─ Capítulo 16. 𝓔𝒔𝒑𝒆𝒓𝒆́, 𝓒𝒐𝒓𝒂𝒛𝒐́𝒏.

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Su mano se movió por si sola, con su corazón palpitando al mil, no sabía si debía, si era un error hacerlo, si el se había cansado de esperar, que era un estúpido al pedirle aquel tiempo... Pero ya no soportaba no saberlo, ya no soportaba no escuchar su voz, tenía que hacerlo, tenía que marcarle a Alastor.

Su mano de inmediato agarró el teléfono de casa y marcó a aquel número de el locutor, este fue atendido a los segundos, sin saber que decir, quedando estático.

─ ¿Hola? ─ Sonó por la línea, todo quedó en silencio por solo 10 segundos, Lucifer tomó valor y contesto.

─ H-Hola Al... ─ Fue lo único que se ocurrió decir, sus nervios lo atacaban, pero había logrado hablar, cosa que muchas veces no podía. Volvió a escucharse un silencio de ahora 5 segundos, hasta que el locutor por fin contestó.

─ B-Buenas tardes querido. ─ Cuando el locutor contestó aquello, al rubio le llegó algo de inseguridad, tenía miedo de nuevo, miedo de equivocarse y enterarse que el castaño ya no se interesaba en el.

─ Y-Yo...

─ ¡Que sorpresa esta llamada!, sinceramente me tomaste un poco desprevenido Luci, pero me alegro que fuera así, hace días que me hubiera gustado hablar contigo. ─ El castaño soltó, pues se había llenado de valentía para decir aquello, pues notaba lo nervioso e inseguro que estaba el otro en su voz.

─ Siento hacerte esperar tanto... ─ El omega se sintió algo culpable, esto lo noto el alfa, pues era muy común en el.

─ No tienes que disculparte lindo, no importa cuanto tiempo fue, yo esperé, corazón, y lo haría por años con tan solo hablarte. ─ Puede ser que al decir aquello, sonó demasiado romántico, tal vez dijo de más, pero ya no le importaba, Lucifer sabía de sus sentimientos. ─ Además, entiendo completamente tu confusion, yo la sentí también.

Lucifer sonrió, su cara se encontraba roja, por suerte Alastor no podía verla.

─ Gracias, Alastor. ─ Unos segundos después suspiro. ─ Sinceramente yo te extrañe mucho... Y... me gustaría volver a verte. ─ Comentó algo inseguro y nervioso, el castaño solo sonrió con ternura al escuchar lo anterior.

─ Yo también te extrañe mucho, lindo... A mi igual me gustaría verte, ¿te parece si nos vemos cuando abran el próximo salón de baile?, creo que adelantaron la fecha de su fundación, es en dos días, como siempre puedo llevarte en carro yo. ─ Contestó el locutor bastante emocionado, provocándole una risita a el rubio. Había logrado lo que quería, invitar a Lucifer a ese lugar.

𝙈𝙮 𝘽𝙖𝙗𝙮.. - 𝙍𝙖𝙙𝙞𝙤𝘼𝙥𝙥𝙡𝙚. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora