~Lumine POV~Ei y yo no parábamos cuando se trataba de los preparativos para la boda. Estábamos a tan sólo un mes, pero aún había muchas cosas por preparar. Algunas veces estábamos al borde de la discusión, sin embargo, nunca pasaba de ahí. Scaramouche, por otro lado, aguantaba mucho mi irascible humor.
—Pienso que se verían mejor unas hortensias a los lados del altar —comentó Ei—. Le daría un toque más bonito, dado a que tu vestido también tendrá bordadas algunas flores de tonos azul maya y violeta.
—Pienso igual que tú. Harían juego.
Ei anotó las cosas que ambas comentábamos mientras discutíamos qué se vería mejor. Aunque ella no lo sabía, estaba siendo uno de mis mayores pilares en este punto. Yo no tenía ni una madre, ni una hermana y mucho menos tenía mejores amigas. Tenía conocidas a las que les hablaba algunas veces, pero no podía decir que las consideraba amigas. La realidad era que no tenía amigas. Ei era mi mejor amiga, y la única.
—¿Sabes algo? Pienso que estamos un poco fritas. —Ei se acomodó el cabello, se quitó los anteojos y me miró—. ¿Qué te parece si salimos a comer? Yo invito.
—Sí, la verdad creo que necesito un poco de aire fresco. Mi cerebro se está cocinando ahora mismo con tanto pensar. —Me solté el cabello y me levanté de la silla para caminar hacia la puerta, acto que Ei imitó—. ¿Te parece comer jajangmyeon?
—Sí, me encanta la idea. Hace mucho que no como jajangmyeon.
Ambas nos pusimos nuestros abrigos y salimos de la casa. Ambas estábamos cansadas de tanto pensar en tantas cosas. Éramos las únicas que sabíamos decidir. Scaramouche siempre contestaba que él estaba feliz con lo que a mí me hiciera feliz cuando le hacía una pregunta sobre qué le gustaba más. Desde afuera, cualquier persona diría que no le importaba, pero en realidad, Scaramouche decía la verdad. A él no le importaba nada de eso.
Ei y yo nos dirigimos a un restaurante que ya conocíamos de algunos meses. Ella nunca había probado el jajangmyeon en ese restaurante, pero mi hermano, su novio y yo sí, y era de los mejores que habíamos probado. Estaba segura de que a Ei le encantaría ese lugar.
La atención era muy buena, así que era otro punto a favor del lugar. A Ei le encantaba la buena atención, le encantaba que la trataran como a una reina. En cuanto llegamos, Ei no fue sólo muy bien atendida, sino que una de las meseras era fanática suya ya que también amaba la robótica. Al final se sintió como en casa.
—Que lo disfruten —dijo la mesera después de traernos los platos—. Con permiso.
—Gracias —respondimos al unísono.
Ei y yo comíamos en silencio. Ambas moríamos de hambre, pero pude notar en su manera de mirarme que quería decirme algo, así que le sonreí primero, luego me limpié la boca y hablé.
—¿Qué pasa? Conozco ya esa mirada, hay algo que quieres decirme.
—Estaba pensando que, probablemente, si Soma te hubiera conocido, también se hubiera enamorado de ti.
—¿Soma? —pregunté—. ¿Soma era el nombre de...?
—Sí, Soma era el nombre de mi hijo, en el cual me inspiré para crear a Scaramouche.
—Tiene un nombre de origen japonés, ¿no es así? —pregunté curiosa, ya que quería indagar un poco, pero no sabía hasta qué punto lo tenía permitido—. No tienes que responder mis preguntas si no lo quieres. Probablemente debe ser difícil para ti.
—Quiero responderlas, es tiempo de soltar el pasado. —Ei suspiró mientras miraba al techo—. Aether jamás lo mencionó, pero en realidad yo soy de padres japoneses, y mi infancia la pasé en Japón. Soma nació durante un tiempo en el que el viento era salvaje, así que le puse ese nombre por eso.
—Entiendo —sonreí al verla sonreír envuelta en la nostalgia—. ¿El padre estaba de acuerdo con el nombre?
—El padre no se hizo responsable ya que ambos éramos niños aún. Yo tenía 13 años cuando lo conocí en la escuela, él era apenas un año mayor que yo. Naturalmente, sus padres se opusieron a nuestra unión y lo mandaron a estudiar al extranjero. Ambos nos amábamos, pero a esa edad, uno no sabe que las decisiones tienen peso, y más ese tipo de decisiones. —Ei le tomó a su vaso de soju—. Debimos cuidarnos, pero ni siquiera sabíamos bien qué era lo que debía hacerse.
—¿Y tus padres...?
—Me corrieron de mi casa, así que me vine a vivir con mi abuela a Corea, quien me aceptó y me cuidó en todo momento. Ella me adoraba, así que no le importó mi historia. —Ei sonreía al recordar algunas cosas—. Soma nació en otoño, y yo hice todo lo posible por darle tanto como podía, pero ¿qué tanto puede realmente dar una madre adolescente por sus hijos? No tenía un buen trabajo, tampoco tenía un buen control de mis emociones. Lo único que tenía era amor para darle, pero al ser tan joven... no lo hice correctamente. Pero realmente lo amaba.
»El tiempo pasó, y yo estudiaba y trabajaba. He de admitir que a veces estaba tan harta que pensaba en cosas horribles... cosas como dar a mi pequeño Soma en adopción. La carga era mucha, sobretodo la emocional. Sentía que todo se me iba de las manos y que no estaba viviendo mi vida. —Los ojos de Ei se aguaron—. En un punto de mi vida, tuve mucho resentimiento contra él por "arrebatarme mi vida". Fui una miserable.
—Ei, eras una niña, era natural que tuvieras esos pensamientos. No estabas lista para tal responsabilidad tan grande. —Acaricié su brazo para consolarla—. Era una carga muy fuerte para una niña y no sabías ni siquiera lo que estabas sintiendo.
—Lo sé, pero no puedo evitar sentirme culpable por ello. Comencé a ser grosera con él, a dejarlo de lado. Él lloraba por mi atención y yo lo regañaba por ello. Estudiaba mucho para salir adelante y tener un buen trabajo. Estudié programación primero y terminé cuando él tenía 10 años. Soma se había vuelto un niño callado, no me contaba nada y tampoco me molestaba demasiado. Todo el tiempo estaba encerrado en su habitación haciendo tarea y yo... como una perra agradecía que no me molestara mientras estudiaba. —Ei se limpió una lágrima de la mejilla—. El tiempo pasó, yo ahora trabajaba en una compañía y tenía un buen sueldo. El horario no era malo, y tenía tiempo para Soma, así que hacía la lucha por recuperar la relación que yo misma había echado a perder, pero Soma no estaba muy interesado.
»Ahora que era mayor, me daba cuenta de que había sido mala y negligente con él. Él tan sólo tenía 13 años y era más inteligente y capaz de comprender que yo. Comenzamos a empatizar un poco, pero no demasiado. Nuestra relación tenía una enorme grieta que ya no podía repararse, pero no me di cuenta en ese momento. Pensaba que con amor todo se podía.
»Pasaron dos años más. Aether y yo nos conocimos en una cafetería en ese tiempo. Recuerdo preguntarle qué les gustaba a los jóvenes de su edad para intentar congeniar con mi pequeño Soma. Realmente quería recuperar el tiempo perdido al máximo. Aether me dio algunos consejos y me ayudó. Era un niño muy maduro para su edad, siendo que sólo era un año mayor que mi hijo. No sabía en ese momento que estaba pasando por algo tan doloroso como la muerte de sus padres y por eso iba a ese lugar para calmarse.
—Mi hermano tiene más habilidad social que yo —sonreí—. Me alegra saber que te ayudó.
—Él realmente fue de mucha ayuda, porque por unos días pude ayudar a mi pequeño. Vi que era feliz, o cuando menos eso pensé. —A Ei le tembló la mandíbula, supe que estaba reteniendo su llanto—. Nos mudamos al edificio Taesin poco tiempo después, todo gracias a mi trabajo. Teníamos un hogar prácticamente gratuito, ya que era un edificio para que los empleados no tuvieran que desplazarse tanto a sus trabajos. Pensaba que todo estaba yendo bien, mejor que nunca. Soma y yo nos llevábamos tan bien en ese momento que realmente pensé que ahora me amaba.
»El día en que lo perdí, tuvimos una conversación mientras comíamos fideos. Él me dijo que nunca me había odiado, que sólo se sentía solo y triste algunas veces. Me dijo que siempre me había amado y admirado mucho por sacarlo adelante a una edad tan joven, que él jamás se habría visto como padre a esa edad. —Las manos de Ei temblaban sin parar—. Me dijo que era una mujer fuerte y brillante, y que siempre podría salir de cualquier dificultad que se me presentara con gracia. Estaba atónita, pero lo abracé con todo el amor que pude haberlo abrazado. Poco sabía que sería nuestro último abrazo.
Ei tuvo que tomar un descanso de algunos segundos, ya que temblaba y lloraba tanto que no podía controlarse. Le daba palmaditas en la espalda para consolarla. Necesitaba que supiera que estaba para ella. Quería decirle que podía continuar o podía parar, que sólo quería que estuviera bien.
—Al final, me abrazó, con lágrimas en sus ojos y me dijo que saldría un momento, que... tenía que hacer algo, pero que me amaba mucho. Debí sospechar, debí notar su inusual comportamiento, pero no lo hice. Él salió por esa puerta para no volver nunca. Cuando comenzó a pasar el tiempo, me di cuenta de que algo estaba mal. Salí para buscarlo, para ver si podía encontrarlo.
»Cuando salí, encontré a mucha gente reunida mirando en la parte trasera del edificio. Fue cuestión de segundos Lumine. Caminé hacía allá, y entonces escuché un golpe fuerte. Toda la gente comenzó a gritar, algunos incluso vomitaban. Fue entonces cuando corrí... —Las manos de Ei temblaban más que nunca, y al tomárselas para intentar calmarla, noté lo frías que estaban—. Lumine, mi niño estaba tirado en el suelo, con una cantidad exorbitante de sangre a su alrededor. Su mirada era gris. Ya no había vida en él, sus ojos me lo hacían saber.
»Nunca lloré tanto en mi vida como ese día. Gritaba y lloraba mientras abrazaba el cuerpo de mi pequeño Soma en brazos. Pasaron horas y yo seguía ahí, abrazándolo, odiándome como nunca había odiado a alguien en mi vida. Los paramédicos, peritos y todo el personal encargado de esas cosas fueron muy pacientes conmigo al dejarme vivir mi duelo abrazada de mi niño.
—Ei... no puedo ni siquiera imaginar lo doloroso que debió ser para ti.
—Ha sido lo más doloroso que he vivido. Duré años mal. Sentía que el tiempo pasaba y que yo jamás avanzaría. En un intento por distraer mi mente, me metí a la universidad a estudiar robótica. Ahí me reencontré con tu hermano. Obviamente él me preguntó por Soma y entonces me solté a llorar nuevamente. Él fue de gran apoyo para mí, como un sobrino, un hermano menor incluso. Él me contó de sus padres y ambos congeniamos aún más. Él me ayudó muchísimo con mi duelo, y me dio la idea de hacer algo en su honor, más después de comentarle que mucha gente se había suicidado ahí por la altura del edificio.
»Scaramouche realmente fue mi mayor creación, es mi segundo hijo. Es el recuerdo de Soma, el monumento de mi pequeño. Decidí ponerlo en la azotea poco tiempo después y eso salvó a mucha gente, incluyendo a la que ahora será su esposa —Ei me sonrió y me tomó de las manos—. Sin embargo, debo dejar ir a Soma. Es por eso que mis nuevas IAs ahora tienen otro diseño, y Scaramouche 2.0 ya no ayuda en las azoteas, sino Ara, mi nueva IA. Soma debe irse, ser feliz y descansar. Debo dejarlo ir. Por eso apoyé la relación de ambos en todo momento, aunque te odié un poco cuando lo abandonaste y me lo dejaste con el corazón roto.
—Lo siento —sonreí apenada.
—Es agua pasada, tranquila. —Me abrazó—. Cuida bien a Scaramouche, ¿sí? Cuida a mi pequeño, por favor. Cuando comenzó a tener emociones, comenzó a parecerse mucho a mi pequeño Soma, y le tomé aún más cariño, por lo cual espero que pueda ser feliz siempre.
—Prometo siempre estar para él y cuidarlo por el resto de mi vida, en serio. —Abracé a Ei con fuerza—. Gracias por contarme esta historia Ei, sé que debió ser muy duro para ti. Gracias por la confianza.
—No tienes nada que agradecer, al contrario, te agradezco a ti por llegar a mi vida y por escucharme ahora. —Nos soltamos del abrazo y nos sonreímos—. Y ahora terminemos el jajangmyeon y vayamos a casa, que aún faltan cosas por escoger.
—Realmente desearía que las bodas fueran más fáciles, esto es realmente complicado y más cuando se trata de elegir entre tantas cosas bonitas —me quejé—. ¿Aún falta el sabor y decoración del pastel?
—Sí, ayer me dijiste que no habías decidido qué diseño querías, así que debemos escoger eso. Agradece que el vestido de novia haya quedado desde el inicio, porque es lo más tardado.
—Creo que ya quiero que pase la boda y ser feliz con mi Scara para siempre.
—Creo que yo también —reímos.🦊: Bueno, creo que quedaba pendiente la historia de Ei, así que me pareció que era buena idea meterla primero 🩶. Supongo que ahora entienden muchas cosas y se han respondido algunas preguntas. Los episodios extras serán más o menos cortos. Según yo, este episodio es más corto que un episodio normal, igual y estoy medio cucus, pero bueno. Espero disfruten los episodios extras. No serán muchos, pero disfrutenlos 🩶.
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Código Salvation || Scaralumi AU ||
FanfictionCuando Lumine está al borde del abismo mental, se decide a pedirle ayuda a "Scaramouche", una inteligencia artificial cuyo propósito es el mismo que una línea de ayuda para gente con problemas mentales e ideas suicidas. Su ayuda puede ser de gran ay...