𝓒𝓪𝓹í𝓽𝓾𝓵𝓸 14

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Ya pasaba de la media noche y la fiesta no parecía estar por terminar lo que molestaba a Link. Algo que molesto de las fiestas es que siempre los reporteros querian entrevistas para sus revistas o programas de chismes y esa noche ___, Link y el pelinegro habían dado mucho de que hablar.
Después de una medida hora de dar explicaciones a cada reportero Link logró salir de la ola de flashes para reunirse con ___ detrás del salón.

-Hola extraño- dijo al mirar a Link.

-Perdón por la tardanza -le extendió la mano para ayudarla a levantarse de la silla -¿Te quitaste los tacones? -dijo al notar que ahora era unos centímetros más baja y los tacones en su mano izquierda.

-Si, me cansé y creo que ya no volveremos o si? -Link negó mientras empezaba a caminar a la puerta trasera del salón.

Al llegar a la puerta, Link la levantó en sus brazos y ella soltó un pequeño grito de la sorpresa.

-Vas descalza y el camino de allá afuera es de piedra -le explicó al ver su confusión.

Aún sorprendida permaneció en silencio mientras el la sostenía en sus brazos y caminaban hacia afuera del salón, afuera ya había empezado a hacer frío y la piel de los brazos de ___ se erizó al sentir el viento rozarla, quería calentarse con sus brazos pero con una mano sostenía las zapatillas y con la otra se aferraba a cuello de Link para no caerse aunque sabía que él no la dejaría caer.
Link caminó con ella hasta llegar a las puestas de una casa que era el triple de grande de lo que era su casa de Link, dejó a ___ con sus pies descalzos en el suelo y abrió la puerta. El interior de la mansión era hermoso, tanto que la dejaba sin aire y eso que solo era la sala principal donde podía caber la casa de sus padres y tal vez aún  sobraría espacio.

-¿Estámos en algún hotel? -entró lentamente, sentía que sí caminaba normal dañaría el suelo de madera por caminar normal.

-No, está es la casa de mis padres pero en las mañanas si tenemos servicio a la habitación así que no dudes en pedir algo -cerró la puerta detrás de él.

-Esto es increíble, no entiendo como es que mientras tus padres tienen una casa tan grande hay niños que duermen en cajas de cartón y el hecho de estar aquí me hace sentir mal -

-Si te hace sentir mejor, mis padres donan una generosa cantidad de dinero para hacer más casa hogares para los niño que viven en esas circunstancias-

-Si, un poco -volteó a mirar a Link -¿Donde dormiré? -

-Ven -la tomó de la mano y subieron las grandes  escaleras que estaba frente a la gigantesca sala de estar -Las habitaciones estan es el segundo piso, ahí fue donde pusieron tu mochila y tus pertenencias -

Al llegar al segundo piso parecía ser una casa, la decoración era de color más claro con lámparas blancas en el pasillo, había sillas de espara y en las paredes había dos puertas con adornos en cada lado.
Link en ningún momento soltó la lado de ___ hasta que llegaron al final del pasillo y solo lo hizo para abrír la puerta de la habitación, al abrir se podía ver que la habitación en su mayoría estaba desocupada pero la enorme cama y los pocos muebles que habían la dejaron sin habla.

-Aquí están tus cosas -dijo Link deslizando su mano por la escalada de ___ para que entrara a la habitación -sí nesecitas algo llamame, hay un teléfono al lado de tu cama y también estoy es la habitación de a lado-

-Esto parece la habitación de una Princesa -dijo ignorando las palabras de Link.

-¿___? -la llamó y ella pareció reaccionar -¿Éstas bien? -

Asintió y al mismo tiempo parpadeaba intentando aclarar su vista.

-Si, solo... -suspiró y volvió a la realidad -¿Puedo darme una ducha? -

¿Jugamos a ser novios? Link y tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora