𝚜𝚘𝚕𝚘 𝚊𝚖𝚒𝚐𝚘𝚜 • 6ta RD Harry Potter

24. Verona

Best Years - 5sos

La primera semana fue bastante tranquila, con los chicos hacíamos competencias para ver quién recolectaba más uvas en una hora sin necesidad de magia, hacíamos fogatas en la parte trasera de la casa, usabamos mucho la piscina para hacer nuestras fiestas de cuatro personas, era divertido hacer competencia de clavados y reírnos por las maneras tan raras en las que saltabamos.

Cuando decidimos descansar y salir a explorar el pueblo usando el auto muggle del padre de Theodore, noté que Theodore me miraba más de lo normal con nostalgía, lo hacía cuando Fred también me estaba mirando mientras me medía la ropa que quería comprarme. Al final de ese día estábamos explorando las calles de Verona a pie, pasamos por el muro de Julieta lo que me hizo sonreír mucho, deje a los chicos detrás de mí mientras corría, cuando volteé a verlos acercarse.

Fred venía de primero cargando mis bolsas y tropezando pero no cayendo con las rocas que sobresalían del piso, Matteo muy relajado con las manos en los bolsillos le seguía riendo de cada paso, y por último Theodore también relajado, con una sonrisa pequeña mirándo cada movimiento de mi cuerpo, cómo el vestido que traía puesto se movía conforme daba la vuelta, cómo mis ojos estaban a punto de desaparecer por mi sonrisa enorme, pero cuando Fred me cargó por la cintura dando vueltas y haciéndome reír su sonrisa se volvió una línea con las comisuras diminutamente arriba.

-¿Le dejarás una carta a Julieta? -preguntó Fred sacándome de mis pensamientos

-¿Quién crees que soy? -dije fingiendo ofensa sacando una pequeña carta doblada de mi bolso

Le dí un beso a la carta, la extendí a los labios de Fred esperando que también dejará un beso. Me acerqué al muro buscando algún lugar en el que pueda dejar la carta, encontré el lugar perfecto y la coloque con cuidado. Me alejé y seguí admirando el muro sintiendo a Fred abrazarme por detrás besando mi mejilla, mi mandíbula y mi cuello haciéndome sonreír; de reojo ví a Matteo hablando con alguna chica al otro lado, también noté a Theodore observar la pared con algo que no supe descifrar en su rostro.

Theodore a pesar de ser mi mejor amigo también era una persona llena de secretos, muy reservada, pero muy leal y muy generoso, eso definitivamente lo noté en el momento que interpuso mis sentimientos primero antes de decirme que lo estaba lastimando cuando acepté esa propuesta, luego mentirme que no sentía nada, después evitar el tema y volver a expresarme cómo se sentía cuando estuve por terminar todo. Era extraño, a veces decía la verdad y a veces la evadía cuando le convenía.

-Theodore tiene algo -le susurré a Fred

Él comprendió asintiendo y me soltó mirando a la pared, me acerqué a Theodore con cuidado y empujé ligeramente su brazo con mi codo. No logré que me mirará, pero si un ligero ruido de afirmación para que siguiera.

-¿Le quieres dejar una carta a Julieta? -pregunté juguetona

-Lo hice hace algunos años -rió sarcástico

-¿Te respondieron?

-Sí... hace un año

-¿El consejo te sirvió?

-No -bufó

-¿Estás bien, Theo? -susurré preocupada tomando su brazo mirándolo fijamente

-estos últimos años han sido los mejores de mi vida... -se quedó callado unos segundos y me miró a los ojos. sus ojos estaban rojos y acuosos- porque tú estabas en ella y porque me enamoré de ti sin saber que mierda era el amor

-Theodore...

-No debería estarte diciendo esto cuando tienes a tu novio aquí. Ni siquiera debería seguir hablando porque terminaré pidiéndote algo que no puede darme.