Dante está parado en la puerta del despacho, su mirada oscura se ha vuelto fría y su cuerpo se tensa bajo el traje al ver como me agarra mi padre. Lleva dos hombres detrás que han desenfundado las armas y enfocan a su objetivo.
—No te lo vuelvo a repetir Rafael, suelta a mi mujer —da dos pasos en nuestra dirección sin quitar los ojos de mi padre, sus ojos brillan de una forma que me dan miedo, jamás lo he visto así.
Pero mi padre, o no se ha dado cuenta, o es un insensato.
—¿Cuando me ibas a decir que te estabas follando a mi hija? —me zarandea del brazo sin soltarme. —¿Y tú? Jamás pensé que fueras tan ambiciosa como para abrirte de piernas —esas palabras se me clavan en el alma y no puedo detener las lágrimas que me caen por las mejillas, arrastrando el maquillaje por mi rostro.
Dante hace el amago de acercarse más, pero mi padre lo detiene, sacando un arma con su mano derecha y colocándola en mi sien.
—Quieto ahí, si la quieres...vamos a negociar las condiciones —presiona el arma contra mi cabeza y me quedo petrificada en el sitio.
No puede ser...no puede ser que mi padre me amenace con una pistola.
—Suelta a mi mujer, y si ella quiere, te dejaré vivir —su voz rasga el aire cuando pasa por su garganta, intenta trasmitir calma y serenidad, pero solo hace falta mirarlo a los ojos para darse cuenta de la ira que vibra en su interior.
—De eso nada Falcone, te has casado con mi hija menor y voy a sacar tajada de esto...y sin mi consentimiento...eso es una falta grave en nuestra familia, sin contar el ultraje de acostarte con ella... —mi padre es imbécil.
—Papá...por favor.
Lo único que consigo llamando su atención es que me agarre del moño, tirando de mi pelo y haciéndome más daño todavía, sin quitarme el arma de la cara.
—Has interpretado muy bien tu papel de puta —susurra contra mi cara, y puedo ver sus pupilas de cerca ¿está drogado?
Pero hasta aquí hemos llegado, era la distracción que Dante necesitaba para saltar sobre mi padre. Lo desarma en un segundo y estampa su cuerpo contra la pared del fondo.
—¡Sacadla de aquí! —ruge, pero no se gira a mirarme.
—¡NO!, no, yo me quedo —uno de sus hombres se acerca a mi, pero se detiene.
—Patrizia—su voz es una orden que no acepta una negativa, pero ahora soy su esposa y no va a darme órdenes como a sus hombres.
—No Dante. No voy a ir a ninguna parte —me planto con las manos en las caderas y me niego a ser arrastrada por uno de sus hombres.
Me mira durante un segundo, desafiándome con los ojos, pero le devuelvo el desafío y sé que se lo cobrará más tarde, pero acepta.
Arrastra a mi padre y lo deja de rodillas en el centro de la habitación.
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Secretos con el señor de la mafia (+18) [Borrador]
RomanceLo que empezó siendo tu ilusión, se convirtió en la peor obsesión de él. Un romance explosivo, dominante y ardiente. Actualización: Completado : Borrador En proceso : ✔️ Verificado y editado [Me siento en la libertad de variar la historia y su conte...