí a anotar las cosas aquí, es más fácil.- dijo mientras buscaba la app de notas, yo sonreí sabiendo que se estaba adaptando al trabajo -El señor Beto vino, preguntó por usted y como no le pude mentir me respondió "Dile a la señorita Trix que es una pendeja y que no cumple sus promesas".-

-¿Me delataste?.- cuestioné y asintió

-Y no me arrepiento.- admitió -Tengo mi conciencia limpia.-

Suspiré un tanto frustrada, Chucho era demasiado bueno, pero no me servía de nada que fuera mi asistente si no me cubriría

-Bueno, pensemos positivo, cuando dijo que yo era una pendeja ¿sonaba molesto?.- pregunté rogando por escuchar una respuesta negativa

Mi asistente me hizo una señal que no logré entender

-¿Tú que crees?.- cuestionó una voz detrás de mí

Me giré solo para notar que mi novio estaba ahí con los brazos cruzados, esta vez no podía burlarme de eso, por su expresión noté que no era momento de hacer bromas

-Hola.- saludé con una sonrisa nerviosa -Que guapo estás, no te había visto bien.-

-¿A dónde fuiste?.- cuestionó Roberto -No sé ni para qué te pregunto si ya lo sé.-

-Sé que dije que hoy era tu día, pero me salió algo urgente.- intenté justificarme -Debí avisarte, perdón.-

-¿Algo urgente?.- preguntó ahora -El pendejete te abandonó cuando lo necesitabas, pero cuando él te necesita corres hasta donde está.-

-Solo necesitaba una explicación, tú sabías que tenía mi mente enredada con eso.- murmuré

Aún había algunas personas aquí así que no quería hacer un espectáculo, podríamos hablar de esto cuando estuviéramos solos

-Te fuiste y le pediste a Chucho que me mintiera.- se quejó y miré a mi asistente, ¿también le había dicho eso?

-Hablemos de eso en el departamento.- pedí sabiendo que no podría evitar el tema

Él estaba por responder, pero un grupo de personas se acercaron a saludar a mi novio, por ende también me saludaron a mí

-No quiero sonar grosera, pero solo lo ubico a él.- señalé al más alto -¿Eres el Mariana, no?.-

-El wey mide casi 2 metros, claramente lo vas a reconocer.- se burló una chica que se parecía muchísimo a Ari

-Ella es Ama, el de al lado es Filis y el otro es Aldo.- exclamó mi novio mientras los iba señalando

Hoy había conocido a bastante gente que sería muy complicado grabarme los nombres de todos, igual quería intentar no equivocarme

-¿Y Ari?.- cuestioné recordando que aquella chica era una de las personas que tenía más ansias de conocer

-Se quedó con Juan acomodando unas cosas en el hotel.- contó Ama -Dijo que todos nos veríamos más tarde, cuando vayamos a cenar.-

Miré a Roberto, ¿iríamos a cenar con todos ellos?, claramente no tenía oposición, pero me hubiera gustado que me preguntaran

-Yo ya me vamos men, tengo que ir a comprar unas cosas antes de regresar al hotel.- avisó el Mariana

-Yo voy contigo wey, no me quiero quedar.- dijo Aldo

Ambos chicos se alejaron, pero Aldo prácticamente se llevó a Filis dejándonos solo con Ama

-Esos perros me dejaron.- murmuró y me burlé un poco de como los miró irse -Tengo que ir por mi esposo, no confío en el pinche Aldo.-

Se despidió de nosotros con una pequeña sonrisa y se fue detrás de los chicos, había sido un encuentro bastante breve

-¿Ya terminaste con las fotos?.- pregunté y asintió

-Te perdiste de verme frente a las cámaras.- dijo -Pero ya no importa, vámonos.-

Empezó a caminar dejándome atrás, avancé rápidamente hasta quedar a su lado y poder ir a la par

-¿Estás molesto?.- pregunté y negó, ni siquiera me miraba, intenté tomar su mano, pero me lo impidió -¿Seguro?.-

-No me siento molesto, creo que es muy raro que yo me enoje contigo.- soltó mientras salíamos de aquel lugar

-¿Entonces?.- cuestioné sin entender su actitud

-Sé que tienes historia con Manuel, me hace sentir un poco raro que lo elijas a él cuando dijiste que hoy era mi día.- intentó explicar -No quiero sonar dramático, pero creo que mis sentimientos también son válidos.-

Asentí dándole la razón, fui egoísta al irme sin avisarle

-No quiero justificarme, pero es la primera vez que intento arreglar mis problemas sola, ni siquiera supe por donde empezar.- dije -Perdón si te hice sentir mal o si sentiste que te dejé de lado, no quería que eso pasara.-

-Está bien.- soltó un suspiro -Igual quiero que me cuentes lo que pasó con Manuel, me siento un poco picado por enterarme de todo.-

Reí un poco, aunque él estuviera serio preguntaba por el chisme, empecé a notar ese distintivo en él

Querido Roberto, simplemente ¿POR QUÉ?