𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐈𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐂𝐎𝐑𝐀𝐙𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐑𝐎𝐓𝐎𝐒 [Roberto Cein X Tú]✓

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Poco más de una semana pasó y el día de mi cumpleaños llegó. Como lo había planeado tuve un día completamente normal en mi trabajo

—¿¡Otra entrevista!?.— cuestioné alterada

Después de todo este tiempo de grabación, los programas de radio y televisión saturaban mi agenda con apariciones o entrevistas. Yo sabía que debía controlar mis pendientes, pero ahora veía lo complicado que era llevar mi agenda

—Es para promocionar la película, sabes como son estas campañas.— dijo uno de los productores —Terminaremos con las grabaciones pronto y aunque aún faltará bastante para que se estrene, es bueno generar curiosidad en la gente. Desde que supieron que volverías en la pantalla grande, los medios enloquecieron.—

Suspiré, hoy era mi cumpleaños y aunque no solía celebrarlo, quería ir a descansar un poco. Roberto dijo que no quería intervenir en mi trabajo y que lo llamara cuando me desocupara para pasar juntos este día, eso es justo lo que más anhelaba

—Hoy te pidieron solo en dos programas.— avisó y lo miré mientras me pasaba una hoja con los detalles

La primera era una entrevista en el radio, podía hacer eso, solían ser más rápidas. Pero la segunda simplemente la leí antes de reír un poco

—La primera está bien, es en 1 hora así que queda bien con mi horario.— dije regresándole aquella hoja —La segunda ni de chiste.—

—No podemos negarnos, es una televisora importante.— exclamó

—Ellos me vetaron de ahí, es increíble que ahora esperen que regrese.— conté —Quizás es cuestión de ego, pero yo era actriz exclusiva de esa televisora hasta que decidieron hundirme.—

El productor lo pensó un poco y después asintió

—Este medio es asqueroso, es bueno que haya alguien que sepa mantener su dignidad y no se arrastre por atención.— soltó y fue imposible no reír —Cancelaré la segunda, no te preocupes.—

Sin más se fue de mi camerino y yo empecé a guardar mis cosas, aún me faltaba grabar una escena, pero terminando me iría rápidamente

(.....)

Había estado en la entrevista con un par de locutores bastante divertidos, no sabía cuanto tiempo llevaba aquí, pero lo estaba disfrutando

—Jamás te había tenido tan cerca, tienes una de las caras más lindas de la televisión en nuestro país.— halagó uno de ellos

Sonreí, ambos parecían máximo 5 años mayores que yo, no era un ambiente para nada incómodo

—Gracias.— exclamé sabiendo que estábamos al aire —Hace mucho no me decían que les parecía linda.—

Eso no era del todo mentira. Era cierto que tenía a Beto diciéndome cosas lindas casi todos los días, pero decirme "linda" era algo un tanto simple

—Nos enteramos de que estás de cumpleaños hoy, ¿ya tienes con quien pasar tu día, o estás libre para una cena?.— preguntó

Su compañero solo se burlaba de la situación, yo decidí tomármelo como algo amigable

—Ya tengo planes.— avisé —Se supone que solo venía aquí para hablar sobre mi trabajo, pero creo que ya nos olvidamos de eso. Hasta supongo que ya debí irme hace rato.—

—No te vayas.— pidió el que solo se había estado burlando —No nos dejes sin el placer de que esos ojitos cafés nos sigan mirando.—

—Además no debes irte sin contarle a los que están escuchando este programa, ¿con quién pasarás este día tan especial?.— preguntó el que parecía querer algo conmigo —No me digas que esos ojos bonitos ya tienen a quien mirar.—

Sabía que querían que les dijera algo sobre mi vida privada, así tendrían la exclusiva

—¿Saben? Yo siempre he dicho que amo mis ojos cafés, pero ya saben, no me refiero a estos ojos.— señalé mi cara —Me refiero a esos ojitos que brillan cuando me ven y me demuestran que cuando estoy cerca solo son míos.—

Eso podría sonar confuso, era mi forma indirecta de confirmar que amaba a alguien con los ojos cafés más lindos que los de cualquiera y esos son los de Beto

(.....)

Terminó mi entrevista y no tardé mucho en dirigirme a casa. Mientras iba en el auto decidí enviarle un mensaje a mi novio

"Fue un día largo, pero
ya voy a casa. ¿Te
espero ahí o tienes algún plan?"

Pasaron algunos minutos hasta que tuve mi respuesta por fin

"Salí con unos amigos,
llegaré un poco tarde
¿te molesta?"

Él sabía que no solía celebrar mis cumpleaños, pero aun así pensé que estaría esperándome, me sentí un tanto desilusionada

"Para nada, diviértete. Yo
voy a llegar a dormir un rato,
no he descansado bien"

Y sin más guardé mi celular. Me recargué en el asiento, no mentí cuando dije que necesitaba descansar

(.....)

Me había quedado dormida, pero cuando desperté me di cuenta de que mi chófer había estado dando vueltas y cuando lo confronté tomó la ruta más lenta hasta mi casa, era como si no quisiera que llegara

Cuando por fin estuve fuera de mi casa; saqué mis llaves y abrí, como lo esperé todo estaba oscuro. Cerré la puerta y prendí la luz de mi sala, pero no funcionó, ¿se había fundido el foco justo hoy?

Dejé mi bolso en uno de los sillones y caminé hasta la cocina. Pensé en ir por un vaso de agua, pero me detuve al notar que la luz de ahí si estaba prendida

—¿Hay alguien?.— pregunté caminando lento hasta ahí —¿Chucho?.—

Mi amigo había sido mi primera opción, después de todo, aunque había renunciado no me había dado la llave que tenía de mi casa

Al no tener respuesta caminé un poco más, cuando estuve en la puerta de la cocina noté a Roberto ahí, estaba de espaldas así que supuse que estaba cocinando

—¡Llegué!.— avisé y se sobresaltó —¿Qué haces aquí?.—

—Le pedí las llaves a Chucho para prepararte algo.— avisó, aún no se giraba para verme —Pensé que tardarías más en llegar, hasta le pedí ayuda a tu chófer.—

—Ahora entiendo por qué me dejó dormir mientras daba muchas vueltas por aquí.— reí mientras me acercaba

Tomé su brazo para girarlo y que pudiéramos quedar frente a frente, cuando lo vi fue imposible no sonreír

—Mi enmascarado regresó para mi cumpleaños.— exclamé feliz —Esto me encanta.—

—Quizás no estás acostumbrada a festejar tu cumpleaños, pero se me ocurrió hacer esto, es algo bastante sencillo.— dijo —Me puse el antifaz cuando te escuché entrar, dudé bastante en ponérmelo.—

Dejé un pequeño beso sobre sus labios y noté que sonrió.

Era el primer cumpleaños que realmente disfrutaba a pesar de pasar la mayoría de mi día trabajando, todo valió la pena cuando regresé a casa y me encontré a mi guapo novio usando la máscara con la que lo conocí. Me sentí como la chica más afortunada del mundo