27. Desilusión.

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—Si bueno, los niños mienten mucho ¿no? En ese caso debe pagar la fianza de los cinco niños, para que se puedan ir con usted, debe cancelar un total de dos mil quinientos dólares.

—¿Dos mil quinientos?

El oficial se levanto molesto de su silla ante tantas preguntas de Robert.

—Señor ¿va a pagar oh no?

—Ok, ok, voy a pagar la fianza.

—Ok señor acompáñeme por favor.

Robert pago la fianza de los cinco, cuando los chicos salieron libres, el oficial señalo al señor Robert diciéndoles que su tío Robert era quien había pagado su fianza y los esperaba afuera, Lían se asombro al saber que tenía un tío.

—¿Tío Robert? ¿Quién es usted?

—¡Hola! A mí también me da gusto verlos, yo soy Robert ¿y tú eres?

—Yo soy Lían y ellos son mis hermanos Miguel, Ernesto, Noah y Kevin, ¡el que nos metió en este problema!

—¡Lían! —dijo Miguel—.

Robert se ríe al verlos discutir.

—Veo que se llevan bien ¿no? Bueno seguramente se deben estar preguntando ¿Quién soy yo? y ¿Por qué pague su fianza? 

—Exacto señor Robert, —Kevin lo observaba para saber si podría reconocerlo, pensando en que su padre lo pudo haber enviado—. No lo conocemos.

—Chicos voy a ser sincero con ustedes, escuche a unos amigos hablar muy bien de su bebida y aunque aún no la he probado, podría confiar en ellos para saber que es lo suficientemente buena, como para que lo estén comentando a todos, cuando ellos solo toman tragos caros, y veo que por esas bebidas han tenido ciertos problemas con la ley, ¡eso conmigo no pasara! ¡porque yo puedo hacer su bebida legal en el mercado de este país! y no solo eso, podría invertir mucho dinero en llevarla a distintos puntos de ventas.

¡Juntos podríamos hacer una gran empresa! ¿Qué dicen, les interesa?

Kevin lo seguía observando con desconfianza.

—No entendemos muy bien lo que quiso decir señor Robert.

—Lo que les digo, es que juntos podríamos hacernos ¡muy ricos! Ja, ja, ja.

Miguel se entusiasmó al oírlo.

—¿Cómo lo haría?

—¡Crenado una empresa! Los veo con hambre, ¿Qué les parece si los invito a comer algo y les hablo sobre la idea que tengo, se animan?

—¡perfecto! —dijo Miguel—.

Robertlos llevo a comer y al terminar, les comento lo que él había pensado y lesmostro sus planes mostrándoles y prometiéndoles un futuro brillante para ellos, y a los chicos les gusto la idea, también les prometió que podrían quedarse con él en su casa, y les daría comida y ropa nueva, al día siguiente empezaron a trabajar en su idea, crearon una empresa y la llamaron: «Company Of Brothers» y a su bebida la llamaron: «Party On The Beach».

El OrfanatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora