Nos volvimos a ver - Lawlight (Death Note) [2]

6: Libreta

—Podría decir que nosotros no tenemos mucha realidad social interiorizada.

—¡Hace un momento me miraste como si no me creyeras! —Parece confundido por las palabras de Jaiko.

—¿Como si? En realidad no...

Me pongo de pie para interunpir la tensión que estaban armando esos dos.

—¿Dónde esta el cuaderno? —Casi hablo muy alto. Pero es, como dije, para pasar la tensión.

Kenji no respondió inmediatamente.

—…Si se los doy… ¿Cómo sé que no lo usaran? —su tono se pone defensivo.

—No lo usaremos, el más propenso, creó, sería Light.

Le lanzó una mirada por poco intimidante cuando Jaiko dice eso de mí.

—No lo usaría.

—Puedes darme el cuaderno a mí —me ignora y se pone a persuadir sigilosamente a Kenji.

—¿Esperas que confíe en ti? —duda negando con la cabeza rápidamente.

—Jamás, en ninguna circunstancia mataría a alguien con una cosa como esa, ¿cómo sé que consecuencias tiene usar algo así? ¿Viste si tenía reglas o algo escrito en las primeras páginas?

L toma su café escuchando, también analizandonos a cada uno, supongo. Él que guarda silencio y escucha es él que analiza a los que hablan.

—¿Me estas sugiriendo que no sé que me espera por escribir un nombre? Puse el nombre de Ayumi al final de la carta: «para Ayumi».

—Es simple; dame el cuaderno, interrogaremos al vendedor. Te contaré que encontramos.

—Entiendo… —su voz se pone deprimida.

No sabría como lidiar con alguien deprimido, pero Jaiko es bueno empatizando, esto lo sé porqué cuando le conté que mi madre murió, él, sin que me de cuenta me estaba consolando. Me da vergüenza recordarlo, pero tampoco es que me moleste el recuerdo, solo que me mostré débil.

L no tiene habilidades sociales, puede relacionarse sin líos conmigo y Jaiko pero no con otros, lo he notado. En la universidad algunas chicas con gustos raros… parecen quererlo.

¿Hay chicas así? No sé si es bueno o malo que una chica esté con L, seria afortunada, también tendría problemas para entender a L. Y de ningun modo me gusta la idea.

Causa en mí una emoción agria y tóxica pensar en eso. Si sigo pensándolo me volveré una persona tóxica con cara de irritación, no quiero eso, no me gustaría ser así, es mejor no alimentar ese pensamiento.

Jaiko y Kenji van a una habitación y vuelven con un cuaderno negro.

Ojeando la libreta, Jaiko parece estar leyendo algo, decidimos no perder tiempo he ir a dónde el vendedor rápido:

—Dame eso. —Le ordeno con entonación de rabia leve y oscuridiza.

—No te lo daré.

—Ya se lo diste a L, quiero leer las reglas.

—No. —me dice calmado.

¡Buenas desgraciado/as!
Ya saben, si tienen algo que comentar...